Aprendizaje, enseñanza y trabajo. Estos han sido los tres ejes sobre los que han girado las reflexiones de los expertos en el enlightED Virtual edition 2020, la conferencia mundial sobre educación, tecnología e innovación.  Y sobre estos han dialogado Satya Nadella, CEO de Microsoft, y José María Álvarez-Pallete, presidente ejecutivo de Telefónica. Nadella ha subrayado la importancia que la tecnología y los datos están cobrando para incrementar los resultados del aprendizaje, lo que ha llevado a Álvarez Pallete a afirmar que estamos entrando en “la edad de oro del aprendizaje donde lo digital es la nueva lengua universal”.

Así, el CEO de Microsoft ha matizado que la tecnología es solo una “herramienta” que precisa de las personas, ha incidido Nadella, para quien los resultados del aprendizaje dependen, sobre todo, de que “se consiga inspirar a los estudiantes y profesores”.

“Estamos viviendo una rápida evolución de modelos de aprendizaje con tecnologías como la inteligencia artificial (IA), la realidad aumentada o la realidad virtual”, ha destacado el CEO español. Para Álvarez-Pallete, “la escuela es una línea de vida” porque es la que permite a los niños tener “la oportunidad de construir un futuro mejor, no solo para ellos sino para todos nosotros”.

Por ello, durante el confinamiento se ha vivido una situación excepcional con millares de niños sin poder asistir. Ha sido en este momento cuando se ha descubierto el papel del “móvil” como “herramienta de microaprendizaje accesible 24 horas al día”, ha puntualizado. De hecho, Nadella ha querido recordar que vivimos en un mundo en el que hay muchos dispositivos, por lo que una de las claves es “cómo repartimos nuestra esa atención”.

“La digitalización se ha acelerado masivamente a causa de la pandemia y todavía hay mucha gente a la que le faltan estas competencias digitales”, por lo que el CEO de Telefónica ha instado a luchar contra la brecha digital en la educación: “El 90% de todos los estudiantes del mundo, 1.600 millones en total, se vieron afectados por el cierre de los centros educativos. Muchos tuvieron acceso a herramientas digitales para seguir aprendiendo desde casa, pero esta situación ha revelado e intensificado el impacto de la brecha digital en términos de acceso a la educación para aquellos más desfavorecidos”.

“Urge aprovechar las nuevas oportunidades que ofrece la tecnología a favor de una sociedad inclusiva. Es hora de reinventar la educación para llegar a todos, poniendo a las personas en el centro”, ha insistido Álvarez-Pallete.

Y sobre esta nueva era en la que estamos inmersos, el sociólogo Jeremy Rifkin, presidente de TIR Consulting Group, ha subrayado que la educación tiene ahora una misión: preparar la pedagogía para “enseñarnos que ninguno éramos independientes, todos estamos interconectados y lo que hacemos en el ámbito individual impacta en el resto de las personas y su forma de vida”.

“Necesitamos una nueva visión del mundo y un plan convincente” porque, ha alertado, “no hay vuelta atrás”, es el momento de pasar de la llamada era del progreso a la era de resiliencia, en la que convergen cambios en comunicaciones, infraestructuras, sistemas energéticos y de movilidad.

Rifkin ha realizado un repaso por la historia: “En los últimos dos siglos la humanidad ha vivido dos grandes revoluciones, y estamos a punto de vivir la tercera”. Las generaciones millenial y Z han demostrado con sus ‘huelgas’ climáticas que entienden la emergencia climática en la que estamos inmersos. “Son dos generaciones unidas que se ven a sí mismas como una especie en peligro de extinción, perciben el peligro. Esto es prometedor”.

Aplicar IA

Por otro lado, Rose Luckin, profesora de la University College London y experta en aplicar tecnologías en la educación, sobre todo IA, ha aterrizado el papel que deben desempeñar en este proceso. Estamos ante una “tormenta perfecta para el impulso de la IA en educación” gracias al auge de los datos, la sofisticación de los algoritmos o el aumento de la capacidad de procesamiento y memoria. “La receta pasa por combinar la inteligencia humana, los datos de múltiples fuentes y los algoritmos para, junto a la Academia, las ‘edtech’ y los propios estudiantes, diseñar el siguiente modelo formativo”.

“Aunque el machine learning es capaz de aprender de los datos, a diferencia de las primeras inteligencias artificiales que debían ser programadas con un set de reglas, lo cierto es que no tenemos una IA general, sino específica. Esto es una gran diferencia en cuanto a que el machine learning es limitado, mientras que la inteligencia humana es de amplio espectro".

En concreto, la profesora ha destacado elementos de nuestra capacidad mental intrínsecamente humana (“elementos que están interconectados entre sí”, a diferencia de los modelos artificiales) como pueden ser el procesamiento metacognitivo, el metasubjetivo, la inteligencia contextual o la autopercepción, el conocimiento académico multidisciplinar o las habilidades sociales.

Hadi Partovi, fundador y CEO de Code.org, ha dado un paso más allá de aplicar la IA en la educación, trabaja por integrar las ciencias de la computación dentro de los sistemas educativos, es decir por enseñar programación a los alumnos en las escuelas. Así, ha subrayado, los niños “mejoran en lectura, escritura, matemáticas” y, además, aprenden habilidades como la creatividad y la colaboración. Por el momento, más de 50 países en todo el mundo ya lo han incorporado en sus planes de estudios.

“No solo se trata de programación”, ha insistido Partovi, por lo que aboga no solo por incluirla como una asignatura más, sino por incorporarla de forma transversal, ya que se trata de “una parte fundacional de la educación básica”, es la ciencia que hará a los alumnos capaces de “resolver problemas globales”. Por ello, ha subrayado que, en momentos como los vividos en esta pandemia por la Covid-19, la tecnología debe formar parte de esos “conocimientos básicos” que los alumnos necesitan para no quedarse atrás.