El Gobierno nipón abrió este martes el plazo para tramitar licencias para operar redes locales de 5G, un tipo de conexiones que sólo se permitirán en áreas rurales en las que no llegue la cobertura nacional con esa nueva tecnología de telecomunicaciones.
Los principales operadores nacionales de telefonía móvil (NTT Docomo, KDDI y Softbank) y la compañía de comercio electrónico Rakuten comenzarán a operar en la primavera de 2020 sus servicios 5G, que permiten velocidades de conexión 100 veces más rápidas que las actuales 4G.
Las licencias para redes locales se concederán a empresas y gobiernos regionales de zonas alejadas de las grandes urbes niponas, en las que no llegará el alcance de las nuevas estaciones 5G que ya se están construyendo en las ciudades y regiones más habitadas de Japón.
Las redes locales 5G podrán emplearse para ofrecer servicios de telecomunicaciones, pero también para operar maquinaria industrial y agrícola o para manejar drones y otros aparatos empleados en la observación meteorológica, el control de los niveles fluviales o la prevención de catástrofes naturales.
Estas redes funcionarán en frecuencias distintas a las que emplearán los operadores nacionales, según explica el Ministerio de Interior y Comunicaciones en su página web.
Entre las entidades regionales que han solicitado licencias para las mismas se encuentran el Gobierno metropolitano de Tokio, operadores de televisión como Jupiter Telecomunicatons y empresas como las tecnológicas NEC y Fujitsu.
Los servicios de telefonía móvil 5G van a estar disponibles en carácter de prueba en Japón desde comienzos de enero y se espera su completa introducción para el 2020.