El ecosistema emprendedor español ha cambiado sobremanera en los últimos años. Desde DISRUPTORES - EL ESPAÑOL no desistimos en poner en primera página los logros y casos de éxito de los protagonistas que están transformando la economía española, cada vez más digital y tecnológica, y que la encaminan hacia un estadio de mayor competitividad y posicionamiento exterior.
Hablamos de startups y fundadores -algunos de ellos con la suficiente experiencia como para alumbrar un segundo, e incluso, tercer proyecto emprendedor-; pero también de aceleradoras e incubadoras, fondos de capital riesgo, business angels, centros de investigación y parques tecnológicos, y demás agentes público-privados que emergen alrededor de este círculo virtuoso.
La colaboración y unión de fuerzas es la clave y ahí, la innovación abierta se ha convertido en una herramienta muy eficaz para construir puentes entre la disrupción, flexibilidad y rapidez de las startups, y la estructura, solidez y experiencia de las corporates.
Tan sólo falta una bisagra, esa pieza casi mágica, que une ambos puntos de la infraestructura y da lugar a un profundo proceso de transformación empresarial que suma valor a todas las partes.
Loomis y Lanzadera son el caso paradigmático de esta estrecha y prolífera colaboración empresarial. La aceleradora del empresario Juan Roig y la multinacional sueca encarnan en primera persona un claro ejemplo de cómo una innovación abierta bien entendida por todas las partes genera grandes beneficios e imprime un salto cualitativo en startups y corporates.
María Machado, de Loomis, y Darío Olivares, gerente de Lanzadera Corporate, en un encuentro con emprendedores en la aceleradora valenciana.
De Estocolmo a Valencia, pasando por Madrid y Granada. Lanzadera ha unido a la multinacional sueca, muy arraigada en España, con una startup granadina y otra valenciana -ambas arraigadas en el ecosistema de la icónica aceleradora-, en un caso de éxito en innovación abierta de la nueva etapa más madura y consolidada de la transformación digital.
"La relación y sinergias que se han construido entre Lanzadera y Loomis en innovación abierta han sido tan estrechas que han dado lugar a la compra de las startups Momo y Hosteltactil y la integración de sus soluciones tecnológicas en la compañía", destaca en conversación con esta redacción María Machado, directora de Estrategia e Innovación en Loomis.
"Es muy importante que se involucren ya no sólo las corporates, sino específicamente las unidades de negocio, y que lo respalde la dirección. Hay que entender que, aparte de atender su día a día, siempre es un esfuerzo asumir el reto de innovar, y en Loomis lo han tenido claro desde el primer momento", afirma Esteban Gallego, director de Proyectos en Lanzadera Corporate.
Desde la compañía de gestión del efectivo insisten en que "la innovación abierta es muy importante porque acelera y mejora procesos internos de las corporates".
"Confiamos 100% en Lanzadera, les contamos nuestros retos y ellos nos buscaron a dos startups que contribuyen a nuestro día a día. El acierto fue tal que hemos acabado adquiriéndolas"
"Nosotros confiamos 100% en Lanzadera: les contamos nuestros retos y ellos nos han ayudado a buscar startups que contribuyen en nuestro día a día. Hosteltactil y Momo fueron dos retos con las que tenemos un probado éxito de colaboración, de ahí nuestro interés hasta llegar a adquirir estas compañías", argumenta Machado.
Innovación abierta: un reto para toda la corporación
Y es que esta colaboración beneficia a ambas partes. Por un lado, Loomis obtiene acceso a soluciones innovadoras y la oportunidad de conocer startups que puedan mejorar su negocio, e incluso invertir en ellas.
Por otra parte, Lanzadera ayuda a las startups a conectar con una gran corporación con dos objetivos claros: aprender y mejorar su propuesta de valor al interactuar con profesionales de estas empresas y probar sus soluciones en situaciones reales mediante pruebas de concepto.
