Tras varios meses de escucha atenta, observación cuidadosa, persistencia medida y paciencia activa, esta primavera recibimos la invitación para unirnos a EsTech. Esta plataforma, creada dentro de Adigital de la mano de referentes del ecosistema como Factorial, Cabify y Glovo, junto con Endeavor y SpainCap, tiene como objetivo impulsar el desarrollo de las compañías de alto crecimiento –las scaleups- en España.
Una de las razones principales para buscar ese acercamiento era sumar el "mal endémico" de los emprendedores, nuestra hiperactividad no diagnosticada, a una misión y unos valores en los que creemos firmemente, iniciando así un camino de devolución y apoyo a un ecosistema, el de las startups y scaleups españolas, que se encuentra en un momento de oportunidad.
Las scaleups desempeñan un papel crucial en varios ámbitos estratégicos a nivel país. Contribuyen significativamente a la creación de empleos cualificados, refuerzan la autonomía estratégica en un contexto geopolítico polarizado y promueven la digitalización de sectores clave de la economía. Este impacto ha llevado a las scaleups a ocupar un lugar destacado en la agenda pública.
Iniciativas como los Fondos Next Tech, con 4.000 millones de euros destinados a proyectos digitales innovadores, o el Banco Europeo de Inversiones (BEI) participando en un megafondo español con un objetivo de mil millones de euros, demuestran el enorme beneficio de la colaboración público-privada para superar uno de los mayores desafíos de las empresas en crecimiento: la atracción de inversión.
Precisamente, en las últimas semanas, hemos tenido la oportunidad de trasladar a representantes del Ministerio de Transformación Digital y la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial nuestra visión sobre los fondos europeos y su impacto en las organizaciones innovadoras. Nunca hubiera esperado un grado tan alto de receptividad a establecer canales de comunicación y a desarrollar una hoja de ruta transparente y conjunta a este respecto.
Más allá de la financiación, programas como 'Comunidad Desafía' de ICEX, en el que tenemos el privilegio de participar, son fundamentales para acompañar a las scaleups en sus procesos de internacionalización. La expansión a otros mercados es una de las principales vías de crecimiento para cualquier compañía, especialmente las scaleups, que nacen con mentalidad global y sus productos y servicios no suelen estar constreñidos a las necesidades de un único mercado.
Otro aspecto crucial para asegurar su sostenibilidad y la escalabilidad es la formación. Programas específicos y gratuitos, como 'Scaleup Spain Network' (impulsado por la Fundación Bankinter, Wayra y Endeavor), ayudan a las empresas en su transición de startup a scaleup, anticipando y enfrentando los retos que encontrarán en el camino para asegurar su evolución exitosa.
Este acompañamiento es esencial, al igual que el intercambio de experiencias dentro del ecosistema. La colaboración con los principales actores de los países de nuestro entorno se antoja clave. En los últimos meses hemos estado cerca de asociaciones de emprendimiento europeas. Aunque hay mucho que aprender de hubs más maduros como el francés o el británico, es evidente que las scaleups españolas están ganando peso y el interés de los inversores internacionales por España es cada vez mayor.
Por ello, debemos aprovechar la situación en la que nos encontramos para seguir apoyando el desarrollo de las empresas de alto crecimiento y maximizar la oportunidad estratégica que representan.
La existencia de "campeones" con ADN local, que actúen como referentes, inspirará a futuros emprendedores y los guiará en sus procesos de aprendizaje y desarrollo. A medio plazo, esto generará lo que Endeavor denomina "efecto multiplicador", animando a los emprendedores a soñar en grande, a superar complejos y a crear empresas de alto crecimiento que escalen rápidamente mientras desarrollan una mentalidad de retribución a la comunidad. Esto aumentará el impacto individual de los fundadores y fomentará la reinversión de sus retornos (en caso de alcanzar un exit) en nuevos proyectos disruptivos.
Por todo ello, si reciben el apoyo adecuado para continuar su trayectoria ascendente, las scaleups podrán igualar en tamaño y representatividad a las empresas del Ibex35, conformando un tejido empresarial español altamente innovador. Al apoyar a estas empresas, reduciremos la brecha tecnológica con otros territorios y consolidaremos a España como un actor competitivo a nivel nacional, contribuyendo a los objetivos europeos.
Iniciativas como los fondos Next Tech o la Ley de Startups crean un escenario perfecto para seguir avanzando y proponer mejoras que permitan a las empresas, una vez superados los primeros años de vida, contar con incentivos para continuar con su trayectoria ascendente.
El camino a seguir es claro. Las scaleups pueden convertirse en las compañías que lideren desde el ejemplo la transformación del modelo productivo de España. En consonancia con el llamamiento que EsTech y Adigital realizaron con motivo de las elecciones europeas del 9 de junio, España debe aspirar a convertirse en una superpotencia en innovación, priorizando las necesidades de las empresas de alto crecimiento para que dispongan de un sistema de incentivos adecuado, un entorno regulatorio estable y acceso a fondos públicos.
*** Nico de Luis es cofundador y COO de Shakers.