El mundo avanza a un ritmo vertiginoso, impulsado por avances tecnológicos que redefinen nuestras vidas y economías. La digitalización ya no es una opción, sino una necesidad para ser competitivos y relevantes en el escenario global. Desde la asociación DigitalES estamos comprometidos con ayudar a crear junto al sector púbico y sociedad civil un entorno de oportunidades donde la transformación digital sea un elemento de progreso social y crecimiento económico.

Esta semana hemos firmado con la Junta de Andalucía un protocolo de colaboración que marca un hito significativo en nuestro compromiso como sector con los territorios y comunidades autónomas. Este acuerdo, cuya vigencia se extiende durante los próximos cuatro años, establece las bases para promover el desarrollo y la implementación de tecnologías digitales en Andalucía, fomentando la innovación tecnológica y mejorando la competitividad de las empresas locales. En una época donde la transformación digital es esencial para impulsar el desarrollo socioeconómico, esta iniciativa no podría ser más oportuna.

Uno de los aspectos más destacables del acuerdo es la implementación de metodologías para la elaboración de indicadores de digitalización. Estos indicadores son como un reloj de progreso: vitales para medir y establecer áreas de mejora. En la era de los datos, contar con métricas precisas y actualizadas es fundamental para tomar decisiones informadas y efectivas. Estos indicadores no solo reflejarán el estado actual de la digitalización en Andalucía, sino que también servirán de brújula para guiar futuras iniciativas y políticas.

La identificación de necesidades formativas y el diseño de propuestas educativas en ámbitos digitales es otro pilar crucial del acuerdo. La educación y la capacitación son las herramientas más poderosas para empoderar a las personas y preparar a la fuerza laboral para los desafíos del futuro. La colaboración en este ámbito contribuirá a que los ciudadanos tengan acceso a la formación necesaria para prosperar en un mundo cada vez más digitalizado. Desde habilidades básicas en tecnología hasta competencias avanzadas en tecnologías que están siendo ya disruptivas como la inteligencia artificial (IA), internet de las cosas (IoT) y blockchain, estará presente en el análisis de los perfiles tecnológicos que está demandando el sector.

El impulso de proyectos de investigación y desarrollo en tecnologías emergentes es una estrategia clave para mantener a los territorios a la vanguardia de la innovación. La colaboración con instituciones académicas y empresas tecnológicas permitirá explorar nuevas fronteras y aplicaciones de estas tecnologías, generando un impacto positivo tanto en el ámbito económico como social. La investigación y el desarrollo no solo impulsan la competitividad de las empresas locales, sino que también atraen inversiones y talento, creando un círculo virtuoso de crecimiento y progreso.

La promoción y el apoyo para el desarrollo de infraestructuras tecnológicas es otro componente esencial de este acuerdo. Sin una infraestructura adecuada, todos los esfuerzos en digitalización podrían quedarse cortos. La adecuación al régimen de intervención administrativa de la Ley General de Telecomunicaciones facilitará el desarrollo de estas infraestructuras, asegurando que la región esté equipada para soportar y potenciar el crecimiento digital.

Otro de los puntos fundamentales que nos proponemos abordar con esta alianza es el apoyo y mentoría a startups y emprendedores en el ámbito digital, crucial para la creación de un ecosistema digital dinámico y vibrante. Las startups son a menudo las pioneras en innovación y cambio, y su éxito puede tener un impacto significativo en la economía regional. Proveerles de los recursos y el apoyo necesario para crecer y prosperar es una inversión en el futuro de Andalucía.

Finalmente, como apuntaba antes, la digitalización debe ser accesible para todos, sin importar la ubicación geográfica o situación socioeconómica de cada individuo, de manera que las acciones de capacitación y apoyo para la digitalización de territorios y colectivos vulnerables reflejen un compromiso con la inclusión digital. Este enfoque inclusivo asegura que los beneficios del progreso digital se distribuyan de manera equitativa, promoviendo un desarrollo más justo y sostenible.

Este acuerdo es, en definitiva, un paso necesario de la contribución como sector a la digitalización de la región. Se trata de una alianza que refleja nuestro compromiso constante por asentar las bases de un futuro más competitivo, innovador y próspero para los distintos territorios. De modo que este acuerdo se articula en torno a todo aquello que consideramos esencial para ese progreso: indicadores fiables de digitalización, formación, investigación, infraestructuras, apoyo a startups e inclusión digital. Pasos en firme que demuestran cómo la colaboración público-privada puede ser un catalizador poderoso para avanzar juntos.



*** Miguel Sánchez Galindo es director general de DigitalES (Asociación Española para la Digitalización)