Orange también lanza su red 5G 'non standalone', el paso previo al 5G real que aún tardará en llegar
La red 5G de Orange, basada todavía en el corazón del actual 4G, estará disponible únicamente en algunos barrios de Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia y Málaga
7 septiembre, 2020 11:00Vodafone fue el primer operador de telecomunicaciones en lanzar su red 5G en España y, la semana pasada, se unía por sorpresa Telefónica con una cobertura del 75% del territorio patrio. Faltaba sumarse la tercera en discordia, Orange, que no ha tardado mucho en hacer su entrada oficial en esta tecnología.
Según ha informado hoy la compañía gala, ya dispone de cobertura 5G en las principales ciudades de nuestro país, como Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia o Málaga. Eso sí, a diferencia del extenso despliegue de sus rivales, Orange por el momento solo cubrirá las "zonas más céntricas" de cada localidad y con el objetivo de "alcanzar una cobertura de cerca del 30% en cada una de estas ciudades" en este momento.
El lanzamiento -que no tendrá coste adicional para sus clientes, según la 'telco'- aprovecha de nuevo la misma "trampa" que ya emplearan sus comeptidores: estas redes 5G no son, propiamente dichas, redes 5G o al menos no en su forma más pura. La diferencia radica en el uso de redes 5G NSA (Non Stand Alone), que en definitiva consisten en actualizar las infraestructuras de 4G ya existentes para ofrecer algunas de las ventajas que traerá consigo la nueva generación de redes móviles.
Puede parece un detalle menor, pero nada más lejos de la realidad. En el caso de las redes 5G NSA, los protocolos de comunicación entre los dispositivos y las antenas ya son propios de la quinta generación, pero el resto de transmisiones siguen funcionando sobre 4G.
Esto obviamente supone un importante ahorro de costes a los operadores (no tienen que modificar prácticamente nada del hardware que tienen funcionando) pero no trae consigo los mismos beneficios para los usuarios que la red 'pura', ni en velocidad, latencia ni densidad. Para ilustrarlo, solo tenemos que fijarnos en la velocidad como parámetro: las redes 5G NSA -las desplegadas ahora por las 'telco'- son entre cinco y diez veces más rápidas que el 4G convencional, pero diez veces más lentas que el 5G "real".
Qué hay del 5G 'real'
La excusa oficial, más allá del coste de despliegue, para no disponer de estas redes 5G "reales" es la falta de estándares para acometer estas inversiones. Sin ir más lejos, la propia Telefónica reconocía que desplegarían "inmediatamente después la red 5G SA (Stand Alone), cuando la tecnología esté plenamente disponible después de la estandarización".
Lo cierto es que ya hemos asistido a algunas experiencias piloto empleando la red 5G pura. En 2018, por ejemplo, la misma Orange se convirtió en el primer operador en Europa en completar, fuera de un laboratorio, una llamada de voz y de datos sobre una red 5G “pura”.
Igualmente, este año Vodafone comenzó el despliegue de redes 5G SA en entornos empresariales e industriales. Entre otros casos de uso, se probó una aplicación de trabajo asistido con realidad aumentada, simulando el trabajo de inspeccionar un tren de aterrizaje de forma remota, con un móvil.