Inés Leopoldo, directora de Tech Business en IMMUNE Technology Institute.

Inés Leopoldo, directora de Tech Business en IMMUNE Technology Institute.

Opinión HUMANIZANDO LA TECNOLOGÍA

'Reskilling' ejecutivo: esencial para liderar el cambio

Inés Leopoldo
Publicada

Imaginemos a un CEO de una empresa manufacturera que debe decidir sobre la implementación de inteligencia artificial en su cadena de producción. ¿Está preparado para este reto? ¿Cuenta con las habilidades necesarias para tomar decisiones informadas en este complejo panorama?

En un mundo que cambia a un ritmo vertiginoso, los líderes empresariales se enfrentan al desafío de adaptarse o quedar relegados y desaparecer. La era digital ha transformado radicalmente los negocios, y las habilidades que antes llevaban al éxito ya no son suficientes.

El reskilling ejecutivo, es decir, la actualización y adquisición de nuevas competencias y conocimientos, se ha vuelto imperativo. 

Para que este proceso sea efectivo, debe integrarse en la cultura de la empresa, fomentando un ambiente donde el aprendizaje continuo sea valorado. Esto implica promover iniciativas como programas de mentoring, facilitar el acceso a plataformas de aprendizaje online y crear comunidades de práctica donde los empleados puedan compartir conocimientos y experiencias.

Un acelerador del reskilling es la integración de habilidades relacionadas con la inteligencia artificial (IA) generativa, tecnología que está transformando la toma de decisiones en las empresas. IBM señala que el 97% de los ejecutivos en España que utilizan IA generativa han implementado marcos éticos para mitigar riesgos, destacando la importancia de un uso responsable de esta tecnología.

Para liderar en este panorama, los consejos de administración y la alta dirección deben considerar varios pasos clave.

Primero; evaluar el impacto de las tecnologías en la empresa. Es crucial entender cómo la IA y la analítica de datos afectan al sector en un entorno BANI - frágil, ansioso, no lineal e incomprensible.

McKinsey recomienda que los consejos formulen preguntas críticas sobre el impacto de la IA generativa y evalúen si equilibran adecuadamente la creación de valor con la gestión de riesgos.

En segundo lugar, se debe fomentar el aprendizaje continuo y el desarrollo tecnológico. El reskilling requiere adquirir habilidades técnicas, pensamiento estratégico y agilidad en la toma de decisiones.

Como tercer punto hay que optimizar la toma de decisiones con analítica avanzada. La tecnología permite reducir sesgos en las decisiones mediante análisis precisos. Los consejos pueden utilizar la analítica para anticipar tendencias y responder a las necesidades de los clientes.

Por último, en cuarto lugar, se ha de establecer un marco de gobernanza, ética y ciberseguridad. La adopción de IA generativa y tecnologías avanzadas impulsa la innovación, pero también exige una estructura de gobernanza que equilibre la modernización con la seguridad organizacional.

McKinsey enfatiza que en sectores dependientes de tecnología, los líderes deben implementar políticas de ciberseguridad robustas para proteger los activos y la reputación. Este marco debe priorizar el avance tecnológico junto con una evaluación exhaustiva de riesgos.

La efectividad del reskilling en el ámbito empresarial está respaldada por datos sólidos. El informe EY sobre el futuro del trabajo resalta que la IA generativa está impulsando a las organizaciones a priorizar la capacitación en habilidades técnicas y socioemocionales, con estimaciones de hasta 300 millones de empleos automatizables en los próximos años.

Además, un análisis del Instituto de Empresa muestra que las empresas que invierten en upskilling y reskilling logran una mejora del 15% en eficiencia operativa y una retención de talento del 35%. Telefónica, por ejemplo, ha formado a más de 16.000 empleados en habilidades digitales, cubriendo internamente el 25% de las vacantes y logrando que el 40% de los ascensos a puestos directivos sea ocupado por mujeres.

Como ya anticipaba el Foro Económico Mundial, además de las competencias tecnológicas, habilidades blandas como el pensamiento crítico, la resiliencia y la flexibilidad serán esenciales para el liderazgo del futuro. Los líderes que apuestan por esta renovación no solo deben adaptarse, sino también impulsar activamente la innovación y el cambio dentro de sus organizaciones.

***Inés Leopoldo es directora de Tech Business en IMMUNE Technology Institute.