Los retos que afrontamos como sociedad tienen en la tecnología un pilar determinante para propiciar el camino hacia un modelo económico más respetuoso con el planeta, con la transición energética y la necesidad de alimentar a una población mundial en continuo crecimiento como telón de fondo.
El ecosistema innovador español ha dado muestras en los últimos años de cómo corporaciones y startups unen sinergias para dar lugar a disruptoras soluciones de innovación abierta que están ayudando a alcanzar tan ingente desafío colectivo.
La historia de la compañía energética y de telecomunicaciones Estabanell, uno de los referentes en Cataluña, es un caso paradigmático de ADN emprendedor adelantado a sus tiempos que ha sabido adaptarse a las necesidades de cada momento con un espíritu visionario que atesora en sus -casi- 125 años de trayectoria.
Con tan relevante efeméride tocando a la puerta, DISRUPTORES-EL ESPAÑOL conversa con Josep Solé, director de Eria, el vehículo de corporate venturing de Estabanell, sobre la relación de la compañía con la innovación desde principios del siglo XX, cuando la propuesta empresarial echó a andar, en una época donde casi sin saberlo, su fundador Francesc Estabanell sentó cátedra con una forma de entender el negocio que ha perdurado hasta nuestros días.
En su génesis, la energética nació como una empresa textil bajo el nombre de Estabanell i Pahisa.
Josep Solé, director de Eria.
"En 1910, el entonces fundador de la compañía, Francesc Estabanell, que coincide con el nombre del actual", precisa en conversación con esta redacción Josep Solé, "envió a uno de sus hijos al norte de Italia a descubrir más" sobre un proceso que había llamado su atención y sobre el que veía grandes potencialidades: la corriente eléctrica.
Según relata, Estabanell había oído hablar de ella y utilizó el periplo investigador por tierras italianas para certificar si aquella desconocida tecnología para la mayoría podía imprimir mayor competitividad a sus fábricas textiles.
Dicho y hecho. Fue el punto de partida de la electrificación de las instalaciones fabriles de Estabanell, cuyo excedente de energía sirvió para electrificar toda la zona de Granollers; primero, dirigido al alumbrado público y, más tarde, a las viviendas particulares.
"A principios del siglo XX nadie hablaba de innovación propiamente dicha, pero Estabanell ya lo llevaba de alguna manera en su ADN", soslaya Solé.
El impacto de la deslocalización llevaría finalmente a Estabanell a desprenderse del área textil y centrar sus esfuerzos en la energía eléctrica, un dilatado y arduo proceso que en la actualidad la ha entronizado como uno de los grupos de referencia en Cataluña que va ya por su quinta generación: "Abarcamos tanto generación, como distribución y comercialización".
Otro hito en la trayectoria de Estabanell se produjo en 2015 cuando, además de la energía eléctrica, introdujo los servicios de telecomunicaciones en su oferta. "Empezamos a desplegar una red de fibra óptica y a ofrecer servicios convergentes de telecomunicaciones como internet, telefonía y televisión".
"A principios del siglo XX nadie hablaba de innovación propiamente dicha, pero Estabanell ya lo llevaba de alguna manera en su ADN"
Tres años después, se creó un departamento interno en Estabanell de I+D+I enfocado de forma exclusiva a negocio eléctrico y que perdura en la actualidad, dedicado a proyectos europeos centrados en las redes de distribución en fases muy iniciales.
Recorrer este camino fue determinante para que en 2023 la compañía diera un salto cualitativo a su apuesta por la innovación. "Necesitábamos acelerar cuanto sucedía en el departamento de I+D+I, porque el sector eléctrico evoluciona a gran velocidad, y necesitamos incorporar la tecnología, los productos y servicios a nuestras verticales de negocio. Nuestro nicho de mercado está sufriendo una disrupción absoluta".
Aceleración y programa de 'venture client'
ERIA cuenta con un programa de aceleración, que el próximo miércoles 27 de noviembre celebrará su Demo's Day, y también con una iniciativa de venture client, donde "buscamos startups que den solución a retos de nuestras unidades de negocio para desarrollar una prueba de concepto y validar su tecnología".
"Aprecian mucho que una corporación, aunque sea pequeñita como la nuestra, les dé ese marco para validar sus proyectos".
El programa de venture client se está llevando a cabo con las pruebas de concepto de dos startups que arrancaron el pasado mes de octubre y, según explica Solé, "uno terminará a finales de este año o principios de enero y el otro se demorará un poco más porque versa sobre IA y machine learning y precisa de un recorrido algo mayor".
Además, a finales de noviembre se va a iniciar otro piloto que viene derivado del programa de startup, cuyo proyecto detectaron desde Eria estaba lo suficientemente maduro como para dar el salto a la validación a través de una prueba piloto.
