Ningún responsable tecnológico alberga duda alguna sobre las bondades de la digitalización para su empresa. No ocurre lo mismo si ponemos la lupa en la agenda del CEO o de otras áreas como las finanzas, donde esta parcela ha sido considerada históricamente como un gasto y no como una inversión.
Sucedía en los últimos años una curiosa paradoja: eran las unidades de negocio las que más empeño ponían en su salto digital, incluso sobrepasando los muros y límites establecidos por sus colegas de Sistemas. Y, como resultado, se sobrevino un debate sobre quién sería el verdadero impulsor de la revolución digital que tanto nos ocupa ahora mismo: los directivos de Negocio o los de Tecnología.
Pero hay un elemento intermedio que, cual bisagra, resulta indispensable para que una compañía logre una digitalización plena: los directores financieros. Estos perfiles no sólo enfrentan su propia y necesaria transformación tecnológica, sino que son el punto de decisión final sobre los presupuestos que se asignan a unos u otros menesteres.
El acelerón 'postpandemia'
Es por ello que resulta fundamental que los CFO (como se designa a esta posición por sus siglas en inglés) se suban al tren digital y apuesten de forma decidida por esta materia. Un proceso que, hasta ahora, se había ido consolidando pasito a pasito, pero que tras la pandemia vivirá una aceleración como nunca se había visto.
Así lo constata un estudio internacional de la firma de análisis Gartner, según el cual los directores financieros tienen la intención de aumentar sus inversiones en el área digital más que en cualquier otra durante este 2021.
En concreto, el 82% dice que tiene la intención de aumentar la inversión en capacidades digitales en este curso en comparación con 2020, mientras que el 70% de los encuestados tiene la intención de aumentar el gasto en Tecnologías de la Información en este año fiscal.
“A medida que se impusieron los bloqueos por la covid-19, la mayoría de los financieros intentaron digitalizar tantos procesos como fuera posible para pasar a un entorno de trabajo virtual”, explica Alejandra Lozada, analista senior de Gartner. "Los directores financieros también ven la tecnología como un diferenciador competitivo que puede ampliar la brecha de rendimiento entre sus negocios y los de sus pares".
No es oro todo lo que reluce
Hasta aquí las buenas noticias sin ningún resorte negativo que deba ser reseñado. Pero el informe también recoge algunas impresiones de estos ejecutivos que no son tan halagüeñas y plantean serias dudas sobre cómo será esa ola de digitalización que desatarán los CFO.
"La encuesta también muestra que [los directores financieros] tienen menos claridad sobre lo que significa el negocio digital o cuáles son las tecnologías con el impacto más significativo para sus negocios", destaca Lozada. "Esto será un gran desafío".
La causa de esa desconexión con la realidad tecnológica de los CFO radica en que estos perfiles necesitan un lenguaje y una visión de la digitalización claras "para enfocar a sus equipos, inversiones e iniciativas clave en esa transformación". Añade el documento que esta claridad "resulta necesaria para hacer inversiones tecnológicas coherentes que se mejoren entre sí".