Turno para las presentaciones. Tenemos claro que decir de dónde venimos va a provocar una reacción en nuestros interlocutores. "¿España?", preguntan de nuevo esbozando ya una sonrisa que rebosa ilusión.
Sin dejarnos empezar a explicar que D+I es la representación española en este evento, arrancan a hablar de alguien con un "cerebro prodigioso, capaz de aconsejar (a 300 kilómetros por hora) a los ingenieros para mejorar no su rendimiento, sino el de su compañero de equipo"; de alguien que "nos ha dado un plus, que nos ha hecho más rápidos, mejores".
Hablan -lo habrán deducido- de Fernando Alonso, doble campeón del Mundo de Fórmula 1 y que este año está sorprendiendo a propios y extraños con una escudería que, ahora mismo, es la segunda mejor de la parrilla, por delante de 'gigantes' como Ferrari o Mercedes, cuando la temporada pasada fue el séptimo.
El sueño de la victoria número 33 en la carrera de Alonso está más cerca que nunca y eso hace que los ánimos estén por las nubes (más adelante entenderán el juego de palabras).
Estamos en el cuartel general de Aston Martin, en el mítico circuito de Silverstone (Reino Unido), donde la marca ha decidido presumir de alianza con la tecnológica norteamericana NetApp, presidida por otro español, César Cernuda.
El fichaje de Alonso por la escudería británica, como reconocen en el equipo, les ha hecho mejores (hasta la fecha, cuatro podios en cinco carreras; ninguno en 2022), pero también se admite que la relación con el proveedor de servicios en la nube NetApp está resultando "determinante".
Hay dos preguntas que flotan en el ambiente durante toda la jornada. La primera: ¿qué hace que los servicios ofrecidos por NetApp sean tan importantes para Aston Martin? La segunda: ¿cómo se atreve esta gente a dejar a un periodista conducir por un circuito un deportivo de 700 cv? Daremos respuesta a la primera, que la segunda no tiene explicación posible.
[César Cernuda (NetApp): "Sólo utilizamos el 30% de los datos que generamos cada día"]
NetApp es un proveedor de servicios en la nube que se encarga de que sus clientes gestionen el almacenamiento y procesado de todos los datos que manejan de la manera más eficiente posible.
Como se imaginan, una escudería de Fórmula 1 maneja una inmensa cantidad de datos en cada carrera. Pongamos cifras a esto: Aston Martin trabaja con 440 gb de datos telemétricos en cada gran premio y más de 10 tb por temporada.
Pues bien, la principal misión de la tecnológica norteamericana es asegurar al equipo que sus datos no sólo están a buen recaudo sino que están disponibles en el momento en el que se necesitan con una latencia mínima.
Lo hacen con un 'sencillo' pasillo de transferencia de datos que empieza en el monoplaza, viaja a toda velocidad al garaje y a la sede central de la escudería y también a diferentes puntos de la nube (NetApp trabaja con los principales 'gigantes' del sector -AWS, Microsoft Azure y Google Cloud-) y regresa analizada y procesada para la toma de decisiones.
Teniendo en cuenta que la estrategia en Fórmula 1 se tiene que decidir en minutos, imaginen a qué velocidad trabajan los servidores.
Hay varios conceptos -ya más complicados, aunque relacionados con lo anterior- que la tecnológica ha introducido en el día a día de Aston Martin, como SnapMirror, una de las joyas de la corona de NetApp, precisamente porque se trata de una tecnología que "está transfiriendo los datos a un ritmo significativamente mejorado".
Un segundo concepto que aparece en las conversaciones en el evento mantenidas con la CIO de Aston Martin, Clare Lansley, o con Piero Gallucci y Matt Watts, vicepresidente de NetApp UK y Chief Technology Evangelist de NetApp, respectivamente, es el de FlexPod, una infraestructura convergente que "reemplaza múltiples puntos singulares de fallo, mejora la disponibilidad y el rendimiento, al tiempo que elimina los sistemas heredados".
NetApp lleva tiempo aconsejando a cualquier compañía lo importante que es diseñar una estrategia sobre dónde guardar sus datos, cómo gestionarlos, cómo procesarlo… Esa estrategia es lo que en la compañía llaman data fabric y que, en una escudería de Formula 1 cobra todo su sentido y se ve en plataformas como FlexPod.
La sostenibilidad en F1
Lo que se consigue con el uso de herramientas como las mencionadas, por cierto, no sólo es velocidad en el procesamiento de datos sino reducir el tamaño de los datos a disposición de los ingenieros y, como consecuencia, conseguir un impacto positivo en la reducción de la huella de carbono, ya que muchas acciones se realizan en remoto.
Porque, tal y como se dijo en el evento organizado en Silverstone, la sostenibilidad es uno de los grandes retos de la Fórmula 1. La teoría (la normativa) quiere conseguir una competición con cero emisiones en el año 2030.
Watts explica a D+I que "no es imposible, pero va a ser increíblemente complicado" de conseguir. Al menos, en Aston Martin tienen claro que están trazando el camino correcto gracias a soluciones como las de NetApp.
La compañía estadounidense explica que en la nueva fábrica inteligente de Aston Martin en Silverstone, la tecnología Cloud Insights ayuda a "consolidar los sistemas más antiguos y menos eficientes de la compañía y proporciona una supervisión esencial de la temperatura y la potencia, lo que permite a Aston Martin supervisar y minimizar el consumo de energía".
Además, los escuderos tecnológicos de Fernando Alonso y su compañero Lance Stroll pueden aprovechar fácilmente los recursos de los principales proveedores cloud del mundo (con los que trabaja NetApp), dando soporte a diferentes cargas de trabajo con una potente infraestructura según sea necesario. "Esto significa que solo se emplea la potencia informática que se necesita, y no más", recalcan.
La mejora del rendimiento (gracias a lo que NetApp llama un clúster de kubernetes -contenedores de información específica), la fiabilidad que se consigue gracias a los sistemas FlexPod convergentes o la seguridad de los datos (gracias a Cloud Secure de NetApp) son otros de los objetivos cumplidos en esta alianza.
Lansley es consciente de que "toda la presión recae sobre nuestro equipo de IT -formado por unas 40 personas- para ser más competitivos y más sostenibles". En relación con ello, Watts añade que "hay que dar los datos adecuados, a la gente adecuada, en el momento adecuado".
Lo que está claro es que, a día de hoy, el Aston Martin que pilotan Fernando Alonso y Lance Stroll es el mejor evolucionado de toda la parrilla. El monoplaza de 2023 es casi dos segundos y medio más veloz que el de 2022; la segunda escudería que ha conseguido un coche más veloz es Williams, con una evolución de 1,1 segundos. El dato es incontestable.
Es muy difícil valorar qué ventaja competitiva tiene el monoplaza de Aston Martin gracias a su alianza con NetApp, pero no hay duda de que es la única escudería de la parrilla que cuenta con una solución 360 para los datos como la que ofrece la tecnológica norteamericana.
Este reportaje debería haber concluido como un cuento de hadas, con el relato de un puesto de privilegio de Alonso en la parrilla de salida en Imola para confirmar que todo lo que hemos contado en torno al entramado tecnológico que hay detrás de Aston Martin sigue dando buenos resultados y que no es flor de un día. Pero, como ya sabrán, el gran premio fue suspendido por amenaza de lluvias torrenciales.
Las nubes se han empeñado, pues, en ser protagonistas esta semana: en la Emilia Romagna, cargándose la función; en Silverstone, demostrando que otro tipo de nubes son fundamentales para que el espectáculo pueda continuar.