Adiós a los ensayos clínicos con animales y personas. Esta es una de las consecuencias de crear reproducciones de órganos en las que poder investigar patologías y tratamientos. Por ello, el laboratorio español Procare Health y la universidad de UCLA están desarrollando la reproducción de un modelo de cuello de útero para investigar sobre el cáncer de cérvix.
“Ser capaz de reproducir un cuello de útero en el que introducir células de cultivo para así tener un modelo vivo, que se alimenta con un biomotor, para que funcione como si fuera realmente un cuello de útero”. Así explica a INNOVADORES el objetivo de este proyecto el CEO de Procare Health, Yann Gaslain.
En el cuello del útero coexisten dos tipos de células epiteliales endocervicales y exocervicales y hay una “zona de transformación donde compiten estas dos células y se considera que es el mejor sitio en el que se ancla el virus del papiloma humano”. “Nos interesa reproducir y estudiar el cuello de útero y, en concreto observar esta zona dónde se suele detectar el virus”, puntualiza Gaslain.
La primera fase de este proyecto es reproducir este modelo de cuello de útero y que pueda funcionar con los dos tipos de células para estudiar su funcionamiento. Una vez desarrollado este modelo, “vamos a intentar infectarlo con células lesionadas por el virus para que podamos observar las interacciones celulares entre las células sanas y las infectadas; cómo actúa el sistema inmunitario y cómo se defienden las células sanas y luchan a nivel local con el virus”. Y, por último, se investigarán en el modelo los efectos de los tratamientos, como el Papilocare de este laboratorio español.
Esta reproducción, en definitiva, es una “bomba de información y de captación de datos de las propias células de forma continua en el modelo”. Es un tipo de modelo que permite estudiar en profundidad y en condiciones reales el cuello del útero, por lo que “se pueden llevar a cabo ensayos clínicos y experimentaciones sin poner en riesgo a la mujer y a los animales”. En su opinión, “es importante que la ciencia encuentre caminos para evitar el sacrificio de animales con fines terapéuticos”.
Colaboración y experiencia
Este proyecto de colaboración en Procare Health y el California Nanosystem Institute de UCLA surge ante la necesidad de conocer mejor los mecanismos de acción del propio virus, cómo interactúa con las células y cómo afecta al cuello del útero.
De hecho, en el California Nanosystem Institute ya están trabajando en el desarrollo de la reproducción en chips de otros órganos como riñón, hígado o corazón. El laboratorio español, dirigido desde UCLA por el investigador de Procare Health Danial Khorsandi, aportará toda su experiencia y conocimiento sobre el virus VPH, mientras que el instituto de UCLA se encargará de la parte tecnológica para poder codesarrollar el chip que reproduzca el cuello del útero.
En la actualidad, el equipo conjunto de investigadores ya cuenta con un modelo definido y pueden empezar a trabajar en la fase experimental, pero no será hasta diciembre cuando podamos hablar de un modelo concluido y probado.