Uno de los centros de datos de OVH Cloud.

Uno de los centros de datos de OVH Cloud.

Tecnológicas

La estrategia del último galo en pie frente a los hiperescalares: una nube soberana europea con toques cuánticos

OVHcloud presume de competir con AWS o Microsoft Azure, a años luz de sus escalas y capacidades, pero con la predictibilidad en costes como gran baza.

Más información: La nube pública superó los 720.000 millones de euros en 2024, dominada por cinco tecnológicas

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Si los datos son el nuevo petróleo, la nube es su geopolítica. En este particular mapa, tres imperios se reparten todo el territorio: Amazon Web Services (AWS), Microsoft Azure y Google Cloud, los llamados hiperescalares, con una capacidad de despliegue global, una economía de escala arrolladora y un músculo financiero que pocos pueden desafiar. Juntos, controlan gran parte del mercado en todas sus capas (IaaS, PaaS y SaaS) y avanzan a paso firme en Europa, donde muchos gobiernos y empresas han optado por su infraestructura en busca de fiabilidad y capacidades avanzadas de inteligencia artificial.

Pero ante el empuje de los colosos, una compañía francesa desafía la mayor desde el Viejo Continente: OVHcloud, el proveedor europeo que se resiste a sucumbir ante los colosos estadounidenses. Con sede en Francia y una expansión global que abarca 43 centros de datos en países como Alemania, Reino Unido, Polonia e Italia, la compañía se aferra a un modelo alternativo que pone el acento en la soberanía de los datos, la sostenibilidad y la libertad del cliente.

A primera vista, la lucha parece desigual. En términos de capital, infraestructura y volumen de clientes, los hiperescalares son comparables al Imperio Romano en su máxima expansión. Pero, como la aldea gala de la famosa historieta de Goscinny y Uderzo, OVHcloud reivindica su espacio propio.

"Somos el único proveedor cloud europeo capaz de competir con los hiperescalares, en nube pública, IA y en cuántica. De hecho, EEUU es nuestro segundo mayor mercado después de Francia. Hasta en la tierra de los hiperescalares, hay sitio para nosotros", presume John Gazal, vicepresidente de OVHcloud para el sur de Europa y Brasil.

Soberanía europea y costes predecibles

Para OVHcloud, la cuestión es estratégica, no solo un asunto técnico. Las empresas europeas que confían en AWS, Azure o Google Cloud deben aceptar que sus datos quedan sujetos a legislaciones extraterritoriales, denuncia Gazal: "Los clientes están cada vez más cansados de los hiperescalares. Buscan precios predecibles, libertad de movimiento y garantías de que sus datos no estarán expuestos a normativas ajenas".

La enseña opera ya 43 centros de datos en países como Francia, Polonia, Reino Unido, Alemania e Italia, y ha expandido su presencia a Australia, Singapur, India, Estados Unidos y Canadá. En España, desde el pasado curso OVHcloud cuenta con una zona local desde el CPD de Interxion, aunque no hay planes concretos de abrir una instalación propia. Con todo, factura 1.000 millones de euros y crece a doble dígito, siempre de acuerdo a lo declarado por sus portavoces. Son cifras considerables, pero todavía a años luz de sus declarados rivales.

Pero vayamos a los argumentos esgrimidos por Gazal, acompañado en rueda de prensa por Adrián González, director de desarrollo de negocio en OVHcloud. Frente a las prácticas cerradas de sus competidores, la compañía francesa apuesta por la interoperabilidad, el código abierto y los estándares de mercado, con la promesa de que los clientes puedan migrar sus cargas de trabajo sin bloqueos tecnológicos o dependencia de un solo proveedor. 

Para muestra, un botón: ante la agresiva subida de precios propiciada por VMware tras su venta a Broadcom, OVHcloud decidió jugar a dos bandas. Por un lado, renovando su alianza con esta compañía. Por otro, y ante la vorágine de empresas que querían saltar del barco, fortaleciendo su colaboración con la gran alternativa del segmento de la virtualización y la hiperconvergencia, Nutanix.

El segundo argumento de la Galia de las nubes atañe al coste, entendido no tanto como una política a la baja, sino más consciente. Así, a diferencia de AWS o Azure, con un modelo de tarificación variable basado en uso, OVHcloud ofrece precios más predecibles, con ahorros del 40% al 70% según las cifras de la empresa. Es pertinente esta última puntualización, pues todos los contendientes de este mercado hacen aseveraciones similares, en función de la metodología escogida para hacer su comparativa...

Del PaaS a la inteligencia artificial

Podríamos pensar que su propuesta de valor es inferior a la de sus contendientes, pero en ello también se está afanando la firma gala por ponerle remedio. Su estrategia se centra en desplegar 40 soluciones en PaaS (Plataforma como Servicio) y la promesa de añadir 14 más en 2025. Además, mantiene una fuerte presencia en servidores dedicados y bare metal, con procesadores EPYC de AMD y opciones de infraestructura híbrida para clientes con necesidades más específicas.

Eso en lo que atañe a la infraestructura habitual que esta compañía viene ofreciendo. Pero OVHcloud también quiere hacerse con parte del pastel de la inteligencia artificial generativa, hoy en manos nuevamente de los grandes hiperescalares.

Para ello, su planteamiento pasa por reivindicar esa soberanía de los datos y la integración de los principales modelos de código abierto, desde Mistral a la reciente DeepSeek, en su seno. En la parte física, incorporando GPUs de última generación, incluyendo H100 y H200 de NVIDIA, además de alternativas de AMD. 

Computación cuántica: el último campo de batalla

Quizá la apuesta más ambiciosa de OVHcloud es su incursión en la computación cuántica. Este campo, que rige casi en exclusiva IBM como fabricante y proveedor a través de su propia nube, es no obstante una porción mínima de su negocio y de su estrategia inmediata.

En 2023, la firma gala firmó la compra de un computador cuántico de Quandela, una startup especializada en computación cuántica fotónica, y en 2024 lo inauguró: un modesto equipo de dos cúbits, lejos de los 127 que ya monta habitualmente IBM en sus despliegues con el chip Eagle. En los planes de OVHcloud está incorporar otro nuevo, Pasqal, con 100 cúbits este mismo curso. A ello se suman seis emuladores cuánticos, uno de ellos comprado paradójicamente a IBM.

Entre sus principales socios en estas lides se incluye la española Multiverse Computing. Con ella y el resto de implicados se está trabajando, entre otros campos, en la confluencia de la cuántica y la inteligencia artificial, incluyendo la mejora de la compresión de los grandes modelos de lenguaje.

Un mercado de 1,4 billones de euros

Los ingresos mundiales de servicios de nube pública superaron los 800.000 millones de dólares (720.000 millones de euros) en 2024 en todo el mundo, lo que supondrá un incremento del 20,5% con respecto a 2023, según datos de IDC.

Este crecimiento se mantendrá en 2025, y se espera que la industria registre una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR, por sus siglas en inglés) durante cinco años del 19,5%, alcanzando unos ingresos mundiales de 1,6 billones de dólares (1,4 billones de euros) en 2028.