“La ingeniería automática permite hacer posible lo imposible”
Manuel Silva, ganador del Premio Comité Español de Automática y catedrático de Ingeniería de Sistemas y Automática de la Universidad de Zaragoza, asegura que el desarrollo de la tecnología es "un proceso absolutamente imparable" aunque plantee "problemas sociales y económicos importantes"
25 septiembre, 2018 13:10La investigación, el desarrollo y la tecnología es absolutamente esencial para sobrevivir en el mundo en el que estamos. Un mundo complicado en el que tampoco podemos decir que renunciamos a hacerlo porque lo hará otro y terminará arruinando tu propia empresa”, subraya Manuel Silva, catedrático de Ingeniería de Sistemas y Automática de la Universidad de Zaragoza e investigador del Instituto de Investigación en Ingeniería de Aragón (I3A), a quien acaban de concederle el Premio Comité Español de Automática, organización nacional de la International Federation of Automatic Control (IFAC).
Silva, que cuenta con cuatro décadas de trayectoria académica y profesional, fue el primer español que hizo su tesis doctoral sobre Ingeniería Automática en el extranjero. Además, junto al profesor Armando Roy, editó en España el primer libro de investigación robótica, escribiendo hace ya más de 30 años sobre Inteligencia artificial y robótica industrial.
Este experto afirma, en un comunicado, que el desarrollo de la tecnología “va a ir hacia delante de forma absolutamente indiscutible. No hay discusión posible y claro, plantea problemas sociales y económicos importantes”. Silva explica que la introducción de máquinas “supone una repercusión en las arcas públicas, menos personas contribuyendo, pero es que hay que pensar un nuevo mundo, porque se nos viene encima”.
En su opinión, la tecnología “está desarrollándose más rápidamente que la capacidad de pensamiento y de concepción del mundo que tenemos, vamos a remolque, como ha pasado históricamente con el Derecho, y hacen falta propuestas que sean rompedoras, pero el proceso es imparable, absolutamente imparable.”
El premio que acaba de recibir habla de la relevancia científico-técnica de sus aportaciones y su contribución a la ordenación de la Ingeniería Automática, "habiendo introducido en España el paradigma formal de las redes de Petri, así como por su labor pionera en el ámbito de la robótica en España."
Qué es la Ingeniería Automática
Es una disciplina que tiene como objetivo hacer que los sistemas funcionen autónomamente. Tiene características un enorme impacto social, ya que liberan trabajos directos que pueden ser penosos, ya sea por contaminación, ruidos, pesos importantes, altas temperaturas, ambientes purulentos…
“La automática permite hacer posible lo imposible”, señala el profesor Silva. “Ha logrado que se puedan llevar a cabo acciones de reacción de forma ta rápida que una persona no podría hacerlo, estamos hablando de milésimas o centésimas de segundo y pueden funcionar las 24 horas del día”.
Sin embargo, también reconoce que esta es la cara, pero que hay una cruz, “el desplazamiento de masa laboral, porque enseguida nos lleva a pensar en puestos de trabajo que se sustituyen. Esto significa, que hay mucha mano de obra poco cualificada que se transforma en menos mano de obra, pero muy cualificada”.
Líneas de investigación
Su grupo de investigación en el I3A está ligado a lo que se conoce como sistemas de eventos discretos y a la robótica. “Personalmente, estoy muy interesado en determinados problemas como sistemas de manufactura o de logística, redes de comunicaciones, internet… El número de situaciones a las que tienen que dar respuesta es tan grande que es difícil manejarlo a pesar de los computadores tan potentes que tenemos porque estamos ante lo que se denomina ‘crecimientos explosivos’. Con las redes de Petri se puede aproximar su análisis, y somos pioneros en ello”, explica Manuel Silva.
El grupo de robótica (ROPERT) “está trabajando en el desarrollo de robots que se puedan desenvolver en entornos no conocidos, con dispositivos que muestren la situación en un punto concreto y a su alrededor”.
Silva tiene muy claro que la ingeniería “es transformadora del mundo y va ligada al humanismo, desde un punto de vista conceptual. La historia, la sociología y la filosofía de la técnica y de la ingeniería se deberían incluir como asignaturas; es el trébede humanístico que deberíamos tener”.