Qué ciudad del mundo es la número uno en implementación del llamado ‘gobierno electrónico’? La respuesta más probable seguramente sea Tallin, dado el reconocido liderazgo de Estonia en este campo. Sin embargo, Moscú se lleva la palma: ha obtenido el primer puesto en el Índice de Desarrollo de Gobierno Electrónico de las Naciones Unidas por sus logros en el gobierno electrónico.
Moscú es la mayor ciudad del mayor país del mundo, y el noveno más poblado, según datos de Statista. En la capital Rusa conviven más de 12 millones de habitantes que disfrutan de la segunda mayor cobertura wifi en áreas públicas (un 100% de cobertura en el caso del transporte público) y tres millones de conexiones registradas diariamente.
La conectividad no es lo único que caracteriza al desarrollo de esta ciudad inteligente, tal como explica a INNOVADORES Eldar Tuzmukhametov, director del Smart City Lab del Gobierno de Moscú, de visita por Barcelona para asistir al Smart City Expo World Congress. "Estamos probando, por ejemplo, un ultrasonido que un médico podría controlar de forma remota para realizar manipulaciones con el paciente a cualquier distancia”, comenta. En lugar de llevar al paciente al hospital, será posible -comenta Tuzmukhametov- entregarle el dispositivo y que cualquier médico le diagnostique. Esta tecnología ya se utiliza, de hecho, en el hospital Morozov en Moscú.
Inteligencia artificial y salud
Otros proyectos de salud pasan, cómo no, por la inteligencia artificial y el big data. “Hace unos meses lanzamos una red neuronal llamada RadIO que detecta el cáncer de pulmón temprano con una tasa de precisión del 88% [dato no validado, por el momento, por ninguna institución científica]. Estamos desarrollando la tecnología aún más para lograr el 100%”, señala “Para procesar 1.000 exploraciones, RadIO necesita 30 minutos, algo imposible para un especialista humano”, añade. Dado que es una tecnología de código abierto, disponible en GitHub, cualquier institución puede crear sus propias aplicaciones a partir de ella.
También tienen otro sistema llamado CardIO, que ayuda a los médicos a reconocer la enfermedad cardiovascular. Y en estos momentos están probando una tecnología que genera modelos de predicción de epidemias en toda la ciudad. “La enfermedad de la gripe entre los estudiantes se pronostica con una tasa de precisión del 78% y del 90% en algunos grupos de edad específicos”, asegura. Lo sabe porque, gracias a su colaboración con el Instituto de Investigación de la Gripe de Rusia, han podido contrastar las predicciones con el número de enfermos real.
Transporte público y compartido
En cuanto al transporte, el reto es mayúsculo en una ciudad caótica como Moscú (o más bien “dinámica”) como Tuzmukhametov prefiere definirla. “Más de 8,5 millones de personas usan el metro de Moscú todos los días. Eso es más que la población de Noruega”, señala. Su objetivo es crear un ambiente cómodo, para alentar a los a residentes a usar el transporte público, con facilidades como el wifi gratuito o estaciones de carga, tarjetas de viaje unificadas o incluso brazaletes o anillos inteligentes que sirven como medio de pago. También disponen de autobuses eléctricos, que quieren que reemplacen el total de la flota de aquí a 13 años.
La movilidad compartida es parte también de su estrategia para reducir los vehículos privados, con más de 19 millones de viajes compartidos desde 2015, según datos del Gobierno. Para optimizar el tráfico, han desarrollado un sistema que permite controlar y gestionar la circulación por carretera y el transporte público. “Hemos instalado más de 1,900 cámaras, 3.600 sensores de velocidad y 2.500 semáforos inteligentes en las calles. El big data nos ha permitido planificar las rutas de transporte público de manera eficiente. Esto -dice Tuzmukhametov- ha reducido un 46% la congestión desde 2010 y aumentado la velocidad media del tráfico un 13%.
Educación online
La digitalización de las escuelas de Moscú comenzó hace un par de años con un proyecto llamado el acceso a internet de banda ancha de alta velocidad proporcionado a cada escuela pública de la ciudad. Más allá de esto, apuestan por la enseñanza online, con la Escuela Electrónica de Moscú: un entorno digital educativo unificado en nube para alumnos, profesores y padres. Todas las escuelas estarán conectadas a esta plataforma de aprendizaje electrónico para finales de este año, según estiman.
