Nadie debería presumir de ser capaz de predecir el futuro, pero hay que reconocer que en ocasiones tampoco resulta tan complicado. No, al menos, cuando hablamos de la particular idiosincrasia de esta España de las autonomías.
Basta que haya un proyecto o una subvención estratégica en liza para que cada región anuncie de forma convincente que es la que reúne las mejores características para resultar agraciada.
Se ha venido viendo en asuntos como los fondos europeos y los PERTE. Mi región era mejor que la tuya para albergar una fábrica de baterías; mi región era mejor que la tuya para liderar la transformación de la industria naval… Y así suele ser para casi todo.
Por eso ya no debe extrañar que, a día de hoy, no haya una unanimidad clara sobre dónde debe ubicarse la sede de la futura Agencia Espacial Española.
Sin más candidaturas oficiales que la anunciada por Teruel, D+I ya sugirió hace una semana que la carrera no había hecho más que comenzar y que, seguramente, a este anuncio seguirían otros.
Hablábamos de León, donde la Agencia Espacial Europea (ESA) va a ubicar un centro de incubación de proyectos aeroespaciales, como uno de esos candidatos posibles que tarde o temprano acabaría postulándose. De momento, en tierras leonesas no hay pronunciamiento oficial.
Sugeríamos también el indudable potencial catalán… y también el andaluz. Pues bien, es desde el sur desde donde ha llegado la segunda confirmación oficial, que no sólo es la confirmación de que Sevilla quiere postularse para albergar esa sede sino la confirmación de que la carrera que se presuponía ya es una realidad.
A la espera del Gobierno central
Así pues, Teruel ya tiene a su primer competidor, la capital de Andalucía. Esta semana el consejero de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades, Rogelio Velasco, ha mostrado el respaldo de la Junta de Andalucía a la candidatura, tras la reunión mantenida con el alcalde de la capital hispalense, Antonio Muñoz.
La creación de este organismo está prevista en la nueva Ley de Ciencia, que fue presentada en Consejo de Ministros en febrero y que acaba de entrar en el Congreso. España es el único país de los grandes europeos que no contaba con una agencia propia.
Velasco ha argumentado que la presentación de dicha candidatura viene avalada, fundamentalmente, por el liderazgo de Andalucía en el campo de la industria aeroespacial europea, con 2.071 millones de euros de facturación, más de 12.000 empleos directos, más de 140 empresas y una aportación del 1,41% al PIB andaluz.
Además, se ha referido a otras ventajas cualitativas que hacen a la capital hispalense merecedora, a su juicio, de albergar este organismo, como son "una moderna red de infraestructuras que posibilitan un rápido acceso desde cualquier punto de España y Europa o un ecosistema de parques científicos y tecnológicos que acogen más de 1.500 empresas".
También ha destacado la ubicación en Sevilla del único Parque Tecnológico de toda España que está dedicado íntegramente al sector aeroespacial, Aerópolis; así como las 16 escuelas de Ingeniería con las que cuenta la comunidad. Entre ellas, la de la Universidad de Sevilla que, según ha subrayado "es referente de excelencia en toda Europa, pionera en la transferencia del conocimiento y con formación especializada en vehículos aeroespaciales, navegación aérea o ingeniería aeronáutica".
Junto a esos factores, el consejero de Transformación Económica ha apuntado que la ciudad y su provincia tienen, además, una experiencia contrastada en la esfera aeroespacial. Al respecto, ha recordado que Sevilla ha sido sede de importantes eventos del sector: en 2019, fue Capital Europea del Espacio y ostentó la presidencia de la Comunidad de Ciudades Arianne, y ha acogido también congresos tan destacados como el Aerospace & Defense Meetings-ADM.
Por otro lado, Rogelio Velasco ha querido resaltar "la referencia científica e innovadora" que constituye Andalucía en el campo de la astrofísica y del espacio, con instalaciones punteras como el Observatorio Astronómico de Calar Alto o el Instituto de Astrofísica de Andalucía.
Con respecto a este último centro, ha subrayado que cuenta con el distintivo de excelencia Severo Ochoa y que goza de prestigio internacional por su investigación científica. A la labor que desarrollan esas infraestructuras se suman también la actividad de la Fundación Fada-Catec o la del centro de vuelos experimentales ATLAS en Villacarrillo (Jaén), que ya está siendo utilizado para el lanzamiento de plataformas HAPS (High Altitude Pseudo Satellites).
Estrategia Aeroespacial de Andalucía
En su intervención, el titular de Transformación Económica también ha aprovechado para resaltar el impulso que está dando el gobierno andaluz a las diversas herramientas que permiten conectar el conocimiento generado para aprovechar todas las oportunidades en el entorno espacial.
Así, ha recordado la puesta en marcha de la Estrategia Aeroespacial de Andalucía y ha puesto el foco en el apoyo desplegado para promover instalaciones estratégicas como CEUS en Huelva, el Centro de Fabricación Avanzada en Cádiz, el futuro Centro de Innovación UAVs (vehículos aéreos no tripulados) y Movilidad Aérea Urbana que tendrá su sede en Sevilla, o el IFMIF-DONES y el Centro de Inteligencia Artificial, ambos en Granada.
De igual modo, ha aludido a la puesta de la Junta por la formación que requieren este tipo de infraestructuras y de sectores, "una labor en la que destacan de manera más que notable las universidades andaluzas", ha remarcado.
Al respecto, ha asegurado que Sevilla va a contar con el primer Centro Integrado de Formación Profesional del sector aeroespacial de Andalucía, que se ubicará en La Rinconada.
Estas son las cartas que Sevilla y la Junta de Andalucía ponen sobre la mesa frente a las que ya habían anunciado Teruel y el gobierno de Aragón.
"Tenemos posibilidades ciertas y vamos a poner todo nuestro esfuerzo para que la Agencia recale en Teruel", ha asegurado Maru Díaz, la consejera de Ciencia, Universidad y Sociedad del Conocimiento.
El proyecto de Aragón
Como puntos fuertes del proyecto, ha destacado la experiencia del Centro de Estudios de Física del Cosmos (CEFCA) -responsable del Observatorio Astrofísico de Javalambre y que ya ha colaborado con la Agencia Espacial Europea en distintas misiones- y del aeropuerto de Teruel -banco de pruebas para el lanzamiento de pequeños satélites de la mano de la empresa PLD Space, responsable del Miura1-; así como la calidad del cielo de Teruel; la próxima apertura del centro de difusión de la astronomía Galáctica y en la parte más académica, el máster de Física del Universo y la cátedra de drones y aviación civil, con la que la capital aspira a convertirse en referente nacional en materia de aeronaves no tripuladas.
"Disponemos de un entorno experimentado y con grandes posibilidades. Teruel es el lugar idóneo para situar la sede de la futura agencia. Las condiciones previas suponen un punto de partida óptimo, pudiendo establecerse sinergias en el territorio, así como la generación y formación de personal cualificado", ha señalado.
Lo dicho, la carrera (la pelea) está servida.