El próximo mayo se cumplen dos años desde la entada en vigor del tan temido Reglamento General de Protección de Datos, o GDPR. Y de los grandes miedos iniciales, de la falta de cumplimiento de la inmensa mayoría de empresas, hemos llegado a un punto en el que ya nos hemos acomodado a esta regulación (salvo por los incómodos avisos en todas las webs que consultamos).
Pero lo más relevante, ahora que ya hemos superado el primer año completo bajo esta norma, es que la amenaza de sanciones milmillonarias a quien se saltara la privacidad de los consumidores ha quedado poco menos que en aguas de borrajas.
Recordemos que el GDPR contemplaba multas de hasta 20 millones de euros o el 4% de la facturación global en caso de que una compañía incumpliera los principios básicos de protección de datos. Sin embargo, en todo 2019 apenas se contabilizaron penalizaciones por valor de 114 millones de euros. Esta cifra, proporcionada por DLA Piper, supone una cantidad ínfima en comparación con las premisas iniciales, máxime si tenemos en cuenta que estamos sumando no sólo las violaciones de datos sino todas las infracciones, hasta las más técnicas o nimias, del GDPR.
Hasta el momento, la multa más destacada sigue siendo la que el regulador francés impuso a Google, de apenas 55,4 millones de dólares. Ello permite que Francia sea el país que más dinero ha recaudado de empresas que se han saltado el GDPR (56,5 millones de dólares), casi el doble que la segunda nación en la lista, Alemania, con 27,2 millones. Irónicamente, no es en tierras galas donde más infracciones se han registrado, sino en los Países Bajos, con nada menos que 40.647 multas en 2019.
114 millones de euros, 126 millones de dólares, ¿es mucho o poco dinero? Parece una cantidad ridícula, muy lejos de las expectativas iniciales de la UE. El efecto disuasorio parece escaso, incluso puede hacer creer a ciertas empresas que les compensa saltarse la protección de datos y arriesgarse a una mínima sanción. Aunque hay un matiz, un motivo para el optimismo: el número de infracciones reportadas está aumentando a una tasa del 12% diaria. ¿Será 2020 el año en que veamos la primera gran y ejemplarizante multa?