"La innovación abierta conlleva la total predisposición de todos los implicados; hay que dedicar tiempo y cariño para afrontar este reto en un día a día tan exigente"
Así lo explica Esteban Gallego desde Lanzadera: "Uno de los pilares fundamentales en la relación entre el ecosistema de Lanzadera y las corporaciones, y en concreto con Loomis, es el convencimiento de toda la organización -desde la dirección hasta las diferentes unidades de negocio- del valor que puede aportar la innovación abierta".
"Ello conlleva la total predisposición de los implicados en conocer soluciones innovadoras, probarlas e integrarlas cuando aportan valor en su negocio. Hay que dedicar tiempo y cariño para compaginar estos trabajos de mejora con el día a día tan exigente de la actualidad".
Las soluciones innovadoras
Pero ¿cuáles fueron las aportaciones tecnológicas de estas startups que habían pasado por el programa de aceleración de Lanzadera en Loomis? Momo facilitó a la multinacional la 'digitalización del efectivo' y Hosteltactil, un software de gestión específico para la restauración.
"Nosotros tenemos un software muy especializado en la restauración, y Loomis había desarrollado el suyo propio. Llevamos años perfeccionando el nuestro para que los hosteleros puedan gestionar su negocio de la manera más sencilla posible", explica a esta redacción Naji Sabeh, CEO y fundador de Hosteltactil.
"Cuando Loomis empezó a hablar con nosotros vimos que ofrecerles soluciones para facilitarles no tener que ir al banco a depositar el efectivo era atractivo"
"Cuando Loomis empezó a hablar con nosotros, nos dimos cuenta de que había una oportunidad clara, nuestros hosteleros tienen una alta penetración del cobro en efectivo, y ofrecerles soluciones para que facilitarles el no tener que ir al banco a depositarlo era atractivo", añade.
Por su parte, Guillermo Sáenz, impulsor de Momo y ahora en Loomis Pay, defiende cómo la oportunidad que les brindó Loomis con la medicación de Lanzadera ha sido un win win.
"Como startup nos encontramos con una multinacional dispuesta a invertir en nosotros y a darnos oportunidades para crecer más rápido. Como contrapeso, nosotros nos dejamos la piel para demostrarles que, aunque seamos más pequeños, somos muy trabajadores y pueden confiar en nosotros su negocio, que no les vamos a defraudar, que somos fiables"
Por su parte, Guillermo Sáenz, impulsor de Momo y ahora al frente de Loomis Pay, incide en que "el haber desarrollado nuestro modelo dentro de Lanzadera, y haber centrado nuestros objetivos de crecimiento en torno al cuerpo teórico y al modelo de calidad heredado de Mercadona, nos ha facilitado mucho la integración".
"Nos dejamos la piel en demostrar a Loomis que, aunque seamos más pequeños, podían confiar en nosotros y no les íbamos a defraudar"
"De alguna manera es como si ya viniésemos con los procedimientos incorporados y la cultura de una empresa más grande y organizada".
"Siempre es un reto integrar empresas con culturas diferentes y tamaños muy diferentes. La cultura Lanzadera nos ha puesto en sintonía".
Queda demostrado que la innovación es un requisito inaplazable en los corporates, que deviene en obligatorio en sectores como los medios de pago.
Unión de sinergias: la clave
"Estamos viviendo una verdadera revolución. Desde el Covid hemos visto grandes cambios en los hábitos de consumidor y del retailer, en parte, motivada por la restructuración de la banca", detalla al respecto María Machado desde Loomis.
"Esta innovación no la podemos hacer solos. Necesitamos startups, aceleradoras, recursos… y que todos pongamos encima de la mesa lo que cada uno puede aportar para trabajar juntos en una misma dirección".
La unión hace la fuerza y la alianza construida entre Lanzadera, Loomis, Hosteltactil y Loomis es la prueba fehaciente del impacto y valor añadido que puede generar nuestro ecosistema en estos momentos.