La investigadora principal de la ANU, la profesora Jodie Bradby, puntualiza que el silicio ya se usaba como materia prima para las células solares debido a su abundancia, bajo coste y nula toxicidad. "Pero la forma estándar de silicio no usa toda la luz solar disponible", incide Bradby.  

Propiedades

Bradby. El reto ahora es integrar este material en las industrias solares existentes, lo que según los investigadores puede tardar de tres a cinco años. "