Los ministros de Defensa y Exteriores de la Unión Europea (UE) analizarán a partir de mañana, en una reunión informal de dos días en Helsinki, el uso de la inteligencia artificial en el ámbito militar, así como las amenazas híbridas y la situación en el golfo Pérsico y el Ártico.
Durante una cena de trabajo previa al encuentro, en el que por su carácter informal no pueden tomar decisiones oficiales, los participantes comenzarán a intercambiar puntos de vista sobre la aplicación de las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial en el ámbito de la Defensa.
Según Finlandia, que este semestre preside el Consejo de la UE, es necesario "estimular las discusiones sobre los efectos del desarrollo de la inteligencia artificial y la digitalización para fomentar su explotación en la Defensa europea", teniendo en cuenta los efectos legales y éticos relacionados.
Los ministros europeos tratarán estas cuestiones con representantes de la OTAN y también del sector privado, invitados a la cita por la alta representante comunitaria para la Política Exterior, Federica Mogherini, a fin de evaluar tanto las oportunidades como los desafíos que la inteligencia artificial y las nuevas tecnologías pueden entrañar para la Defensa.
Los titulares de Defensa celebrarán, ya el jueves, sesiones de trabajo sobre la relación entre clima y seguridad y sobre la coordinación de su presencia marítima.
Y, durante un almuerzo con sus homólogos de Exteriores, abordarán las amenazas híbridas y cómo lograr ser más resilientes y concienciar de ellas en la UE.
Por su parte, los ministros de Exteriores se centrarán en las tensiones en Oriente Medio y, más en particular, en el golfo Pérsico.
Las tensiones han escalado desde que Estados Unidos abandonase el acuerdo logrado con Irán para evitar que desarrolle armas nucleares y de que Teherán retomase las actividades de enriquecimiento de uranio por encima del límite permitido, a lo que se suma una serie de ataques a petroleros en el golfo Pérsico y el derribo de drones.
El presidente francés, Emmanuel Macron, invitó el pasado domingo al ministro iraní de Asuntos Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, a reunirse con líderes europeos durante la cumbre del G7 en Biarritz para tratar de salvar el acuerdo.
Aunque tras la cumbre tanto Macron como el presidente estadounidense, Donald Trump, abrieron la puerta a la celebración de una reunión al máximo nivel entre Washington y Teherán en las próximas semanas, Irán se encargó de rebajar pronto las expectativas al respecto.
El viernes, los titulares de Exteriores concluirán su reunión informal con una sesión sobre la región del Ártico, que, según describió la presidencia finlandesa en un comunicado, tendrá "gran significado estratégico" debido al calentamiento del clima, tanto en Europa como a nivel global, en los próximos "años e incluso décadas".
Además, con sus homólogos de los Balcanes occidentales, los ministros tratarán asuntos de cooperación.
Por otra parte, Finlandia tiene previsto intervenir en la reunión, en el apartado dedicado a asuntos de actualidad, para dejar clara su preocupación por los incendios forestales que en los últimos días devastan parte de la Amazonía, razón por la cual incluso ha planteado prohibir las importaciones de carne de vacuno de Brasil, el mayor abastecedor mundial de ese producto.
Los fuegos que arrasan la Amazonía desde hace dos semanas han generado críticas internacionales al Gobierno de Brasil, liderado por el ultraderechista Jair Bolsonaro, por su supuesta omisión en el control de los fuegos, que en lo que va de año son un 83 % más numerosos que el mismo periodo de 2018.
Las organizaciones ecologistas lo atribuyen al deseo del mandatario, conocido por su escepticismo sobre el cambio climático, de ganar terreno para la agricultura y la ganadería.
Por su parte, los gobiernos de Francia e Irlanda han amenazado con no ratificar el acuerdo de libre comercio adoptado entre la UE y el Mercosur a finales de julio, a menos que Brasil respete sus compromisos en materia de clima, algo que exige legalmente el pacto.
Una vez concluida la reunión, el responsable finlandés de Exteriores, Pekka Haavisto, ofrecerá un almuerzo a los ministros al que también estarán invitados activistas internacionales defensores de los derechos humanos.