Estos días también ha tenido lugar la cita europea del Amazon Web Services Summit, la filial del gigante del comercio electrónico en la arena TIC. Una cita virtual en la que estuvieron presentes su CEO, Andy Jassy, y el CTO de Amazon Werner Vogels. Ambos con un mensaje profusamente difundido y nada original: la nube es el futuro.
Literalmente, esa es la predicción marcada por esta pareja de directivos: "En 2020 y más allá, la mayoría de las organizaciones se transformarán en un entorno completamente basado en la nube, donde cualquier trabajador puede acceder a cualquier aplicación desde cualquier lugar en cualquier momento", dijo Vogels.
rnPor supuesto, ni una mención a que el modelo de despliegue por defecto en la gran empresa es la cloud híbrida y no la nube pública que comercializa AWS.
De hecho, desde Amazon Web Services más bien culpabilizan a las empresas que mantienen entornos no basados por enteros en la cloud pública, tildándolos, cuanto menos, de conformistas. "Todavía hay un segmento de compañías que está tratando de combatir la gravedad. Argumentan que aún pueden hacer la infraestructura menos costosa que en la nube... A menudo están orgullosos de la infraestructura que han construido, o se trata de la idea de ‘si no está roto, no lo arregles’", citó textualmente Jassy.
De hecho, el argumento de que los costes ocultos en el salto a la nube pública de AWS no es ningún secreto, confirmado ya por analistas independientes y por el consenso de la industria. Pero hay más. AWS también quiso presumir de algunas de las bondades por todos conocidas del cloud computing, como su fiabilidad y escalabilidad. Ironías de la vida, la plataforma donde se celebraba el AWS Summit no fue precisamente capaz de escalar, con una caída confirmada de 5 minutos.