Aunque con ciertas limitaciones y complicaciones por los controles sanitarios, los aeropuertos europeos han reanudado su actividad. La crisis mundial provocada por la pandemia de la Covid-19 ha puesto a prueba la capacidad de estas infraestructuras para gestionar las fluctuaciones y cancelaciones de los vuelos internacionales. El aeropuerto islandés de Keflavic quiere evitar nuevas incertidumbres y ha encontrado la solución en la inteligencia artificial.
La firma británica Veovo es la encargada de proporcionar el sistema que permite pronosticar el volumen de pasajeros que emplearán las instalaciones gracias a los algoritmos de la inteligencia artificial. Quieren así reducir la incertidumbre en torno a la planificación de los servicios aeroportuarios y anticiparse a eventos imprevistos.
La solución de Veovo extrae datos de todas las fuentes disponibles: los horarios de las aerolíneas, la propia base de datos del aeropuerto, los datos que ofrecen los sensores sobre el tiempo de espera en cola, el escaneo de las tarjetas de embarque o incluso los eventos previsto en la ciudad. Con el cruce de esta información, los algoritmos de Veovo pueden realizar un pronóstico preciso de cómo llegarán y transitarán los pasajeros por la terminal. De esta manera el aeropuerto puede planificar los servicios que ofrece a turistas y pasajeros.
Como esta solución permite actualizar permanentemente los pronósticos al analizar en vivo todos los datos con los que trabaja, puede mandar una alerta al operador en el momento en el que detecte que los umbrales de planificación pueden superarse. El propio sistema recomienda las acciones que llevar a cabo para evitar los temidos “cuellos de botella” modificando, por ejemplo, los horarios de embarque, o cambiando la apertura de los accesos de control fronterizo. Esta información servirá para mejorar la previsión de pronostico futura. La inteligencia artificial aprende de estos “errores inesperados”.
La solución forma parte de la plataforma inteligente del Aeropuerto Veovo. Este sistema de Pronóstico de Pasajeros se puede personalizar para acomodar el acceso de un aeropuerto a las necesidades de datos y planificación. Su empleo no requiere de un adiestramiento ni habilidades especializadas al ser muy intuitivo.