Una inteligencia artificial "centrada en el ser humano", basada en derechos fundamentales, principios éticos y valores. Esta es una de las premisas que recoge el borrador que ya ha publicado la Comisión Europea (CE) con las "guías éticas" para el nuevo plan de inteligencia artificial, presentado por el Ejecutivo comunitario hace dos semanas en Bruselas y que entrará en vigor a mediados de 2019.
En este plan europeo se pretende reconocer que esta tecnología aporta beneficios sustanciales a individuos y sociedad, pero también puede tener un impacto negativo. "El uso de la inteligencia artificial, como de cualquier tecnología debe estar siempre en línea con nuestros valores y defender los derechos fundamentales", ha explicado la comisaria europea de Economía y Sociedad Digitales, Mariya Gabriel, quien ha añadido que el propósito de estas guías es "garantizarlo en la práctica".
Así, se especifica que es necesario "prestar especial atención" a situaciones que impliquen grupos vulnerables como niños, personas con discapacidad o minorías, así como en situaciones de "asimetría de poder o información", como podría suceder entre empleadores y empleados o empresas y consumidores.
"Para que la gente acepte y utilice sistemas basados en inteligencia artificial necesita confiar en ellos, saber que su privacidad es respetada, que las decisiones no son parciales", ha señalado el vicepresidente para la Agenda Digital del Ejecutivo comunitario, Andrus Ansip.
Este avance del código ético fue elaborado por 52 expertos europeos del ámbito académico, empresarial y de la sociedad civil, entre los que figura la responsable de estrategia y nuevos negocios de big data en el grupo Santander, la española Cristina San José.
El borrador permanecerá abierto a comentarios y sugerencias hasta el 18 de enero, cuando el grupo de expertos retomará su labor y elaborará las "guías finales" que serán publicadas en marzo de 2019.
El pasado 7 de diciembre, la Comisión Europea presentó su plan para fomentar el desarrollo y la utilización de la inteligencia artificial en la Unión Europea con el que creará "bancos de datos europeos" que le permitan "competir" con China y Estados Unidos.
La Comisión y los Estados miembros, además de Suiza y Noruega, se comprometieron a alcanzar un total de 20.000 millones de euros de financiación en el sector de la inteligencia artificial hasta 2020, lo que supondría un 70 % más que en el periodo 2014-2017, y mantenerlo de forma anual durante la próxima década