Combustibles alternativos para el sector de la aviación: la excepción canaria convertida en reto innovador
La moratoria que exime a Canarias del reglamento de uso obligatorio de combustibles sostenibles será utilizada en la región para intentar crear un ecosistema que la convierta en referente en producción.
20 septiembre, 2023 02:39Canarias no tendrá que cumplir los deberes impuestos por la Unión Europea en materia de utilización de combustibles alternativos y sostenibles en la aviación (SAF, por sus siglas en inglés), uno de los sectores innovadores con más potencial en la próxima década.
Pero estar exento no es lo mismo que no estar comprometido. O dicho de otra manera, el gobierno de la región insular va a utilizar esa exención como revulsivo para intentar posicionarse en el sector.
Vayamos por partes. La pasada semana, el Parlamento Europeo aprobó la normativa que impulsará el uso de carburantes alternativos en la aviación. Este texto establece que a partir de 2025 y hasta 2050, los carburantes alternativos tendrán que ir ganando peso en el sector.
Así, el 2% de combustibles usados por las compañías deberán ser alternativos en 2025 e ir subiendo el impacto hasta que en 2050, el combustible sostenible ya suponga el 70%.
Pero este Reglamento sobre el Uso de Combustibles Alternativos en el Transporte Aéreo incluía una serie de excepciones. Entre esas excepciones estaban los vuelos a las regiones ultraperiféricas, entre las que se encuentra Canarias, que dispondrán de un plazo más amplio y benévolo para la aplicación de la norma.
El motivo de la moratoria no es otro que demostrar una especial sensibilidad hacia estos territorios, que dependen exclusivamente del sector aéreo en ámbitos económicos clave como el turismo. Y es que, lógicamente, el uso de combustibles alternativos encarecería los billetes y, por tanto, podría tener un impacto negativo para territorios como el canario.
Explicada la normativa y el porqué de la moratoria es pertinente advertir cuál ha sido la reacción del gobierno canario. En un primer lugar y después de que la región haya vivido reiteradas reivindicaciones del sector turístico, la decisión se ha celebrado, como es lógico.
Pero del aplauso se ha pasado rápidamente al compromiso. Al menos, eso se desprende de lo manifestado por el vicepresidente y consejero de Economía, Industria, Comercio y Autónomos del gobierno de Canarias, Manuel Domínguez.
El consejero no ha dudado en afirmar que esta moratoria puede convertirse en una oportunidad para el archipiélago canario.
"Celebramos la sensibilidad del Parlamento Europeo hacia Canarias y el respeto al trato diferenciado con las regiones ultraperiféricas. Nuestra condición insular nos hace totalmente dependientes del transporte aéreo y, por esa razón, también necesitamos un mayor plazo con el objetivo de adoptar las decisiones necesarias que impidan que esta nueva legislación europea encarezca el coste del transporte aéreo en las islas", reconoce Domínguez.
Ahora bien, al hablar de esas decisiones, desliza la palabra "retos". Y uno de ellos, "será priorizar que Canarias se convierta en productora de combustibles alternativos para la aviación porque no renunciamos a su uso".
En esta frase hay dos ideas estratégicas de primer orden. Una, la de que en ningún caso Canarias está oponiéndose al uso de combustibles alternativos; la otra, que Canarias quiere ser referente en producción de combustibles alternativos.
Y bajo esta decisión de luchar por ser referente subyace todo un universo de posibilidades desde el punto de vista de la innovación.
Tal y como pudo comprobar hace unos meses D+I en la feria Paris AirShow 2023, una de las tendencias más comentadas y con más proyección del sector de la aviación -tanto de la comercial, como de la logística o de la militar- es la búsqueda del combustible del futuro, el que combine el respeto por el medioambiente con el respeto a los bolsillos, tanto de las compañías como de los usuarios finales.
Por cierto, en casi todos los debates emergía una misma conclusión: el hidrógeno y toda la innovación que se pueda acometer a su alrededor será un actor clave.
Reducir la huella de carbono del sector
Canarias, pues, quiere ser parte de la solución, generando ecosistema alrededor de posibles combustibles alternativos que puedan utilizarse en un futuro para seguir reduciendo la huella de carbono en el sector.
"Lucharemos para que en las islas se desarrolle esa industria, lo que se traducirá, sin duda, en la mejora de la conectividad, la diversificación del empleo y la sostenibilidad", refrenda el consejero.
La nueva normativa -insiste- "nos obliga a estudiar incentivos a la distribución y producción del combustible sintético porque este será el futuro de la industria aeronáutica mundial y porque, al mismo tiempo, la moratoria europea supondrá una gran oportunidad para diversificar la economía de las islas, reforzar su tejido industrial y avanzar en el terreno de la sostenibilidad y la creación de empleo verde para el archipiélago", argumentó.
"Ahora debemos trabajar también para adaptar los recintos aeroportuarios de Canarias a este tipo de repostajes sostenibles. Como es lógico, defendemos el objetivo medioambiental que plantea esta nueva normativa comunitaria y creemos que la necesaria descarbonización no debe implicar, en ningún caso, un perjuicio para la conectividad de Canarias, ni para el bolsillo de su ciudadanía", concluye.
La consejera de Turismo, Jéssica de León, por su parte, también expresó que la decisión adoptada por el Parlamento Europeo "supone la confirmación de que la ciudadanía canaria y la industria turística no tendrán la obligación de usar un combustible SAF que, por su escaso desarrollo y producción, iba a encarecer los billetes de avión y a restarnos competitividad como destino turístico frente a otros mercados no europeos".