Fifth Wall, una firma de inversiones asentada en Los Ángeles (California), le planta cara a la incertidumbre del mercado mobiliario con un fondo de inversiones destinado a “limpiar” la industria.
La compañía destinará 500 millones de dólares en proyectos que contribuyan a neutralizar la huella de carbón del sector inmobiliario. Con esta cifra, Fifth Wall ya dispone de un total de tres mil millones de dólares en activos.
La industria de bienes raíces no solo contribuye al cambio climático de manera drástica, sino que también es una de las más afectadas por los efectos de las inundaciones, los huracanes e incluso los incendios. Todos estos factores contribuyen al descenso del valor de las propiedades que se encuentran en zonas de riesgo.
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Según un informe de la consultora McKinsey, el 39% de las emisiones globales provienen de esta industria. Un 11% de los gases contaminantes son generados por los materiales de construcción de los edificios, principalmente el cemento y el acero. El resto proviene de lo que emiten los edificios en sí mismo y de la energía que consumen.
Los beneficios de invertir en tecnologías y programas que ayuden a reducir el impacto medioambiental en las edificaciones serán evidentes para los inversores, los gobiernos y, por supuesto, los ciudadanos.
El nuevo fondo de Fifth Wall se centrará en apoyar proyectos de software, hardware, energía renovable, almacenamiento energético, edificios inteligentes y tecnologías de captación de carbón.
“A pesar de que la industria de bienes raíces ha estado posicionada, históricamente, como una de las grandes contribuyentes de gases de efecto invernadero, poco se ha hecho en la inversión en tecnología climática para descarbonizarla”, asegura Brendan Wallace, cofundador y asociado de Fifth Wall. “Nuestro nuevo Fondo Climático se posiciona como un auténtico líder en la industria con la promesa de invertir en soluciones reales”.
Fifth Wall asegura que se trata del primer fondo privado creado para descarbonizar el sector. En él han participado propietarios clave de bienes raíces y líderes del sector energético. BBVA, British Land, Camden Property Trust, Cosan, Hilton, Host Hotels & Resorts, MGM Resorts y UDR son algunos de los nombres de las compañías y los conglomerados que han apoyado el ambicioso fondo.
Wallace señala que, hasta la fecha, en toda la industria solo se han invertido unos 94,6 millones de dólares para mitigar los efectos del cambio climático y en programas de investigación y desarrollo. Esto solo en la última década.
“Existe una distinción entre implementar tecnologías existentes e invertir en nuevas tecnologías que permitirán a la industria alcanzar la neutralidad cero”, comenta Greg Smithies, uno de los dirigentes del equipo de Inversión Climática. “Las organizaciones de bienes raíces que priorizan las inversiones en I+D han conseguido generar una ventaja competitiva real sobre sus rivales”.
Las primeras inversiones del Fondo Climático
Ya hay varias compañías que se han visto beneficiadas por el fondo de 500 millones de dólares de Fifth Wall. Entre ellas destaca Assembly OSM, que está transformando la manera en la que los edificios son diseñados. La empresa usa, principalmente, materiales ecológicos y todos sus bloques de construcción son instalados directamente en los emplazamientos finales de los edificios.
Assembly OSM fue fundado en Nueva York en 2018 y en su serie A más reciente logró captar 38 millones de dólares de Fifth Wall y otros dos inversores, según datos de Crunchbase.
Por su parte, Brimstone, una empresa de Berkeley, está desarrollando el primer cemento con carbono negativo. Sus responsables aseguran que el cemento es un material que, tradicionalmente, ha sido complicado de descarbonizar, al menos hasta ahora. En su ronda A obtuvo 55 millones de dólares provenientes de Fifth Wall, Breakthrough Energy Ventures y otros nueve inversores.
Electric Hydrogen, con 222 millones de dólares captados, es una de las últimas compañías en sumarse al tren de la producción de hidrógeno limpio. Llama la atención que la compañía vio la luz hace tan solo un año. En su última ronda de serie B, cerrada en junio de este año, captó la friolera cifra de 198 millones de dólares. La ronda, una vez más, fue liderada por Fifth Wall.
ICON Build se suma a la moda de la construcción de viviendas con paneles impresos en 3D. La firma ya ha comercializado las primeras casas fabricadas con esta tecnología en Estados Unidos. La ciudad elegida para su asentamiento ha sido Austin (Texas). Fundada en 2017, la compañía ya ha recaudado una inversión de 451 millones de dólares a la fecha, lo que deja patente el interés de la industria por volcarse en la tecnología de impresión 3D.
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Por último, SPAN ha modernizado uno de los componentes del hogar más estancados en el tiempo: el cuadro eléctrico. Su nuevo panel, que tiene un coste base de 4500 dólares, presenta un diseño con un toque moderno e integra conexión WiFi, celular. Además, es compatible con smartphones y se puede actualizar su software en cualquier momento. Fifth Wall intervino en su última ronda, momento en el que la compañía captó 90 millones de dólares.