Bioplásticos "más sostenibles" para garantizar la seguridad del medio marino

AIMPLAS, el Instituto Tecnológico del Plástico, está desarrollando nuevas metodologías estandarizadas de alta fiabilidad para evaluar la biodegradación, la desintegración y la ecotoxicidad de los bioplásticos en el mar. 

A través del proyecto Aigua Marina, la entidad busca impulsar soluciones de plásticos biodegradables más sostenibles y seguras para el medio marino. 

En concreto, la iniciativa permite realizar un "minucioso análisis" sobre el efecto en este tipo de ambientes de los bioplásticos que se comercializan para ayudar a las empresas a llevar al mercado productos "verdaderamente inocuos y biodegradables". En especial, se centra en aquellos en los que su uso está destinado al mar, entre ellos, los relacionados con las artes de pesca. 

[Criptografía cuántica 'made in Spain' más barata y sencilla de implantar que las redes ópticas más potentes]

Johana Andrade, la investigadora del Laboratorio de Biodegradación y Compostabilidad de AIMPLAS, explica que el reto principal que afronta este proyecto se basa en "reproducir a escala de laboratorio las condiciones del mar, dividido en diferentes zonas, cada una de ellas con particularidades a nivel de carga microbiana, nutrientes, pH y temperatura". 

Según explica, la investigación permitirá generar "un alto nivel de innovación" a nivel metodológico que "fortalecerá el conocimiento y la tecnología adquirida" para consolidar esta línea de investigación y, así, "fomentar las actividades de transferencia y cooperación con las empresas". 

Asimismo, AIMPLAS también está trabajando en el proyecto Pyrasmic, una iniciativa centrada en aportar a las empresas una metodología fiable de detección, identificación y cuantificación de microplásticos en aguas de consumo humano.

María Lorenzo, investigadora del Laboratorio de Técnicas Cromatográficas de AIMPLAS, señala que el instituto ha avanzado en unas novedosas técnicas para evaluar este elemento en diferentes puntos del proceso industrial. Esto, apunta Lorenzo, "permite actuar para reducir la presencia o generación de microplásticos y mejorar la seguridad de los productos para preservar la salud y la calidad de vida de la ciudadanía". 

Financiando por la Unión Europea

Ambas iniciativas cuentan con la financiación del IVACE (Instituto Valenciano de la Competitividad Empresarial) a través de los fondos FEDER (Fondo Europeo de Desarrollo Regional) de la Unión Europea, dentro del Programa Operativo FEDER de la Comunitat Valenciana 2021-2027.

Estas ayudas están dirigidas a centros tecnológicos de la región para el desarrollo de proyectos de I+D de carácter no económico realizados en cooperación con empresas para el ejercicio 2022.