La Agencia Local de la Energía del Consejo Comarcal de Osona (ALEO), comarca catalana de la demarcación de Barcelona, decidió en 2013 iniciar la automatización energética de 107 espacios públicos, desde escuelas y bibliotecas a ayuntamientos centros de día de mayores o teatros.
Se puso en manos de Loxone, firma de origen austriaca con delegación en España en la población de Artés (Barcelona), especializada en la automatización inteligente de viviendas y edificios.
El proyecto, finalizado este año, ya ha reportado unos ahorros en las facturas de gas, gasoil y luz de estos edificios públicos de entre el 20% y el 35%.
Loxone ha desarrollado el proyecto junto a 9Habitat Intel·ligent, uno de los 600 partners de la firma en España, de los más de 16.000 que tiene distribuidos en los 100 países donde tiene presencia.
La automatización inteligente ha facilitado que la ALEO gestione los consumos energéticos de cada espacio desde un único punto, mejorando considerablemente la eficiencia energética de todos ellos.
Un 'miniserver'
La firma austriaca aporta a los proyectos de automatización la tecnología de su miniserver, un PLC (controlador lógico programable). "Es el cerebro de la automatización que incorpora un software que le permite comunicarse con todos los protocolos existentes", explica Meritxell Esquius, responsable de Marketing de Loxone España.
9Habitat Intel·ligent ofrece la plataforma Enmotic, creada para unir el control de más de un edificio automatizado por Loxone.
Desde Enmotic se controlan las funciones de climatización e iluminación de los edificios, a partir de los datos que recopilan los miniservers instalados.
La plataforma ofrece la geolocalización de las 107 instalaciones que controla ALEO con un único panel de control, centraliza la telegestión de los equipos, gestiona avisos y alarmas centralizadas, y es capaz de enviar ordenes masivas a diversas instalaciones para una rápida intervención.
El sistema que proporciona Enmotic es modular, con protocolos abiertos que permiten incorporar nuevos dispositivos o equipos con un coste asequible para municipios de cualquier tamaño. Su interfaz web se adapta a cualquier necesidad y es totalmente personalizable.
El control de los diferentes sistemas de clima, a través de sensores y detectores, se han automatizado para que se enciendan calderas o sistemas de refrigeración solo en las horas programadas, con relación a los horarios de cada centro.
Necesidades de cada espacio
"Además de la programación que se ha establecido, el sistema también reconoce en tiempo real las necesidades de cada espacio. La calefacción o la refrigeración se encienden o se apagan cuando detecta, por ejemplo, que la luz o la temperatura exterior cambian", comenta Esquius.
También la iluminación se integra en el control del miniserver y está programada para que se encienda cuando detecta movimiento de personas dentro de los centros, de manera que se evita el mal uso y el consumo innecesario.
El control lumínico, además de conseguir ahorrar en costes y ganar en eficiencia, también incrementa la seguridad en los edificios, tanto en el interior como en el exterior.
Por otro lado, en el sistema de automatización implementado en los edificios públicos de Osona se han ubicado también sistemas fotovoltaicos integrados, energía sostenible que favorece el cuidado del medio ambiente, a la vez que incrementa la eficiencia en la generación y el consumo energético.
Cada uno de los edificios automatizados por Loxone en Osona cuenta con su propio miniserver, aunque en alguno de ellos, por su mayor dimensión, ha requerido dos o más unidades.
Además de la energía y la temperatura interior y exterior, también realizan el control de presencia, las necesidades de ventilación y las de humedad de todos los espacios.
"Para facilitar el control de los miniservers, se han agrupado por grupos de edificios cercanos o bien pertenecientes a un mismo ente local, pero todos están gestionados por la ALEO. La agencia es la que controla los sistemas de clima, ventilación, iluminación y sistemas fotovoltaicos de todos los edificios", afirma Esquius.
El ahorro en costes es sustancioso y la amortización de la inversión, sobre todo en edificios públicos, "se consigue en casi todas las intervenciones antes de superarse el año desde la puesta en marcha de la automatización", destaca.
La telegestión de todo el proyecto recae en manos de solo una persona, Josep Valldeoriola, técnico responsable de la iniciativa, que recibe apoyo de otro técnico de la agencia a tiempo parcial.
"Se ha conseguido mejorar el confort de los usuarios y reducir el coste energético en todos los edificios públicos que gestiona la agencia pero también, y muy importante, se ha optimizado la intervención de los equipos de mantenimiento municipales, que han reducido drásticamente las horas de actuación porqué la detección de anomalías pasa primero por la telegestión", comenta.