La digitalización y la sostenibilidad son dos pilares de la filosofía de Bipi, la startup española de suscripción de vehículos de Grupo Renault que cumple cinco años en el mercado en plena vorágine del encarecimiento del combustible.
La guerra en Ucrania y la espiral inflacionista han dejado huella ya en la compañía con una demanda nunca vista antes de suscripciones de vehículos híbridos y eléctricos en el último mes.
D+I conversa con el CEO de Bipi, Hans Christ, en un momento clave para el futuro de la empresa en el que los vehículos 'más sostenibles' van a ir ganando peso de forma acelerada frente a los de combustión.
De hecho, en los próximos meses abrirá un nuevo mercado en Europa donde solo ofrecerá vehículos híbridos y eléctricos. La empresa está presente ya en España -donde nació en 2017-, Francia -octubre de 2020-, Italia -junio de 2021- y Países Bajos -febrero de 2022-.
Este nuevo mercado -100% sostenible- sería inviable en la actualidad en España, donde la suscripción de vehículos de diésel y gasolina mantendrá su hegemonía aún por un tiempo. La falta de infraestructuras en las ciudades para convertir en una realidad el coche eléctrico y su elevado precio imposibilitan dar ahora el salto.
Según puntualiza el CEO, en nuestro país quedan por delante, como mínimo, cinco años para que el coche eléctrico alcance una penetración en el mercado mínimamente comparable a otras zonas de Europa como los países nórdicos.
Se cumplen cinco años desde que Bipi irrumpió en el mercado. ¿Cuáles han sido las claves de su éxito? ¿Imaginó en 2017 que llegarían a este nivel?
Son tantísimas cosas acertadas como no acertadas las que hemos vivido en este tiempo... Pero lo primero es siempre el equipo, que ha sabido posicionar a la compañía donde se encuentra ahora y, por supuesto, también hemos tenido la suerte de contar con inversores que confiaron en nosotros a lo largo del camino y financiaron el crecimiento de Bipi hasta su venta.
Bipi es el referente de movilidad inteligente en España y en Europa. Estamos muy orgullosos de haber llegado a este nivel y de haber vendido en estos años más de 15.000 suscripciones de coches, todo ello con épocas difíciles como la pandemia y ahora la guerra y la inflación que están encareciendo los precios del combustible.
Estamos en un punto en el que nos sentimos muy cómodos y contentos. Antes el reto era crecer y llevar a la compañía al siguiente nivel. Ya estamos ahí. Ahora toca bajar un poco el pie del acelerador y masificar el modelo de la suscripción que cada vez está gozando de mayor popularidad por parte del consumidor.
¿Qué papel ha jugado la transformación digital en este proceso de maduración de la compañía?
La empresa o sector que no se digitalice, tiene muy complicado sobrevivir. El sector de los coches era uno de los pocos que quedaba por digitalizarse. En España y en Europa el 98% de los vehículos se transaccionan en la actualidad en un lugar físico.
Prácticamente hay cero digitalización en el sector. Existen páginas web donde tú ves un coche y te da la información online del vehículo, pero eso no es digitalización. Para hablar de digitalización habría que poder transaccionar y experimentar un concepto de compra y de uso más digital del que conocemos.
La empresa o sector que no se digitalice, tiene muy complicado sobrevivir. El sector del automóvil era uno de los pocos que quedaba por digitalizarse.
Tenemos ante nosotros una gran oportunidad en el sector del automóvil para acometer numerosos cambios; entre ellos, temas de sostenibilidad que no sólo dependen de las empresas, sino también de los gobiernos y de las ayudas que permitan poner en marcha estas nuevas metodologías.
Un claro ejemplo es lo que ha sucedido en la actualidad con el elevado precio del combustible: nunca hemos tenido tanta solicitud en Bipi de vehículos híbridos y eléctricos como en el último mes o dos meses.
La gente se está dando cuenta de que el futuro va por ahí, ya lo están notando en sus bolsillos con el encarecimiento del combustible. Apuestan por el coche eléctrico y el híbrido que, además, les permite cumplir unos criterios de sostenibilidad que cada vez están calando más entre la ciudadanía.
¿Se está produciendo en España, entonces, un punto de inflexión en la venta de vehículos híbridos y eléctricos?
En la actualidad la mayoría de ventas de Bipi son coches híbridos. Lamentablemente, no ocurre lo mismo con los eléctricos porque no existe en España la infraestructura necesaria para que exista una demanda similar. Si no vives en una casa, es muy complicado que tengas un coche eléctrico.
