Nos encontramos inmersos en la transformación digital de las empresas y este cambio nos está obligando a replantearnos cómo llevar a cabo los diferentes procesos en los departamentos de recursos humanos. No olvidemos que es responsabilidad de este departamento todo lo referente a la gestión de las personas que integran las organizaciones.
Está cambiando el entorno, todo evoluciona muy rápido y es necesaria esta adaptación, este reinventarse para que las organizaciones no se queden atrás en la transformación digital.
Desde mi punto de vista, la función primordial de los departamentos de recursos humanos es la atracción y fidelización del talento, es conseguir que las personas que mejor se adecuan a nuestra organización y a un puesto concreto quieran formar parte de nuestra empresa y, una vez sean parte de nosotros, quieran continuar en la organización. En este aspecto tiene una importancia muy relevante el uso de las nuevas tecnologías, gracias a su uso se han reducido notablemente las tareas manuales que se requerían a la hora de iniciar y gestionar un proceso de selección.
Esta integración de nuevas herramientas en los departamentos de RRHH ha logrado que se agilicen los procesos de manera notable, reduciendo en gran medida la labor tediosa de introducir datos. Como resultado, ha dado paso a que los departamentos de las personas puedan dedicar su tiempo a otras labores más enriquecedoras, como es tomar decisiones, basándose en datos actualizados referentes a la fuerza laboral de la que dispone, y trabajar en conseguir una imagen de marca que proyecte al exterior los rasgos más atractivos de la empresa, enseñando al mundo en primera persona qué tipo de empresa es, generando el deseo en posibles candidatos de querer unirse a la organización.
Utilizando el desarrollo tecnológico en el área de RRHH, entre las múltiples políticas que las empresas pueden utilizar para atraer ese talento tan necesario, nos encontramos con el employment branding o imagen de marca.
Esta práctica consiste en que los empleados puedan contar en primera persona las experiencias que viven en el ámbito laboral, mostrando todas las políticas de RRHH que se lleven a cabo en la empresa y sus resultados narrados en primera persona, mostrar al mundo lo muy en cuenta que la organización tiene a sus colaboradores e integrantes.
Cada vez es más frecuente que las empresas dediquen parte de su presupuesto a utilizar campañas para conseguir reforzar una buena imagen de marca y que así lo perciban sus empleados, sus clientes y los candidatos potenciales. Algunas grandes empresas ya llevan algunos años de ventaja sobre el resto y están llevando a cabo grandes campañas de difusión para atraer nuevos candidatos.
Es una manera que las empresas tienen para poder llamar la atención sobre posibles candidatos, hacer que estas personas quieran formar parte de esa organización, quieran sentirse igual que los empleados que están contando su experiencia al trabajar allí. De hecho, ya es bastante habitual encontrar tanto en redes profesionales como en portales de empleo ofertas de trabajo orientadas a cubrir puestos de trabajo enfocados al employment branding o imagen de marca.
Otra utilidad que ofrece el employment branding es que desde los departamentos de RRHH puedan escuchar la voz del empleado, saber qué piensa, cómo se siente formando parte de la organización, lo cual nos da bastante información sobre cómo mejorar e implantar políticas dirigidas a su satisfacción y desarrollo profesional, qué necesidades están surgiendo.
La experiencia que el empleado cuenta es reputación para la empresa, lo que puede dar cierta ventaja competitiva respecto a los competidores y, por ende, ante los clientes.
*** Amparo García García es miembro de la Asociación Española de Directores de Recursos Humanos.