Un Plan Nacional para impulsar a los campeones tecnológicos de España
Ante un panorama global marcado por la incertidumbre geopolítica, una intensa competencia económica y la urgencia de una transición digital y ecológica efectiva, España debe tener una visión ambiciosa, impulsada por la innovación y el dinamismo de sus empresas tecnológicas. No se trata sólo de adaptarse al cambio, sino de liderarlo, haciendo de la tecnología el motor de un progreso sostenible, social y económico.
En este contexto, las scaleups son un aliado estratégico. Estas empresas, reconocidas por su rápido crecimiento, enfoque global y capacidad para integrar tecnologías digitales, están transformando ámbitos clave de nuestra economía: desde la movilidad y la energía hasta la salud, las finanzas o el mercado inmobiliario. No hablamos de un sector específico, sino de un nuevo paradigma empresarial, un modelo de crecimiento exponencial que está redefiniendo la economía global.
Conscientes de esta realidad, hace más de dos años, desde Adigital, junto a Endeavor, SpainCap y nueve scaleups, fundamos EsTech. Nuestro objetivo era agrupar y visibilizar a este tipo de empresas e impulsar iniciativas que favorezcan su crecimiento y retengan a nuestros campeones tecnológicos.
Por el camino, se han producido grandes avances como es la aprobación de la Ley de Startups o la creación de fondos públicos y privados orientados al crecimiento empresarial y a la digitalización, tanto a nivel nacional como europeo. Los cimientos están puestos; ahora toca construir sobre ellos para garantizar un entorno que permita a las scaleups desplegar todo su potencial.
En esta línea, el pasado 27 de noviembre presentamos el "Plan Nacional para la Escalabilidad", elaborado en colaboración con las empresas de EsTech y organizaciones como BME, SpainCap, Endeavor, Osborne Clarke, Wayra y Kfund.
Este plan propone acciones concretas para: reforzar y diversificar las fuentes financiación de las scaleups, crear nuevos esquemas fiscales que incentiven su crecimiento, atraer y retener talento y liderar espacios y negociaciones en la conversación europea sobre scaleups.
Entre otras cuestiones, plantea que determinadas empresas que hayan pasado de los 5 o 7 años previstos en la Ley de Startups, también se puedan beneficiar de sus medidas.
Además, se incluyen medidas para impulsar el acceso de estas empresas a los mercados de capitales españoles. Todo ello, acompañado de una estrategia de posicionamiento común entre las organizaciones que promueven un modelo productivo basado en la innovación y el desarrollo de una economía avanzada.
Países de nuestro entorno ya están impulsado políticas y estrategias de este tipo para favorecer el crecimiento de sus empresas tecnológicas. España no puede ser una excepción.
A raíz de este Plan, promovimos también una declaración pública, suscrita por una treintena de agentes de la comunidad emprendedora, inversora y tecnológica de España. Tanto el Plan como la declaración buscan, de manera abierta y propositiva, abrir un diálogo público-privado que coloque a las scaleups como un eje central en la agenda política y económica.
La escalabilidad no es solo un desafío nacional, sino una prioridad europea. La Comisión Europea ha identificado las tecnologías críticas que el continente debe priorizar para garantizar su seguridad económica y competitividad.
Además, los recientes informes liderados por Mario Draghi y Enrico Letta, subrayan que la tecnología y la escalabilidad son pilares fundamentales para que la UE recupere la competitividad frente a Estados Unidos y China.
España tiene una oportunidad única para liderar esta transformación. Contamos con fortalezas en áreas como la transición energética, los centros tecnológicos y la innovación en políticas públicas. Ahora debemos capitalizarlas para posicionarnos como Hub Digital Europeo. Esto requiere una acción coordinada entre Administraciones públicas, empresas e inversores, con una visión compartida y un compromiso firme con el futuro.
La escalabilidad es el camino para construir una economía más dinámica, resiliente y justa, capaz de generar prosperidad y bienestar para todos. Es momento de liderar, con ambición y determinación, la próxima etapa de la Unión Europea.