Las infraestructuras de las ciudades no están preparadas todavía aquí para masificarlo. Nos quedan muchos años aún por delante para que llegue la inversión pública y privada necesaria.
En unos meses abriremos un nuevo mercado europeo donde solo habrá coches híbridos y eléctricos; en España las ciudades aún no están preparadas.
Nuestro compromiso con la movilidad más sostenible es una máxima y es tan decidida que en unos meses abriremos un nuevo mercado europeo donde no ofreceremos ya coches de combustión: el concepto de Bipi estará marcado solo por vehículos híbridos y eléctricos.
¿Puede avanzarnos en qué país europeo se abrirá ese nuevo mercado '100% sostenible'?
Todavía no, lo estamos terminando de definir -sonríe tras una pausa el CEO-, pero es el inicio de un nuevo enfoque de la compañía hacia una movilidad más respetuosa con el planeta. En España sería imposible abrir un mercado así en la actualidad porque faltan infraestructuras.
La penetración de los coches híbridos y eléctricos varía mucho de un país a otro. Por ejemplo, en los países escandinavos el 60% de las matriculaciones son coches eléctricos y en España no llega ni al 1%. No lo podríamos plantear aún aquí porque entonces no venderíamos ni un coche.
En la actualidad estamos presentes en Italia, España, Francia y Holanda y la idea es crecer en un par de mercados más en los próximos doce meses.
El nuevo mercado que abriremos y donde solo ofertaremos coches híbridos y eléctricos es un país europeo mucho más avanzado que España en estos temas de movilidad sostenible, con una matriculación de este tipo de vehículos muy superior y con ayudas públicas muy importantes para que la gente pueda acceder a este tipo de tecnología.
¿Cuál es la evolución de la demanda que prevé Bipi en España en los próximos años?
Para poder masificar el coche eléctrico, además de contar con las infraestructuras necesarias, los vehículos no pueden ser tan caros. Cuestan como un coche un lujo y muchos no lo son. En este contexto, la suscripción es el canal perfecto para masificarlo.
Un coche eléctrico de una marca generalista, no de lujo, viene a costar entre 30.000 y 50.000 euros, el precio de un BMW, un Audi o un Mercedes-Benz, que son productos del segmento de lujo.
En las suscripciones, como no tienes que abonar pagos iniciales, ni una inversión al principio, sino solo pagar una cuota mensual, muchas más personas pueden acceder a este tipo de vehículos, lo que jamás podrían hacer mediante la compra.
La suscripción es la perfecta plataforma para masificar el acceso del coche eléctrico pero todavía hay que desarrollar la infraestructura necesaria en las ciudades, y esto en España llevará como mínimo cinco años; y luego está el precio del vehículo; debe ser acorde con el coche y no solo por ser eléctrico.
¿Cómo valora la evolución del ecosistema emprendedor español en los últimos años?
Llevo más de diez años en el ecosistema, y la transformación que ha habido en los últimos dos años ha sido brutal. La pandemia ha contribuido a atraer gran inversión nacional e internacional y a que despuntaran empresas con soluciones en todo tipo de sectores muy potentes.
En la actualidad hay mucho más acceso a la financiación del que había hace tres o cinco años. Es más accesible llegar al capital necesario para montar tu empresa y crecer y demostrar su potencial.
La transformación del emprendimiento español ha sido brutal en los últimos años; aún no estamos al nivel de EEUU pero hay unicornios que crecen ya en Europa a un nivel muy similar.
Además, también se ha producido una circunstancia que antes no se daba; muchas empresas nacían pensadas para el mercado español. En la actualidad, las compañías que se crean están formuladas para que sus servicios se presten globalmente en muchos mercados.
Todavía no estamos, obviamente, al nivel de EEUU, pero cada vez hay más compañías que son unicornios y que crecen a un nivel en Europa muy similar a EEUU y la tendencia es seguir creciendo. Ha habido un cambio muy drástico en los últimos años, sin duda.
¿Cuál va a ser la estrategia en los próximos cinco años en Bipi?
Nuestro foco es seguir creciendo, ahora tenemos al Grupo Renault como socio que nos ayuda a conseguir nuestro objetivo, y no es otro que llegar a ser la empresa de suscripción de vehículos más fuerte en el mundo; ya lo somos en España y en Europa.
La idea es llevar el negocio a una escala aún más grande, poder ofrecer mejores productos relacionados con lo que hace Bipi y seguir abriendo mercados.
Y centrarnos mucho en el tema de la sostenibilidad, tanto a corto como a largo plazo, porque es un camino largo pero ya lo podemos transitar.