IBM adquirió Red Hat en 2019 por 34.000 millones de euros. Desde ese momento, tres hombres han estado al frente del coloso del código abierto: Jim Whitehurst (posteriormente incorporado a la matriz), Paul Cormier (que dio un paso al lado como presidente del consejo) y, ahora, Matt Hicks.
El nuevo presidente y CEO de Red Hat atiende a D+I como ya hicieron sus predecesores. Una suerte de tradición que, en esta entrevista exclusiva, comienza repasando su trayectoria de más de 15 años en la enseña. Primero, como desarrollador, vinculado a proyectos, y luego ya ligado al área de negocio.
Un perfil, el técnico, que vemos cada vez más sentado en el despacho principal de más y más tecnológicas. "Es una tendencia en el mercado. Hay la premisa de que necesitamos construir algo de valor y el sector está cambiando muy rápido. Es importante conocer bien los productos", introduce Matt Hicks. "Comencé mi carrera en consultoría y ahí construí una excelente visión de las cosas por las que atraviesan las empresas. Luego cambié a roles de ingeniería pero a medida que avanzas en tu carrera, debía ser capaz de administrar un negocio más que codificar. Pero soy y siempre seré ingeniero de corazón".
[Del 'open source' al 'edge': Red Hat define las claves de la innovación]
Cuando hace mención a su etapa como consultor, lo que no introduce de primeras es que Hicks trabajó para IBM. Así que, en cierta forma, la vida ha demostrado una cierta estructura cíclica. Una aventura de ida y vuelta a una empresa que es igual de única que su actual dirigente, con una atención al detalle de su código que es digna de admiración.
"Al final, cualquier empresa que no posee la propiedad intelectual sobre el código que ejecutan sus clientes debemos prepararnos bien para utilizar ese código y ayudar a las empresas a continuar innovando con él", explica. "Me encanta ese modelo, porque eliminamos algunas de las palancas comerciales tradicionales y eso nos lleva a un mundo muy diferente, desde Linux hasta la virtualización o los contenedores".
"La gente entiende mejor hoy en día lo que es el código abierto. Cuando se hace bien, es un vehículo de innovación que nos hace movernos rápido gracias a las comunidades saludables que contribuyen a ello. Hay que hacer malabarismos con el equilibrio de estas comunidades y la velocidad a la que se transforman las empresas modernas, agregando por nuestra parte la parte de previsibilidad que aporta el ciclo de vida de valor empresarial", confiesa Matt Hicks.
"La gente entiende mejor, hoy en día, lo que es el código abierto. Es un vehículo de innovación que nos hace movernos rápido"
A pesar de esa premisa histórica, de la que Hicks se muestra orgulloso, los cambios recurrentes en el liderazgo de Red Hat obliga a hacer la pertinente pregunta sobre la estabilidad de esa visión a largo plazo.
"Mi esperanza es estar aquí en cinco años, absolutamente", responde Matt Hicks a este medio. "En su momento había una oportunidad para Jim en ejercer influencia en IBM y Paul tenía objetivos muy concretos para establecernos en la nube y el 'edge', estableciendo un modelo de ventas cómodo. Ahora ha llegado el momento de profundizar en todo ello".
"Hemos cambiado mucho en los últimos años, pero hemos tenido una sucesión interna fenomenal. Todos hemos estado involucrados en establecer la estrategia durante mucho tiempo, todos entendemos la empresa y eso demuestra que el enfoque no va a cambiar", añade el CEO.
El camino a la nube híbrida
Red Hat fue pionera en la adopción de los sistemas operativos de código abierto para el ámbito empresarial. También en el desarrollo de Kubernetes como estándar de los contenedores. Y, entre ambos mundos, en el devenir de la nube híbrida como elemento de unión entre los consolidados centros de datos de las empresas y los despliegues de 'cloud' pública de los grandes hiperescalares.
"Ha habido un gran crecimiento de la nube híbrida en las empresas, porque muchas de ellas tienen heredada una importante huella tecnológica. La clave es cómo podemos optimizar la convivencia de esta huella con las propuestas de nube actuales y ahí es donde creo que tenemos un papel desde Red Hat: traer la innovación de código abierto con la consistencia que hemos construido hasta ahora", explica Matt Hicks. "Tenemos una oferta nativa con Red Hat Enterprise Linux, pero también con Azure, AWS o Google Cloud. Podemos ayudar a los clientes a llegar a la ubicación correcta, aunque sea en múltiples nubes".
"Durante mucho tiempo se pensó en ir a una sola nube y acabar ahí, no hacía falta ninguna capa híbrida. Pero ahora hemos madurado"
"Durante mucho tiempo hubo un cierto interés en ir a una sola nube y la creencia de que ahí se acabaría todo. Entonces no hacía falta esta capa híbrida. Pero ya estamos en un estado más maduro, en que sabemos que seguiremos usando diferentes ubicaciones -desde mainframes hasta la nube- y debemos tratarlos como una sola infraestructura".
