No cabe duda de que vivimos en una sociedad cada vez más interconectada y competitiva, con más de 4.760 millones de personas en todo el mundo que utilizan algún tipo de red social, es decir, más del 75% de la población mundial, y donde la educación superior se enfrenta a una constante demanda de oportunidades de crecimiento personal y profesional, programas innovadores e instituciones de calidad.
En este panorama altamente competitivo, el marketing de redes sociales emerge como un aliado fundamental para el éxito de las instituciones académicas y como una herramienta esencial para las instituciones de educación superior que buscan destacarse y cumplir con su misión de proporcionar una enseñanza de calidad.
En este sentido, entender cómo funcionan las redes sociales puede beneficiar seriamente a las instituciones de enseñanza superior. Así pues, algunas de las principales ventajas de aprender los trucos de estas plataformas son la promoción y representación de los valores y logros de la institución, o el desarrollo de nuevas oportunidades de aprendizaje, ya que por muy importantes que sean las fuentes de información tradicionales, las redes sociales pueden ser una herramienta válida de investigación o comunicación.
Por ejemplo, se puede promocionar una institución educativa utilizando un hashtag basado sobre un curso específico puede ayudar a recopilar tweets y discutir su impacto o significado, o sumergirse en Facebook para una mirada crítica a la desinformación.
Asimismo, es importante considerar las cuentas de redes sociales como aulas digitales, ya que son espacios para aprender más sobre la institución, sus logros y sus valores. Además, según un estudio reciente de Niche Partners, el 73% de los aspirantes a estudiantes utilizan las redes sociales para buscar centros de enseñanza.
Así pues, entre los consejos esenciales para que las instituciones de enseñanza superior puedan sacar el máximo partido de sus cuentas en redes sociales se incluyen:
1. Maximizar el potencial de los antiguos alumnos en redes. Desde una recaudación de fondos hasta eventos exclusivos para antiguos alumnos, las redes permiten a las instituciones mantener una conexión constante con sus graduados, lo que no solo fortalece el sentido de comunidad, sino que también atrae a futuros estudiantes que desean unirse a esta red de éxito. Así, una estrategia integral para las instituciones de educación superior es el descubrimiento de antiguos alumnos en estas plataformas a través de herramientas de promoción de empleados como Amplify, para extender su alcance de maneras diversas y beneficiosas.
2. Analizar el sentimiento en redes. El uso de métricas de redes sociales ofrece datos precisos para ayudar a comprender cuantitativamente una audiencia y medir el sentimiento de esta. Tanto si el objetivo es atraer más tráfico a una web determinada o llegar a un grupo demográfico específico de estudiantes potenciales, revisar los datos de participación, alcance y audiencia pueden ayudar a comprender el éxito de las comunicaciones y orientar hacia áreas de mejora en el futuro.
3. Escuchar y compartir. Las redes sociales son una poderosa herramienta de difusión, pero también pueden ser un gran espacio para escuchar, lo que hace que sea esencial realizar una escucha social activa, supervisando las cuentas, los hashtags y las palabras clave para mantenerse informado.
4. Establecer directrices y políticas para las redes sociales. Es importante establecer directrices de redes sociales y políticas con una documentación sólida que ayude a agilizar la incorporación, promueva las mejores prácticas y mantenga una voz unificada en todos los canales. Se pueden incluir, por ejemplo, recursos de salud mental o enlaces a oportunidades de formación en redes sociales. Esto proporcionará un apoyo crucial a los gestores de redes sociales y también capacitará tanto a estudiantes como a profesores a la hora de participar de forma independiente y auténtica.
5. Construir y potenciar comunidades. La creación de hashtags que el alumnado pueda apoyar y el desarrollo de un programa de admisión accesible para que estudiantes y profesores puedan solicitar la creación y gestión de cuentas, permite que los estudiantes y su creatividad tomen las riendas.
Asimismo, su gestión por parte de los estudiantes son una poderosa visión de la auténtica vida del campus, tanto si se comparte el trabajo de un creador dedicado como si comparten contenidos generados por los usuarios de varios miembros de la comunidad.
Las redes sociales son un espacio fundamental donde las interacciones humanas y la construcción de relaciones son el núcleo de su funcionamiento. En el contexto educativo, las universidades y escuelas superiores encuentran en estas plataformas una oportunidad inigualable para conectar con sus estudiantes y antiguos y futuros alumnos.
Cuando estas instituciones logran mantener conversaciones abiertas, sinceras y auténticas en este entorno digital, no sólo fortalecen los lazos existentes, sino que también crean nuevos puentes de confianza. Esta confianza es la base de un mayor compromiso y un impacto más profundo, lo que refuerza la idea central de que las redes sociales pueden favorecer el éxito de las instituciones educativas en la era digital.
En conclusión, se trata de construir relaciones sólidas que perduren a lo largo del tiempo, enriqueciendo la experiencia educativa y generando un impacto duradero en la comunidad académica.
***Romina González Galetto es directora regional de Iberia y Francia de Hootsuite