En la práctica, Estabanell define, de la mano de sus unidades de negocio, qué retos se pueden abordar y se buscan las startups que implementen estas soluciones junto a su departamento de I+D+I y que, según su nivel de maduración, son dirigidas al programa de aceleración o al de venture client.
Señas de identidad: acompañamiento y mentoría
Para Solé, lo que más valoran las startups en el programa de aceleración son las mentorías de profesionales muy especializados en aquel ámbito en los que las compañías sufren más carencias.
"Nos apoyamos en la red de mentores de Aticco, que aporta tres profesionales, y nosotros, por el lado de Estabanell, facilitamos dos mentores en temas muy técnicos orientados a negocio".
Sesiones de formación, elaboración de un business plan y recomendaciones sobre las relaciones entre los socios son otras áreas que aborda Eria en su programa de aceleración.
Pero qué mejor que conocer directamente de estas startups los puntos fuertes de la apuesta de corporate venturing de Eria.
Zenit, Clever Social Devices y Atom H2
Zenit, Clever Social Devices y Atom H2 son tres de las compañías que saben bien qué supone introducirse en la estructura de Estabanell a través de Eria para impulsar la innovación abierta que reclama este nuevo tiempo.
La creación y aceleración de comunidades energéticas inteligentes es el foco de Zenit, un marketplace de proyectos de autoconsumo energético compartido en el que encontrar las comunidades energéticas cercanas, solicitar participar en ellas e interactuar de forma virtual.
Equipo de Zenit, de izquierda a derecha: Ander Etxebarría, Juan Trullos y Oihan Goenaga.
"Antes de entrar al programa de aceleración de ERIA, estábamos muy centrados en lanzar un MVP y algunos proyectos piloto. Aunque sí que habíamos logrado dar (y sobrevivir a) los primeros pasos, nos faltaba experiencia para gestionar una empresa en crecimiento, tanto en términos de proyectos como en la plantilla", afirma a DISRUPTORES-EL ESPAÑOL Oihan Goenaga, CEO de Zenit.
La startup destaca el seguimiento continuo durante los seis meses del programa, "sin agobios pero con el nivel de exigencia justo". "Junto con el equipo de Eria, fuimos marcando objetivos y plazos en diferentes áreas, lo cual nos ha ayudado a madurar como empresa en este tiempo".
Además, Zenit también ha lanzado un proyecto piloto junto a Eria, "utilizando nuestros servicios y know-how para crear una comunidad energética. Esto nos permitirá validar nuestro modelo de negocio en los próximos meses", concluye Goenaga.
Por su parte, Clever Solar Devices digitaliza procesos de operación y mantenimiento de placas fotovoltaicas para aumentar la producción y reducir los costes de operación.
Bhishma Hernández, fundador y CEO de Clever Social Devices.
"Gracias a participar en el programa de aceleración hemos mejorado la capacidad de entender a nuestros clientes, de explicar nuestro producto y de enfocar los siguientes pasos que nos permitan seguir evolucionando y creciendo. Ha sido un privilegio contar con un equipo de mentores que han mostrado una pasión por el proyecto de Clever desde el principio y nos han acompañado durante todo el programa", indica a esta redacción Bhishma Hernández, fundador y CEO de Clever Solar Devices.
Su red de mentores y entrar en el 'corazón técnico' de Estabanell son los dos puntos más relevantes para emprendedor de su paso por el programa.
Marcel Rovira, Anna Martin y Lucas Vicén, equipo de Atom H2.
"Por una parte, el poder elegir al propio equipo de mentores y que ellos a su vez también te elijan, lo que hace que todas las partes estén más motivadas y comprometidas. Por otro lado, el poder tener contacto con expertos en el sector de la energía como lo es Estabanell y poder participar en discusiones técnicas pero también involucrando aspectos de negocio".
Cierra el capítulo de testimonios la startup Atom H2, que se autodefine como "un puente entre los combustibles fósiles tradicionales y las energías renovables". Su meta es es ofrecer almacenamiento de hidrógeno como fuente de energía para las viviendas particulares.
"El valor de Eria reside en la calidad de sus mentores y el enfoque integral que ofrecen. Además de la orientación técnica, el programa nos brindó apoyo en temas clave como la financiación y la gestión de leads, alineando nuestro modelo de negocio para las primeras pruebas, previstas para finales de este año", señala Anna Martín, Fundadora y CEO de Atom H2.
"Esta experiencia ha sido fundamental para fortalecer nuestra propuesta de valor y el posicionamiento de nuestra solución híbrida en el mercado energético", matiza.
Tres casos prácticos de cómo lo mejor del mundo corporativo y el emprendedor están dando lugar en España a un nuevo impulso de la innovación que fortalece la economía frente a los grandes retos globales.