Tuzmukhametov señala que este proyecto está directamente relacionado con un crecimiento del 15% del progreso académico en las escuelas que participan y un ahorro de costes administrativos del 88%. También se redujo a la mitad el peso de las mochilas, algo que las espaldas de los más pequeños agradecen.
Votaciones y reservas con blockchain
Otra cosa que no podía faltar en una ciudad inteligente es blockchain. En Moscú, esta tecnología es la base de la plataforma de votación electrónica no política -para la toma de decisiones de gestión de la ciudad- llamada 'Active Citizen', con más de dos millones de usuarios. La usan también para el servicio ‘Hogar digital’, que busca ubicar en internet las de vecinos y facilitar la tomar de decisiones colectivas para desarrollar las microcomunidades en la ciudad.
Se está implementando también otro piloto masivo basado en blockchain para la asignación de los espacios comerciales en las ferias de productores que se celebran cada fin de semana en Moscú. Estos espacios son gratuitos y la demanda supera con creces la oferta, lo que genera frustración entre los agricultores. “Gracias a blockchain, mejora la credibilidad y la transparencia del sistema, ya que cada persona recibe una justificación de por qué se ha rechazado o aprobado su solicitud”, comenta el director del Smart City Lab.
Ciberseguridad
En una ciudad hiperconectada, los riesgos asociados a un ciberataque se multiplican exponencialmente. “Todos los días recibimos muchos ataques de hacker: 40.000 intentos diarios para obtener claves secretas y 9.000 intentos mensuales de acceso a bases de datos”, indica Tuzmukhametov. ¿Cuál es la estrategia de Moscú en ciberseguridad? “Los datos personales confidenciales están protegidos por la ley. Las salvaguardas -como el cifrado de datos, el almacenamiento seguro o los requisitos de transmisión- son obligatorias para todos los departamentos y agencias gubernamentales”, afirma.
“La seguridad de la información es importante en todas las etapas del ciclo de vida de los datos, desde la recopilación hasta una mayor explotación. El sistema de protección de datos de los centros de procesamiento de datos en Moscú tiene una protección multinivel que utiliza los métodos más modernos y eficientes para combatir las amenazas cibernéticas”, añade el experto. Reconoce, no obstante, que necesitan trabajar más en la protección personal de datos, incidiendo en la alfabetización digital de los residentes.
Hecho en Moscú
Made in Moscow. Es el sello con el que la ciudad quiere posicionarse en el mundo como centro de referencia en tecnologías de la información (TI). “Más de 15 mil empresas del sector están registradas en la ciudad”, señala el director del Smart City Lab. De entre ellas, las compañías locales cuentan con privilegios sustanciales sobre impuestos a la propiedad e ingresos, asistencia para la atracción de inversión y apoyo en infraestructura. “Las empresas de esta industria que operan en Moscú aumentaron su rentabilidad una media de un 25% el año pasado, y la exportación de soluciones de TI desde Moscú está creciendo a un ritmo de un 16% anual”, señala.
Entre sus planes está incentivar más la exportación de tecnología. Cita como principal ventaja su experiencia en implementación de tecnología con los más de 12 millones de habitantes de Moscú. “Es fácil de escalar y puede soportar el procesamiento de datos masivos ??sin ningún retraso. Además, los especialistas en TI en Rusia son más baratos que en Europa o en EEUU, lo que hace que las oportunidades de exportación sean más atractivas”, concluye Tuzmukhametov.
Iniciativas público-privadas
Aunque la estrategia de impulso al desarrollo tecnológico de Moscú se basa en la colaboración con socios domésticos, también hay alianzas internacionales y ejemplos de asociación público-privada. Entre ellos:
- Rostelecom, proyecto de transmisión de telemetría sobre la implementación de una plataforma unificada de IoT que monitorea y controla más de 22.000 vehículos compartidos
- NtechLab, tecnología de reconocimiento facial para 160.000 cámaras al aire libre que cubren el 95% de los pasillos de entrada de los edificios residenciales.
- NetDragon Websoft, pantallas planas interactivas seleccionadas para su instalación en más de 7.600 aulas en las escuelas de Moscú.
- Nedap, sensores inteligentes de estacionamiento (sistema SENSIT) en 1.000 zonas de aparcamiento en la calle.