El consejero Eduardo Arasti, durante su intervención en C-Meet 2024.

El consejero Eduardo Arasti, durante su intervención en C-Meet 2024.

Cantabria

La Agenda Digital de Cantabria otea su puesta de largo con el foco en aumentar la inversión sobre el PIB

Este documento será la hoja de ruta del Plan de Innovación y Transformación Digital de la región y pretende revertir algunas desventajas con respecto al resto del país.

4 octubre, 2024 01:27

Aunque desde el gobierno de Cantabria se guarda con recelo el momento en el que se presentará la Primera Agenda Digital de la región, todo apunta, según ha podido saber DISRUPTORES, que el ejecutivo que dirige María José Sáenz de Buruaga ya lo tiene todo prácticamente listo para su puesta de largo.

Es más, las fuentes consultadas insinúan que la presentación de esta estrategia será entre mediados y finales del mes de octubre.

Pero lo importante no es saber el cuándo sino el qué. Y es el qué y, sobre todo, el cómo, lo que se guarda con más recelo. Hasta ahora, lo único que ha trascendido es que la Agenda Digital es un instrumento concebido para ser la hoja de ruta del Plan de Innovación y Transformación Digital, un plan que, a su vez, forma parte de la RIS3 -estrategia de especialización inteligente del territorio cántabro-.

A falta de conocer cómo se desarrolla esta agenda, cualquier intervención de alguno de los cargos públicos del gobierno autonómico puede constituir una pista.

En este caso, una pista importante la ha dado hace unos días el consejero de Industria, Empleo, Innovación y Comercio, Eduardo Arasti. Lo hizo durante su intervención en el C-Meet 2024, un evento relacionado con la transformación digital de Cantabria.

El consejero aprovechó su discurso para avisar de que "pronto" se compartirá el documento con el tejido empresarial y para avanzar uno de sus principales objetivos, que tiene que ver con el impacto de la inversión en I+D+I sobre el PIB de la región.

Así, remarcó que se fomentará la inversión en I+D+I que en Cantabria ha venido siendo del 0,96% del PIB cuando la media española está en el 1,43%. Y también se buscará incrementar el gasto TIC, "que en estos momentos es inferior al que correspondería en función de su participación en el PIB, que es del 1,1%".

Este gap, advertido con anterioridad y que constituye uno de los principales retos de la región en relación con el sector de la disrupción, es, pues, uno de los pocos objetivos que han trascendido de la inminente presentación de la Agenda Digital.

Arasti quiso dar resaltar el valor de la transformación digital para incrementar la eficiencia y la competitividad industrial y en este punto ha subrayado la contribución que tendrá la marca Green Valley Tech, que bajo este paraguas busca lograr mayor visibilidad y mejorar el posicionamiento TIC en los mercados profesionales.

En su intervención en la segunda jornada del C-Meet 2024, una iniciativa organizada por CEOE-Cepyme Cantabria en Escenario Santander y que cuenta con el patrocinio del gobierno de Cantabria, Arasti aseguró también que el ejecutivo cántabro tiene como uno de sus objetivos principales posicionar a Cantabria como "polo innovador y tecnológico que atraiga talento e inversión".

En cualquier caso, la tarea para abordar el cambio de modelo productivo que apueste por una revolución tecnológica se ha emprendido con la elaboración de la citada Agenda Digital, que ha contado con algunos pasos previos que se han ido adoptando, entre los que Arasti ha destacado el impulso de la formación en competencias digitales; la atracción de empresas tecnológicas que impacten de manera positiva en todo el ecosistema TIC; el fomento del emprendimiento basado en tecnologías emergentes; el apoyo al desarrollo del sector TIC o la transformación digital del tejido empresarial de la región.

Pero uno de los pasos previos más importantes fue la apertura de la agenda a consulta pública, de manera que cualquier ciudadano pudo realizar las aportaciones que considerara. Según explican desde la consejería de Industria e Innovación que dirige Eduardo Arasti, se trata de "aprovechar las nuevas tecnologías para conseguir un crecimiento económico y social, apoyado en cuatro ejes: las personas, el gobierno digital, las empresas, y las infraestructuras. En cada uno de los ejes se articularán una serie de iniciativas que servirán como vías hacia la consecución de los objetivos que se establezcan".

Es en este punto cuando conviene adentrarse en los principales puntos de la RIS3 cántabra. Es allí donde se encuentran las claves del futuro de la región. O, al menos, las claves de lo que quiere conseguir el actual gobierno autonómico.

Crecimiento sostenible

Así, las prioridades que establece el documento son la generación de "un crecimiento sostenible basado en la utilización eficiente de los recursos y en una economía más competitiva y respetuosa con el medioambiente"; la promoción de "un crecimiento inteligente centrado en la innovación, el conocimiento y en las fortalezas" del territorio; o la "potenciación de un crecimiento integrador cimentado en el impulso de una economía que ofrezca empleo de alta calidad, y que nos permita alcanzar una mayor cohesión social y territorial".

De forma paralela, el titular de Industria ha recordado las medidas que su departamento ha puesto en marcha para solucionar los problemas que afectaban a la industria a su llegada al ejecutivo cántabro.

Entre estas ha destacado los avances para la tramitación de suelo industrial- Guarnizo Sur, Villaescusa-Parbayón y Penagos- la planificación de transporte de energía eléctrica; la autorización para la construcción de los cinco primeros parques eólicos de competencia autonómica que junto al del Escudo, supondrán una inversión de 245 millones de euros o el Plan de Ayudas a Autónomos, dotado con 38 millones de euros.

A estas medidas, el titular de Industria ha sumado como reclamo para la instalación de nuevas empresas una reforma fiscal que apueste por bajar los impuestos y atraer inversión y la figura de declaración de proyectos estratégicos para agilizar la instalación de empresas. A este respecto ha puesto como ejemplo el modelo de Irlanda cuyo PIB per cápita en 2022 era de 99.000 euros frente a los 28.162 de España. "Hagamos lo que han hecho en otros lugares que ha salido bien", ha remarcado.

Junto a Arasti ha asistido a la jornada prevista para hoy el presidente de CEOE, Enrique Conde, que ha apostado por "unir a las empresas y a los sectores" y ha defendido una implicación y un trabajo conjunto público-privado, ya que según ha afirmado la capacidad de crecimiento en las TIC es "enorme" y la digitalización en un mundo globalizado es "clave".