El presidente y CEO de Red Hat presume de la aproximación al respecto de su enseña, con más de 1.000 proveedores certificados en la nube y una apertura hacia nuevos contextos, como el 'edge computing', creando tecnologías que permitan manejar cualquier capacidad de cómputo descentralizada "con la misma eficiencia" que en los clásicos centros de datos. Un extremo que cobra especial relevancia al tratar de vehículos autónomos, la logística inteligente o las telecomunicaciones.
Del 'mainframe' a los contenedores
Hicks menciona de pasada los 'mainframes', esas ingentes máquinas transaccionales ideadas por IBM que llevan con nosotros desde los inicios de las Tecnologías de la Información. Le pedimos profundizar más en esa área y, especialmente, a cómo se pueden modernizar las viejas aplicaciones en COBOL para funcionar en pleno siglo XXI.
"Hemos trabajado muy de cerca con IBM para que los clientes puedan usar el código abierto para obtener el mayor valor posible de su infraestructura. Queremos implementaciones de 'mainframe' con Linux, con nuestra lógica, y creemos que podemos crear un entorno increíblemente eficiente en computación", destaca el directivo. "Al final del día, el 'mainframe' continúa brindado resiliencia, seguridad de datos y dotamos de la tecnología suficiente para que las empresas puedan elegir el paso más natural para moverse a unos u otros contextos".
"VMware llegó tarde al juego de los contenedores. Tendrán que decidir cuál es el camino que quieren seguir [tras su compra por parte de Broadcom]"
La palabra 'convivencia' es una constante en el discurso de Matt Hicks. Pero para lograrla es necesario abordar tendencias paralelas como la virtualización y, especialmente, los contenedores que permiten mover determinadas cargas de uno a otro entorno. Y es en este campo en el que Red Hat juega una partida a dos bandas, apostando por su propia tecnología (Openshift) y sellando alianzas con rivales como VMware.
Dada la delicada situación de esta última (en plena venta a Broadcom, con clientes buscando la puerta de salida y rumores de despidos masivos y recortes en innovación), le preguntamos a Hicks si ve una oportunidad para crecer más a costa de sus aliados-competidores.
"Siempre hemos sido muy fuertes en los centros de datos y hemos colaborado mucho con VMware en la capa de virtualización. Creo que ellos llegaron un poco tarde al juego de los contenedores con Tanzu y desconozco cuál es su futuro con Broadcom. Tendrán que decidir en el futuro cuál es el camino de lo que tiene sentido para ellos, pero eso no alterará nuestro propio camino", responde políticamente el CEO de Red Hat.
Así ve Matt Hicks el futuro digital
Para culminar la entrevista con el máximo responsable de Red Hat, un hombre afable y cercano, le pedimos que saque la bola de cristal para trazar el futuro de la era digital desde su perspectiva.
"Las nubes públicas han demostrado que funciona en muchos casos de uso, pero no en todos. Si queremos ser una plataforma híbrida, no podemos simplemente decir que hacemos el software que la posibilita, sino que tenemos que encontrar los modelos correctos", comienza su alocución Matt Hicks.
"Otra área de interés es cómo se introduce la ciencia de datos de código abierto en la aplicación de estos escenarios. Y eso colinda con DevOps y todo el trabajo que ya hicimos en Red Hat Enterprise Linux y luego en J Boss. Pero, en paralelo a todo ello, vemos una clase diferente de desarrolladores, los científicos de datos, que construyen y entrenan los modelos que han de pasar por los mismos canales de entrega para ser utilizados"
"Por eso nos apasiona la idea de no mover líneas de código, sino mover a las empresas con estos modelos que profundicen en el procesamiento del lenguaje natural o el aprendizaje profundo, por ejemplo, encapsulando la ciencia de datos de código abierto", concluye.
Buenas perspectivas de negocio.
A pesar de la incertidumbre económica generalizada, Matt Hicks se muestra confiado en el futuro inmediato de Red Hat y el mercado tecnológico en general.
"No hemos visto el impacto de la incertidumbre ni la inflación en las empresas, ya que todas ellas deben recurrir a la innovación para conseguir ajustar sus costes. Esperamos que la economía global se mantenga lo suficientemente fuerte y que las empresas puedan conseguir mediante la innovación lo que llevan impulsando los dos últimos años", explica.
En cuanto al mercado español, Hicks presume de sus relaciones con grandes como Santander, BBVA o el sector público, al mismo tiempo que afirma que es un país "realmente fuerte en el uso de la tecnología, con una base instalada con muchos clientes interesantes".