El Consejo de Ministros ha aprobado este martes la concesión directa de una subvención de 5 millones de euros a la RAE (Real Academia Española) para la ejecución del Proyecto LEIA (Lengua Española e Inteligencia Artificial).
Según ha explicado el Ejecutivo, esta asignación se enmarca dentro del PERTE (Proyecto Estratégico para la Recuperación y la Transformación Económica) de la Nueva Economía de la Lengua que, a su vez, forma parte del Plan de Recuperación y de la recién reformada Agenda España Digital 2026.
El proyecto LEIA nace de la unión del Gobierno y la RAE para desarrollar tecnologías y herramientas con el objetivo de que la inteligencia artificial (IA) procese de manera adecuada el español y, de esta forma, se incremente y mejore su uso en el ámbito digital.
Así, busca promover el desarrollo de una industria "basada en las tecnologías del lenguaje" que permita a las empresas y los productos en este idioma "competir en la revolución tecnológica en marcha".
Según explica el Ejecutivo en la referencia del Consejo de Minitros, mediante esta acción, se generarán recursos, herramientas y modelos que se pondrán a disposición de centros de investigación, empresas y usuarios "generando una importante transferencia de conocimiento a la economía".
Entre las acciones previstas dentro de este proyecto destacan la creación de un observatorio de neologismos y tecnicismos que recopile automáticamente este tipo de términos a través de la IA, así como herramientas de verigicación lingüística de contenido y de respuesta automática.
375.000 conjuntos de datos
La RAE anunció a finales de 2019 en Sevilla la creación de LEIA como una iniciativa de colaboración con las grandes tecnológicas con el objetivo de prestar su conocimiento del idioma para entrenar a los algoritmos.
En concreto, se ponían a disposición 375.000 conjuntos de datos derivados del diccionario, con de 1.000 a 2.000 actualizaciones anuales junto a 325 millones de formas léxicas registradas, que aumentarán "a 625.000 millones de formas en un futuro próximo".
Al proyecto se sumaron grandes firmas como Telefónica, Amazon Web Services o Microsoft en un primer momento, aunque se fueron añadiendo otras como Twitter o Google.