Skin AI es una startup que está embarcada en una proyecto para el desarrollo de dispositivos médicos inteligentes capaces de detectar el cáncer de piel de manera temprana y de forma no invasiva. Una enfermedad de la que en España se diagnosticaron 20.392 nuevos casos en 2023, según las estimaciones del Observatorio del Cáncer de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), lo que representa algo más de un 8% (8,21%) del total. Detrás de Skin AI hay expertos tanto del mundo del machine learning y el desarrollo de software, así como doctores en dermatología del Hospital 12 de Octubre, de Madrid.

Supergiz Salud, por su parte, utiliza desde hace ocho años tecnología de impresión 3D para fabricar prótesis de mano, inicialmente para niños, a las que se pueden añadir diferentes accesorios para realizar acciones cotidianas o practicar actividades como tocar la guitarra. En este tiempo, han perfeccionado su propuesta y ya incluye modelos para adultos. Entre sus últimos logros, han viajado recientemente a Estados Unidos en una misión del ecosistema de emprendimiento innovador de Massachusetts (Estados Unidos). 

Ambas startups tienen en común su origen madrileño y que se encuentran alojadas en la Red de Viveros de Empresas de Madrid Emprende. La primera en el de Carabanchel, y la segunda en Puente de Vallecas. Un proyecto, el de esta red, que el consistorio de la capital puso en marcha en 2011 para fomentar el espíritu emprendedor de los ciudadanos y que tiene parte de la culpa de que Madrid se haya convertido en uno de los principales hubs de este ecosistema en España y Europa.

Desde 2019, más de 2.000 proyectos empresariales han sido incubados y preincubados en los siete centros que componen este proyecto. Algunos de ellos tan dispares como una empresa que reduce el peso y el coste de satélites u otra que desarrolla comida 100% a base de plantas, como huevos veganos. 

La tasa de ocupación es del 100% en cuatro de estos centros y una media del 90% en los restantes. "Este dinamismo ha impulsado la generación de empleo en un 30% durante el último año, atrayendo talento e inversión a la capital. Lo que demuestra que Madrid es un lugar donde las ideas pueden convertirse en negocios viables y exitosos”, defiende  Ángel Niño, concejal de Innovación y Emprendimiento del Ayuntamiento de Madrid, en entrevista con DISRUPTORES - EL ESPAÑOL. 

Cómo empezar a emprender

Desde la apertura del primer vivero en 2008 –antes de que se formara la Red–, uno de los mayores retos ha sido la capacidad de adaptarse a las necesidades cambiantes de las empresas que forman parte de ellos. “La pandemia fue una prueba significativa, obligándonos a virtualizar rápidamente los servicios de asesoramiento y formación. Mientras veíamos cómo cada día negocios en España echaban el cierre, nosotros ayudábamos a poner otros en marcha”, recuerda Niño. 

Esta iniciativa, ya casi decana, se caracteriza por ofrecer un servicio integral que cubre todas las necesidades básicas de un proyecto empresarial en sus primeros años. "Todo aquel que tenga una idea puede llevarla a cabo en Madrid Emprende," asegura el concejal. Los emprendedores reciben apoyo personalizado en gestión e innovación empresarial, facilitando su camino desde la idea inicial hasta su consolidación en el mercado.

Los servicios incluyen asesoramiento, formación, acceso a tecnología avanzada y espacios de coworking. "Es esencial que los emprendedores tengan a quién recurrir cuando no saben cómo pagar una factura o cuál es el siguiente paso con su negocio," añade. Y también remarca que el acceso a estos servicios está diseñado para ser inclusivo, con pocos requisitos básicos.

"Buscamos apoyar a todos los emprendedores, independientemente de su condición y sector. Es necesario, eso sí, que se constituyan como empresa o autónomos," comenta Niño. El único servicio sujeto a un precio público es el de alojamiento en despachos, disponible para proyectos viables con una antigüedad máxima de cinco años.

Colaboración con acompañamiento

La gestión de los viveros se realiza mediante un modelo de colaboración público-privada. Las entidades encargadas de la administración son seleccionadas a través de un proceso de licitación conforme a la Ley de Contratos del Sector Público."Desde universidades públicas hasta asociaciones sin ánimo de lucro y empresas privadas han gestionado los viveros," señala Niño. Además, trabajan estrechamente con entidades que realizan programas de fomento del emprendimiento a través de convenios de colaboración, como ASEME (Asociación Española de Mujeres Empresarias) y la Fundación Junior Achievement.

Aunque esta red no se centra en sectores específicos, el consistorio ha desarrollado programas especializados en áreas como la agroalimentación y la industria del videojuego. "Madrid Food Innovation Hub y Madrid in Game son ejemplos de cómo impulsamos la innovación en sectores clave para el futuro económico de la ciudad," explica Niño. "La especialización aporta un valor añadido por el ecosistema que se genera. La industria del videojuego, por ejemplo, será uno de los sectores clave en la economía del futuro”.

A los siete centros ya operativos, el ayuntamiento añadirá uno más localizado en la zona norte de la ciudad y, además, está trabajando en la Red de Mentores de Madrid Emprende. "Consideramos que esta figura es una parte esencial en el descubrimiento del mundo del emprendimiento," afirma Niño. Esta red de mentores busca aunar el conocimiento y la experiencia necesaria para apoyar a emprendedores nacionales e internacionales que deseen desarrollar sus proyectos en esta ciudad.

"En estos momentos, Madrid está experimentando un despertar tecnológico asombroso y de una manera completamente disruptiva," concluye Niño. "Este crecimiento va a ser exponencial, por lo que debemos adoptar su uso de la manera más natural, pero también lo antes posible para no quedarnos atrás”.