Los barcos de investigación de la OTAN prueban los sistemas de detección automática, seguimiento y clasificación de diferentes objetos en el mar del centro tecnológico gallego Gradiant.
Una de las ventajas de esta tecnología de vigilancia marítima es que puede desplegarse en escenarios de visibilidad baja, en los que puede detectar y clasificar embarcaciones, personas, animales y otros objetos que se encuentren en el mar.
Estos ensayos son claves para la vigilancia marítima y se realizan en el marco de la Organización para la Ciencia y la Tecnología - Centro de Investigación y Experimentación Marítima (STO- CMRE o por sus siglas en inglés) como parte de las pruebas marítimas del Nordic Recognized Environmental Picture 2018 de la OTAN.
El objetivo de estas pruebas organziadas por la OTAN es desarrollar una tecnolgía que permita “compartir y procesar inteligencia compleja de forma conjunta a nivel internacional”, señalan desde Gradiant. Una veintena de países participan en estos ensayos en Norteamérica y Europa.