Corporate Lab es un venture studio que permite a las grandes corporaciones cocrear sus propias startups con un equipo especializado lanzando nuevas empresas.
Hablamos con Brais Comesaña, Head of Venture Studio en Corporate Lab, sobre los retos de colaboración entre una startup y las grandes empresas y los retos al respecto.
Pregunta: ¿Por qué busca una gran compañía el apoyo de una startup?
Respuesta: Las grandes corporaciones tienen la necesidad de innovar para adaptarse a los nuevos mercados y seguir liderándolos, pero en general tenemos la percepción de que las startups y los emprendedores son quienes más innovan.
El problema suele ser que, para innovar, la corporación ya tiene su propio modelo de negocio y empezar a dedicarse a otros levanta muchas barreras. Es posible que no haya suficientes recursos humanos, que el campo de especialización que se necesita no esté en la empresa o incluso que ambos modelos de negocio no sean compatibles.
Ante todas estas barreras, crear su propia startup desde cero con la ayuda de un venture studio es una de las mejores soluciones, ya que elimina todos estos obstáculos. De esta forma pueden probar nuevos mercados o crear nuevos modelos de negocio de forma externa y sin descuidar su modelo de negocio principal. Por eso, la innovación abierta y en concreto el corporate venture building se han consolidado como una de las mejores formas de innovar para las grandes empresas.
P: ¿Qué tipo de relación se establece? ¿Qué roles tiene cada sujeto en esta relación?
R: Depende de cada caso. En general, las corporaciones son fuertes en su negocio habitual y está es su ventaja injusta sobre la que construir nuevos negocios. Además, departamentos como el legal, el financiero, el de recursos humanos y operaciones, solo por citar algunos. Por otro lado, un venture studio tiene fortalezas como un equipo cohesionado con foco en el lanzamiento de la new venture y experiencia previa emprendedora o lanzando startups con agilidad.
Es habitual que las fortalezas de la corporación sean las carencias de la startup y viceversa. Por esto los modelos de venture building corporativo sirven para lanzar con éxito nuevos negocios. Por eso, la innovación abierta entre corporación y startup es un modelo de innovación muy beneficioso para ambas partes.
P: ¿Crees que hay todavía cultura de que es mejor hacerlo todo en el seno interno de una empresa y de que esta aproximación es todavía novedosa?
R: No es una técnica nueva, existen muchas grandes corporaciones de distintos sectores que vienen siguiendo este modelo desde hace años. En el lanzamiento de nuevos negocios tenemos a Telefónica con su propio venture studio, Cabify tiene también su unidad interna y después también tenemos nuevos jugadores con los que hemos trabajado como DAS (Munich RE) lanzando Okify, Fidelidade en lanzamiento de Coventia. Este es uno de los pasos más sencillos para que las grandes corporaciones innoven.
P: ¿Cómo se establece esa estrategia de captación de nuevas ideas y proyectos?
R: Nosotros tenemos nuestro modus operandi, nuestra forma de resolverlo. Habitualmente dedicamos unas 4 a 8 semanas de análisis de las fortalezas de la corporación y planteamos una serie de negocios adyacentes a su core o más disruptivos, priorizados en base a una serie de parámetros.
Entre otras cosas salimos a la calle a conocer a los potenciales clientes y decidimos por dónde debemos continuar. Una vez tenemos este nuevo modelo de negocio decidido, empezamos con el proceso de validación hasta dar con el product-market-fit. Cada cuatro semanas hacemos una revisión global para decidir cómo continuar el proyecto o si tenemos que pararlo porque los consumidores no lo demandan o si tenemos que pivotar la propuesta de valor.
P: ¿La gran empresa busca a la startup o la startup debe buscar este tipo de relación para dar sus primeros pasos?
R: En general es la corporación la que abre una convocatoria o incluso tiene una unidad detectando posibles oportunidades de colaboración o compra. También suele ser la que inicia una conversación con el venture studio en el caso de que quiera crear su propia startup desde cero.
P: ¿Este tipo de sinergias se establecen únicamente en materia de innovación, digitalización y nuevas tecnologías? ¿En qué campos es más útil?
R: No es el único, pero sí suele ser el principal. La innovación debe tener como objetivo la transformación del negocio y debe escuchar a los clientes (internos y externos) para seguir desarrollando el negocio que tendrán dentro de 5, 10 o 20 años.
P: En este nuevo escenario, ¿qué papel ocupa una empresa como Corporate Lab?
R: A través de nuestra metodología y experiencia emprendedora, en lugar de simplemente aliarse con ellas, puede suplir sus carencias diversificando su modelo de negocio como ellos quieran y siempre respondiendo a las necesidades reales del mercado, de hoy y del futuro.
Que una corporación cree una startup con un venture studio como Corporate Lab es una manera rápida, económica y segura de ampliar sus posibilidades. Es un tipo de servicio que no interfiere con el mapa de ruta de la empresa y que abre nuevas puertas en cuanto a negocios, mercados y nuevas tendencias.
P: ¿Cuáles son vuestras metas y objetivos a corto plazo y de cara a 2023?
R: Queremos consolidar nuestra posición como venture studio de referencia en España. Ya hemos trabajado con grandes empresas creando startups que ya son casos de éxito. Queremos consolidar este portfolio y contribuir a que la innovación en España siga creciendo, tanto para el ecosistema de las startups como para las grandes empresas.