Se calcula que una de cada seis personas sufrirá un ictus a lo largo de su vida, una interrupción repentina del flujo sanguíneo en una parte del cerebro o la ruptura de una arteria o vena cerebral, afecciones que pueden provocar lesiones irreparables. Por ello, investigadores de la Universidad Politécnica de Cataluña han desarrollado dos aplicaciones multimedia basadas en realidad virtual destinadas a la rehabilitación motriz y cognitiva de personas con diversidad funcional, principalmente pacientes que han sufrido un ictus.
El ictus está considerado el principal responsable de la discapacidad física en personas adultas y la segunda causa de deterioro cognitivo. Es por ello que actuar de forma eficaz ante los síntomas de la enfermedad es fundamental para minimizar sus efectos, explican fuentes de la universidad.
Así, en cuanto a la rehabilitación motriz, la aplicación desarrollada por los investigadores de la UPC guía al paciente en la realización de los ejercicios de rehabilitación a través de un avatar o personaje virtual. Varios sensores permiten seguir los movimientos de la persona, a la vez que se hace una análisis cinemática (cálculo de ángulos y medida de la asimetría), que permite verificar si se están siguiendo de forma correcta los movimientos indicados por el avatar.
Esta aplicación se puede visualizar tanto en una pantalla de ordenador como a través de unas gafas de realidad virtual. Y, además, los resultados se almacenan en una base de datos para que el equipo de fisioterapeutas las pueda interpretar.
En cuanto a la rehabilitación cognitiva, los investigadores del Laboratorio de Aplicaciones Multimedia han creado una aplicación que simula la compra en un supermercado mediante un entorno de realidad virtual inmersivo. De esta manera, el paciente entrena las capacidades cognitivas principales (memoria, coordinación y atención) de una manera amena, en un entorno habitual de la vida cotidiana.
Para estos proyectos, el equipo de investigación ha contado con el asesoramiento de profesionales de la Asociación Diversidad Funcional de Osona (ADFO) sobre las afectaciones físicas y cognitivas asociadas a la enfermedad y han seleccionado los ejercicios a desarrollar teniendo en cuenta parámetros como los ángulos de movilidad o la información a recoger y valorar.
Proyecto.
Estas aplicaciones han sido diseñadas por los investigadores Jordi Torner y Francesc Alpiste, del Laboratorio de Aplicaciones Multimedia (LAM) vinculado al departamento de Expresión Gráfca en la Ingeniería y Gil Serrancolí del Simulation and Movement Analysis Lab (SIMMA Lab) del departamento de Ingeniería Mecánica. El proyecto ha contado con la colaboración de varios estudiantes que han contribuido a hacer realidad la iniciativa con sus trabajos de fin de grado, así como con el apoyo de la empresa VISYON. El trabajo desarrollado en esta primera fase dio paso el mes de mayo a una prueba práctica de la tecnología con personas afectadas por un ictus, una sesión que sirvió para captar aspectos como la comprensión del funcionamiento de las aplicaciones por parte de los pacientes o la dificultad de los ejercicios planteados. Ahora, los investigadores se encuentran en fase de valorar esta información para mejorar las aplicaciones. Asimismo, está previsto realizar una segunda prueba práctica para acabar de perfeccionar la tecnología antes de la transferencia al mercado.