Gestionar hoy un restaurante con envíos a domicilio es más complejo que nunca. Hay que integrar las diferentes plataformas de reparto, varios medios de pago, otros repartidores logísticos… Siempre puede aliarse con una sola empresa de home delivery, pero claro, pierde el control de los tan valiosos datos.
La startup WinDelivey, con sede en Cáceres, ha desarrollado una plataforma tecnológica que unifica y centraliza todas las comandas, vengan de donde vengan. En 2019, cerró más de ocho millones de pedidos de cerca de 800 restaurantes en España y Portugal, especialmente, de dos grandes cadenas como son Burger King y Foster’s Hollywood.
Juan Carlos Preciado y Fernando Sánchez son las mentes detrás de esta empresa. Estos dos profesores de la Universidad de Extremadura crearon su propio negocio en 2008, bajo el nombre de Homeria, con el objetivo de transferir conocimiento a la sociedad. “Fue una travesía en el desierto”, recuerda Sánchez a INNOVADORES.
La oportunidad llegó en 2013 cuando hablaron con Burguer King. La cadena de comida rápida les lanzó el reto de crear un sistema para el reparto a domicilio. En dos meses tenían el prototipo. Hoy llegan a 400 restaurantes de la marca. Ahí nació WinDelivery.
Preciado especifica: “No somos un agregador”. “Tampoco competimos con Glovo o Deliveroo”, añade Sánchez. Entonces, ¿qué es WinDelivery? En primer lugar, es una plataforma B2B, es decir, no se dirige al consumidor, sino a la empresa. El sistema permite integrar todos los sistemas con los que trabaja el restaurante. Si un local tiene acuerdos con cuatro empresas de reparto a domicilio, hoy necesita cuatro canales de entrada distintos. Ellos los unifican a todos bajo un mismo sistema. Pero no solo a los agregadores, también centralizan en los sistemas de pago o los ‘riders’. “Nos integramos con más de 20 terceros”, indica Preciado.
Además de optimizar la eficacia operativa de los restaurantes y centralizar toda la entrega de comida, WinDelivery permite a sus clientes mantener toda la información generada. “Cuando trabajas con un agregador, los datos se quedan en sus manos”, señala Sánchez. “Tener unificados los datos aporta un gran valor”, apunta Preciado, por ejemplo, para invertir correctamente en una zona de influencia.
Toda la plataforma respira un aire muy “ingenieril”. “Otros ponen el foco en el negocio; nosotros, en la ingeniería”. Así, su plataforma aplica inteligencia artificial, por ejemplo, para dimensionar correctamente las máquinas que soportan el sistema. Un restaurante puede recibir puntualmente miles de encargos, esta carga de peticiones en un mismo momento podría provocar caídas. “Aplicamos algoritmos de machine learning para anticipar con una precisión de más del 95% cuántos pedidos va a haber en función del histórico”, dice Sánchez. Con esta información, pueden “balancear” las máquinas para atender a la demanda sin fallos.
Otra de las diferencias de WinDelivery es su enfoque económico. En 2019, facturó más de cuatro millones de euros, con un crecimiento interanual de más del 30%. Su equipo, asentado en Cáceres, no ha dejado de crecer y ya son 32 personas. “La empresa ha sido creada a pulmón”, reconoce Preciado. A pesar de que operan en un sector que mueve cifras importantes de inversión, esta startup no tiene fondos detrás. “Somos una empresa rentable, con EBITDA positivo donde lo normal es que sea negativo”. ¿La razón? “No venimos del mundo de los negocios, sino de la universidad y estamos acostumbrados a no gastar aquello que no tenemos”.