He de reconocer que, al finalizar estas líneas, habré activado ya la respuesta automática de mi correo electrónico para las próximas semanas. Ese 'out-of-the-office' tan deseado por el que lo envía y, al mismo tiempo, envidiado por aquellos que siguen al pie del cañón.
En cualquier caso, cerrar por vacaciones (personalmente, porque D+I seguirá al corriente de toda la actualidad digital sin pausa, incansables como el león que ahora nos acoge bajo su pelaje) produce irremediablemente la necesidad de hacer balance. De todo lo superado en unas circunstancias tan difíciles como las que vivimos, de lo que nos sentimos orgullosos y también de aquello en lo que tenemos que seguir trabajando.
Permítanme pues que comparta este ejercicio de reflexión con todos ustedes, nuestros lectores, a quienes nos debemos.
Para D+I no sólo es el final de una temporada al uso; también es el cierre de la primera mitad de un año de estreno con nuestros nuevos colores y en la casa de El Español que tan bien nos ha acogido. Como todos los comienzos, no les voy a engañar diciendo que ha sido sencillo o que no hemos hecho jornadas maratonianas para poder hacer frente al reto de consolidar, una vez más, el medio pionero y líder en innovación, digitalización y nuevas fronteras de la tecnología en habla hispana.
Pero creo que el esfuerzo ha merecido la pena. El inestimable 'feedback' de nuestra audiencia, tanto cuantitativa como cualitativamente, ha sido extraordinario. Logros como el 'Wake Up, Spain!' que celebramos en abril fue la constatación de la capacidad de ejercer como punto de unión entre la economía clásica y la digital, de ser esa punta de lanza tan imprescindible para la recuperación de nuestro país tras la covid. Y el seguimiento diario a todos nuestros artículos, reportajes en profundidad y entrevistas mundiales en exclusiva ha sido cálido y continuado. Por tanto, a todos gracias.
Han sido unos meses, además, de intensa actividad en la arena digital. A los recientes anuncios de la Carta de Derechos Digitales o la ansiada Ley de Startups hemos de sumar toda la incertidumbre y final celebración del Mobile World Congress, la consolidación de Málaga como 'hub' tecnológico en el sur de Europa -con el 'robo' a Madrid del Digital Enterprise Show de por medio- o el creciente rol de nuestro país en el mapa internacional de centros de datos y para el tráfico de internet.
Muchas han sido las noticias que hemos publicado en estos meses, siempre con el poso y el análisis que nos caracteriza. Hemos cubierto temas tan diversos como la brecha de género en el sector TIC, los sesgos y problemáticas que rodean a tecnologías como la inteligencia artificial, los últimos avances en computación cuántica y, en un plano más inmediato, las numerosísimas trabas que encuentran las compañías y Administraciones a la hora de digitalizarse.
Hemos contado la historia de decenas de startups, españolas y de América Latina, cada semana. Nuestras miras se han posado sobre los proyectos tejidos por los centros tecnológicos y parques científicos de nuestro país. Y hemos sacado la lupa para detectar la innovación y los procesos de cambio en cada una de las Comunidades Autónomas para conseguir esa mirada periférica que nos hace únicos.
Por supuesto, esta labor ha sido una obra colectiva en la que el valor es mucho mayor que la suma de todos sus elementos. De nuevo, me tomo la licencia de destacar el trabajo, talento y esfuerzo constante de nuestro redactor jefe, Alfonso Muñoz, y de los compañeros de fatigas Javier Arnau, Beatriz Aznar, Noelia Hernández y Rosa Jiménez Cano. También de Rafa Navarro como editor de esta publicación, de Lucía de la Cruz al frente de 'los dineros' y de todos los colaboradores (Julio Miravalls, Mar Carpena, Marta Sardá, Esther Paniagua o Esther Molina) y columnistas (demasiados para citaros a todos en estas líneas, aunque sí me gustaría reseñar a Elena Arrieta como mi 'ex' laboral). Sin todos ellos, esto no sería ni la mitad de lo que es.
Queda mucho por hacer y, especialmente, por mantener el estándar que nos hemos fijado. Ahí dedicaremos nuestros esfuerzos en la nueva temporada, para la que tenemos preparadas varias sorpresas y propuestas disruptivas -predicando con nuestra propia enseña- para todos nuestros seguidores.