Las llamadas Estrategias de Especialización Inteligente (más conocidas como RIS) que aprueban las comunidades autónomas no son más que una guía sobre lo que esa región quiere ser en materia de innovación y transformación digital.
Y en ningún caso suponen (o no deberían, al menos) un cambio drástico en las políticas de impulso a determinadas estrategias ya iniciadas. De ahí que, ahora que los gobiernos autonómicos están aprobando sus nuevas estrategias hasta el año 2027, sea un buen momento para consolidar, con variaciones sutiles, esa hoja de ruta implementada en la RIS anterior.
Es lo que ha hecho Murcia, una de las últimas regiones en presentar esa estrategia a 2027. Hace unos días, el presidente de esta comunidad autónoma, Fernando López Miras, presentó la RIS4Mur, que no hace sino consolidar la innovación y la transformación digital como pilares en sectores como la energía, la agricultura o la gestión hídrica.
"Hay que sacar el máximo partido a nuestras potencialidades, a esos sectores que son estratégicos porque nos han brindado posiciones de liderazgo dentro y fuera de nuestras fronteras", afirma el presidente.
Efectivamente, perfeccionar y especializar esos sectores suele ser más cómodo si ya hay un trabajo previo. Y en Murcia, estos sectores ya han dado muestras en los últimos meses de estar en plena transformación, algo que acelera, sin duda, la materialización de esa estrategia. Para muestra, un botón y tres proyectos concretos.
El propio López Miras anunció hace un año la creación, con el apoyo de Repsol y Enagás, de la Plataforma del Valle del Hidrógeno Verde de la Región de Murcia, que aúna a 34 entidades públicas y privadas.
El valle de Escombreras es el territorio elegido y se busca atraer inversiones en este ámbito y trabajar en la obtención de fondos de recuperación de la UE.
"El hidrógeno verde puede suponer una transformación de nuestras estructuras que nos proyecte al futuro", explicaba entonces.
Y si la energía ya ha dado muestras en Murcia de ser un ámbito clave, ni que decir tiene el papel que juega el sector agroalimentario. Tal es la fortaleza que la región es una de las exportadoras más importantes del país en cuanto a tecnología agraria.
Además, existen en la actualidad alianzas con países no tan desarrollados en este sector para evangelizar y promocionar a las empresas murcianas de este ámbito.
Para la Comisión europea, la Estrategia de Especialización Inteligente también constituye un elemento clave a la hora de reducir las disparidades entre regiones europeas y mejorar, así, su crecimiento económico y competitividad.
Por eso también la economía azul, cada vez más importante a nivel europeo, sobre todo en zonas del Mediterráneo y del Cantábrico, debe ser considerada como prioritaria también en Murcia.
Pero también en este sector se han sentado ciertas bases en los últimos tiempos. Buena prueba de ello es la variada cantidad de proyectos que se han desarrollado en torno al Mar Menor, una zona que necesita mimos debido a sus problemas medioambientales.
El problema del Mar Menor
Boyas inteligentes, aplicación de tecnología para el filtrado de fangos, la monitorización de explotaciones agrícolas para evitar vertidos… Son sólo algunas de las pistas que ya ha dado Murcia de que tiene una base sobre la que seguir especializando este sector.
Así pues, los ámbitos de la energía, la agricultura y la economía azul que forman el esqueleto de la RIS4Mur presentada hace unos días, ya han tenido un aperitivo perfecto que hace que el desarrollo de la estrategia no tenga que partir de cero.
"Ahora contamos con más de 700 millones de euros de cara a hacer una economía más sostenible, más tecnificada y más sólida frente a los vaivenes de los ciclos económicos y para que la Región de Murcia se convierta en centro de excelencia científica y liderazgo tecnológico", avanza López Miras.
Sobre los sectores mencionados, para López Miras son "tractores" y que "deben tener un papel protagonista en la diversificación de nuestro tejido productivo".
Además, también prevalecerán los proyectos relacionados con actividades que son "claros motores de crecimiento y empleo" para la Región, como el turismo, la salud, el hábitat, el calzado o la moda.
RIS4Mur desplegará 81 líneas de actuación, encaminadas a financiar y colaborar en proyectos de investigación desarrollados por el tejido empresarial y por organismos públicos de investigación.
Datos que invitan al optimismo
Con todo, los principales objetivos definidos en RIS4Mur son aumentar la inversión en I+D+i hasta el 2%; incrementar la inversión empresarial en I+D elevando el ratio de inversión privada sobre la pública hasta el 1,1%; aumentar el número de empresas innovadoras sobre el total de empresas hasta, al menos, el 25%; e incrementar las exportaciones en sectores de media y alta tecnología por encima del 19% sobre el total exportado.
También antes de intentar pelear por conseguir esos datos se parte de una buena situación, según ha explicado el presidente murciano.
López Miras subrayó algunos de los indicadores que reflejan que "la inversión en I+D ha crecido de manera ininterrumpida desde que se puso en marcha la anterior Estrategia de Especialización de la Región de Murcia".
Así, puso como ejemplo que "hoy alcanzamos la cifra récord de 1,14% de inversión respecto al PIB" o que "las empresas de alta y media tecnología en la Región de Murcia se han doblado desde 2014".
Además, recordó que, según el último informe de COTEC, "hemos logrado recuperar los niveles de inversión y empleo en I+D previos a la crisis financiera, y somos la autonomía que más esfuerzo ha hecho en I+D en el periodo 2010-2020 de toda España, con un crecimiento cuatro veces por encima del aumento medio nacional".
Estos datos, afirmó, "no son fruto de la casualidad, sino resultado del considerable esfuerzo realizado por los agentes regionales implicados: empresas, administraciones y centros de conocimiento". Dicho esfuerzo "está precisamente coordinado y tutelado por la Estrategia de Especialización Inteligente", agregó.
La nueva Estrategia apuesta por la investigación y la innovación para acelerar la transformación digital y, muy especialmente, para alcanzar la sostenibilidad. Se busca consolidar a la Región como una autonomía emprendedora, exportadora y con un modelo sostenible y resiliente de desarrollo económico y social basado en el conocimiento y la innovación en ámbitos estratégicos y de futuro.