La caza es una actividad que mueve en España más de 6.500 millones de euros al año y cuenta con más de 945.000 licencias de caza vigentes, según datos del Ministerio de Deporte.
Al igual que ha sucedido con el resto de la economía, la transformación digital ha irrumpido en este sector de la mano de dos emprendedores riojanos que con su propuesta quieren contribuir a que esta actividad sea "sostenible, transparente y ética", al tiempo que se convierte en un elemento dinamizador del entorno rural.
En 2019 pusieron en marcha Hunty, la startup española que pretende ser más que una simple herramienta de reservas. Su visión es la de crear el principal marketplace de experiencias de caza y continuar siendo lo que ya son: la mayor comunidad de cazadores de todo el mundo donde se promueve "la sostenibilidad del entorno rural y el enriquecimiento de la España rural", explican fuentes de la compañía.
A través de su plataforma, los cazadores buscan, comparan y contratan cacerías de los más de 500 organizadores que tienen repartidos por toda España. A su vez, desde Hunty auditan a estos organizadores que integran la plataforma, con lo que consiguen que "todas las cacerías disponibles se realicen de manera segura y responsable", sostienen.
De este modo, se aseguran "la seguridad de los participantes, la conservación de la fauna, los derechos de propiedad, el bienestar animal e, incluso, los posibles conflictos que se puedan dar con otras actividades recreativas", añaden.
"Nuestro principal objetivo es proporcionar un espacio para la educación y la difusión de buenas prácticas cinegéticas, fortaleciendo la imagen y la ética de la caza en España", afirma Fernando Bozalongo, CEO y cofundador de Hunty.
Además, añade que "este control nos permite proteger la conservación del medio ambiente y enriquecer el entorno rural, puesto que la caza es un pilar fundamental del desarrollo económico en muchas zonas de nuestro país".
Su propuesta no sólo pone el foco en nuestro país, sino que mira más allá y responde a una necesidad del colectivo cuando salen al extranjero para llevar a cabo estas prácticas. Y es que Hunty contempla más de 3.000 cacerías en varios continentes.
Tradicionalmente, organizar una cacería en un país extranjero ha sido un desafío debido a obstáculos como las barreras del idioma, las diferencias culturales y la coordinación de alojamiento, permisos y otros aspectos logísticos.
De esta forma, Hunty permite desde su plataforma reservar experiencias con especies exóticas en otros países y continentes, tales como África, Sudamérica o Asia. Cabe destacar que el equipo de Hunty está formado por 20 jóvenes de diferentes ámbitos.
"Creemos que la tecnología juega un papel crucial en la modernización y profesionalización de la caza en España. Estamos convencidos de que nuestra plataforma no solo revolucionará la gestión de reservas de cacerías, que tradicionalmente se hacían 'boca a boca', sino que también añadirá valor a un sector en plena adaptación a la era digital. En Hunty apostamos por una caza más accesible, internacional, transparente, sostenible y ética", sostiene Bozalongo.