La enorme pantalla del Austria Center se ha llenado de madalenas y caras de chihuahuas a los que había que prestar demasiada atención para no confundir. “La inteligencia artificial es una palabra de moda en cualquier sector. Pero, ¿qué significa realmente? La inteligencia artificial sirve para distinguir entre todas estas fotos qué es un chihuahua y qué es un muffin”. Con esta sencilla metáfora (véase la imagen que acompaña a este artículo) Betsy Bland, la vicepresidenta del área financiera de la empresa de software Workday, ha querido exponer en el gran evento de la compañía en Europa, el Workday Rising Europe, lo que en la práctica supone para cualquier empresa la implementación de la inteligencia artificial y el machine learning en su organización: dejar a un lado las tareas más rutinarias y sin valor para centrarse en lo importante.
Su compañía está claro que ha sabido hacerlo. Fundada en 2005 como un proveedor de aplicaciones cloud de finanzas y recursos humanos, esta empresa americana ha sabido mirar a la cara a gigantes establecidos del sector como SAP u Oracle a los que, como su propio CEO, Aneel Bhusri, reconoce están comiendo el terreno poco a poco en sus dos áreas centrales de actuación. Y tanto es así que ya cuenta con casi 10.000 trabajadores y entre sus clientes figuran nombres tan importantes como Unilever, Pum,a Siemnes, IBM o el Banco Santander.
Su discurso (el de sus altos cargos y el de los clientes que han contado sus casos de éxito en el evento de Viena) se basa en defender las bondades evidentes de la digitalización y la necesidad de construir organizaciones ágiles en todas las áreas de negocio. “La transformación digital es una cuestión muy humana”, ha señalado Gonzalo Benedit, presidente en EMEA de Workday, en referencia a la necesidad de que la implementación de las últimas tecnologías en la gestión empresarial tiene que ir acompañada de un cambio cultural porque la, tecnología, por sí sola, no vale para nada.
“Ser solo digitales no es suficiente”, ha dicho en el mismo sentido Samuel Huegli, CTO de Tamedia, uno de los principales grupos de comunicación en Suiza. El problema de la crisis de los medios era que no eran lo suficientemente digitales. Y cuando lo fueron el problema siguió existiendo. “La información ya es online y ya es gratis pero las noticias en la red por sí solas no valen y los datos tampoco. Hay que usarlos para crear productos que sean atractivos y fáciles de utilizar para los usuarios”, sentencia. Y ha puesto como ejemplo a seguir el caso de Apple: “No son los primeros en implementar determinadas tecnologías, pero sí son los que mejor saben hacerlas usables por cualquiera”, comentó. Un mantra que se podría aplicar a cualquier sector.
“La inteligencia artificial se ha presentado como una cura para cualquier enfermedad, pero en realidad es una herramienta que utilizamos para hacer mejores predicciones”, ha dicho Leighanne Levensaler, managing director de Workday Ventures. Sin embargo, como ha apuntado, con el componente humano podemos tomar mejores decisiones. "Siri dijo que la máxima hoy sería de 10 grados. Debería haber metido solo ropa de invierno en la maleta, pero como humana sabía que aquí dentro -el recinto del evento- haría calor y escogí ropa de tirantes", y eso es algo que las máquinas todavía no pueden aconsejar. Lo mismo sucede en cualquier aspecto de la gestión empresarial. Por eso, señaló, las empresas necesitan "el talento adecuado trabajando en los problemas adecuados", lo que implica tener a los ingenieros de datos trabajando codo con codo con la gente de negocio, para decidir y conducir el mejor uso del amplio universo de datos.