Enric Pardo, CEO de Exaprint.

Enric Pardo, CEO de Exaprint.

Empresas

La imprenta centenaria que ahora usa la inteligencia artificial para digitalizar su competitividad

Gráficas Minerva, ahora Exaprint, nació nace 100 años en Barcelona. Hoy forma parte de la multinacional Cimpress y prevé invertir 3,5 millones en I+D. 

29 noviembre, 2021 01:27

Noticias relacionadas

Enric Pardo (Barcelona, 1969) tenía 27 años cuando, tras estudiar Administración y Dirección de Empresas e iniciar su carrera profesional en el sector de la edición gráfica, concretamente en la parte de producción, decidió convertirse en empresario.

No partía de cero. Adquirió el negocio de Gráficas Minerva empresa familiar creada en 1921 y uno de los proveedores de la compañía en la que Pardo trabajaba– por 180.000 euros (30 millones de las antiguas pesetas, que era la moneda en curso en 1997, año de la operación).

“Llegué al mundo de la impresión por casualidad, pero lo que sí tenía claro es que quería que realizar un plan de conversión hacia una empresa digitalizada”, cuenta Pardo a D+I en conversación telefónica.

Gráficas Minerva en sus inicios.

Gráficas Minerva en sus inicios.

“En aquel momento –explica– las empresas de impresión se dedicaban a realizar trabajos de gran volumen. Pero, tras la compra, mi estrategia fue especializarme en aquello que no querían hacer mis colegas y competidores: captar clientes que los demás no querían porque sus pedidos eran pequeños y no les sacaban rentabilidad”. 

¿Cómo? Agrupando esos trabajos de pocas unidades para imprimirlos de una sola vez. “Para ello diseñamos a principios del año 2000 un plan que implicó una importante inversión en tecnología".

"Era un momento complicado, pero decidimos seguir adelante”, recuerda Pardo, quien apunta a que “ser curioso por naturaleza es lo que siempre me ha llevado a explorar caminos diferentes”.

De Barcelona al resto del mundo

En el año 2005 lanzaron los servicios online de impresión y en 2008 conoció al industrial francés Nicolas Dematté. “Compartíamos el modelo de negocio, pero su plan estratégico estaba más maduro. En 2009 decidimos asociarnos y explotar nuestro proyecto a escala europea. Así fue como creamos la sociedad Exaprint”, detalla Enric.

En ese momento cubrían alrededor de 500 pedidos al día entre España y Francia. “En 2015 alcanzamos los 200 millones de facturación y fue cuando la multinacional Cimpress se fijó en nosotros”. [Cimpress actualmente cotiza en el índice Nasdaq y factura 2.800 millones de dólares].

Actualmente, Exaprint cuenta en Molins de Rei (Barcelona) con una planta de producción de 2.500 m2. En ella trabajan 60 profesionales formados en la cada uno de las etapas del proceso de impresión: preimpresión, calidad y posventa. En sus talleres, aseguran desde la empresa, se imprimen 350.000 m2 de papel cada día, se envían 4.000 pedidos y se ofrecen más de 35.000 referencias. 

Detrás de este crecimiento y consolidación hay “una obsesión por la automatización, la estandarización y la industrialización, e importantes inversiones en tecnologías”, asegura Pardo.

Inteligencia artificial para seguir creciendo

Su naturaleza curiosa ha llevado a este empresario a dar un paso más en la modernización de sus procesos con la incorporación de herramientas de inteligencia artificial dirigidas a aumentar la productividad y optimizar recursos. “En España hay miedo a arriesgar e invertir, y en el sector de la impresión ven el uso de internet y de la innovación como algo ajeno”. 

En la planta de Barcelona aplican esta tecnología para crear planchas de impresión de forma automática que permiten ajustar y reducir la cantidad los desperdicios de papel, optimizando esta materia prima; para realizar labores de mantenimiento predictivo; y están trabajando en la incorporación del reconocimiento visual de los trabajos para emitir etiquetas de envío de forma automatizada.

Exaprint va a realizar una inversión de 3,5 millones de euros en los próximos tres años en este centro para incorporar más tecnología. Gracias a esta estrategia, prevé incrementar su facturación en más del 60% y alcanzar los 15 millones de euros para 2023.

Entre los proyectos previstos destacan: la ampliación de la planta en 500 m2; la especialización en la impresión de gran formato gracias a la adquisición de maquinaria de última generación, que permitirá aumentar y controlar al mismo tiempo la eficiencia energética; y la inversión en I+D para continuar con la optimización del proceso de impresión.