Han provocado los acelerados cambios tecnológicos de los últimos años una nueva mentalidad de los españoles ante el coche? Habría que imaginar que sí, si nos atenemos al sexto estudio Españoles ante la nueva movilidad de Pons Seguridad Vial y Autofácil, en el que esta vez participan también Wible, AutoScout24 y Moovit.
Según algunos de los datos más rompedores detectados por una encuesta de 53 preguntas a 8.000 personas en todas las provincias, casi la mitad de los españoles (un 46%) estaría dispuesta a vender su coche, "si tuviera garantizadas eficientemente sus necesidades de movilidad profesional y personal".
Preguntados por el futuro coche autónomo, un 43% de los consultados dice abiertamente que sí se imagina a sí mismo hoy mismo como conductor, (es decir, pasajero) de un vehículo robótico, frente a un 25% que dice que no. Casi todos los restantes se acoge a alguna variante del 'sí, pero': un 10% cree que podría ser dentro de cinco años; un 11% lo imagina para dentro de 10 años; y un 7% le pone plazo a 2030.
Otro dato llamativo es que el mal llamado 'coche compartido' (sería más cierto denominarlo 'coche de alquiler') sería la opción alternativa favorita para un 30% de los encuestados para sus desplazamientos cotidianos, seguida por el autobús, con un 22% de respuestas (y el metro, 20%, que no es una opción en todas las ciudades españolas).
En esa misma respuesta, abierta (suma más de 100), aparecen otras opciones de vehículos eléctricos también 'compartidos' prácticamente llegados a las calles, como la moto (9%), el patinete y la bicicleta (ambas, 8%).
Probablemente, el momento de todo este entramado de medios de transporte alternativo está escalando la cúspide de un ciclo hype de Gartner, combinando la aparición de nuevos 'juguetes' en las calles con los apocalípticos anuncios de cierre al tráfico en el centro de Madrid.
Según se subrayó en una mesa redonda, durante la presentación de la encuesta, el cambio social que se está produciendo, en realidad un cambio generacional, no tiene tanto que ver con la irrupción de nuevas formas de transporte como con cambios de expectativas (estudios, trabajo…) e intereses: si para los mayores de 40 años la obtención del carnet de conducir a los 18 años y llegar a disponer de un coche propio era una aspiración prioritaria, la mayoría de los jóvenes actuales no manifiestan tales urgencias ni deseos.
Así, la gran mayoría de los entrevistados cuenta con algún permiso de conducción y el 91% lo ha obtenido entre los 18 y 24 años. De ese 9% de los entrevistados sin ningún tipo de permiso de conducción, un 24,19% no lo ha obtenido por ser demasiado caro; un 22,23%, por no considerarlo útil para su vida personal y un 21,65% estaba en el proceso de obtenerlo.
La encuesta indaga también en las opiniones sobre seguridad vial, detectando que la mayoría considera que la educación al respecto no es buena en España. Un 42% opina que debería mejorar, un 21% la considera insuficiente y un 11% dice que sería necesaria mucha más formación. En este caso son valores sobre un total de 100, en los que un 17% lo da por suficiente y apenas un 5% responde considerándola muy buena o muy completa.
Madrid y Barcelona
Cuando se pregunta cuál es el método de transporte que se utiliza realmente en la actualidad para ir al trabajo o lugar de estudio, de los encuestados en Madrid son mayoría, 50%, los que citan el coche particular. Un 47% señala el metro y un impresionante 36% apunta al coche 'compartido', por encima del autobús (35%). Como se ve por las sumas, también es una pregunta abierta, que aporta un 22% de caminantes.
La misma pregunta, ceñida a Barcelona, da un 48% al autobús, un 47% al metro y un 35% al coche particular. El porcentaje de los que caminan es igual que en Madrid, el 22%. La bicicleta suma un 15% entre particulares (11%) y 'compartidas' (4%), mientras que en Madrid la suma es 11% (6% particular y 5% 'compartida').
En los desgloses de otras ciudades resulta muy llamativo el caso de Valencia, donde se impone el autobús como transporte actual (42%) al coche particular (40%), pero al interrogar sobre el medio que sería más deseado hay un triple empate (28%) entre las opciones de bicicleta particular, metro y caminar.
Un análisis conjunto de las ciudades de menos de 50.000 habitantes sitúa al coche particular como el transporte habitual claramente dominador (71%) para acudir a las tareas diarias en el uso real. Le sigue muy de lejos por el autobús (23%) y sólo un 14% se declara caminante.
El autobús (30%) y el tren (24%) serían las alternativas preferidas, con el coche particular muy cerquita (23%). La mayoría de las opciones más innovadoras, aunque aparecen en las respuestas, no necesariamente están disponibles.