El sector inmobiliario comienza a moverse tras el estallido de la burbuja. La compraventa de viviendas aumentó un 19,4% en junio en relación al mismo mes de 2015, hasta sumar 36.856 operaciones, su mayor cifra desde enero de 2013. 39.920 transacciones, según ha informado el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Con este repunte, la compraventa de viviendas encadena cinco meses consecutivos de alzas interanuales. También, el sector de la construcción ha sido el segundo sector que más empleo ha generado en el segundo trimestre del año, solo superado por el sector servicios, según la Encuesta de Población Activa (EPA).
Por ello, si estás pensando en realizar una inversión en vivienda sobre plano, una de las opciones más económicas, es recomendable seguir una serie de consejos que ha recopilado la agencia inmobiliaria Don Piso.
1. ¿Quién? A la hora de comprar un inmueble, lo más importante es saber a quien compramos. Es decir, conocer la trayectoria del vendedor, su experiencia, si se trata de una empresa, un particular o un promotor y, de forma obligatoria, saber si este vendedor es o no el propietario del suelo sobre el que anuncia que edificará las viviendas. En ocasiones, muchas empresas o fondos se ocultan bajo una persona que en realidad no es el dueño de los mismos.
Precio y fechas, exactas
2. Precio justo. En segundo lugar, no debemos olvidar reclamar que en el contrato de vivienda aparezca el precio final de la vivienda que se adquiere, con el IVA incluido, fecha exacta de entrega de llaves y no aceptar aproximaciones, ni en fechas ni en precios. Esto permite terminar con posibles disputas por sobrecostes o retraso en los plazos previstos.
3. Los planos. En la firma del contrato hay que requerir al promotor los planos de la vivienda. Así se evita cualquier futura modificación a la pactada anteriormente pudiendo demostrar cualquier cambio unilateral durante la construcción de las obras, uno de las principales quejas más frecuentes entre los compradores de este tipo de inmuebles.
4. El contrato. Por supuesto, hay que leer bien el contrato y preguntar todas las dudas que se tengan. Este es el mejor consejo, aplicable a todos los acuerdos por escrito y, por supuesto, aún más. De este modo, podemos revisar las posibles cláusulas con las que poder actuar más adelante. El contrato únicamente se llevará ante notario cuando al propietario le entreguen las llaves.
Los pagos, por transferencia
5. Nada de pagos en negro. Todas las aportaciones que se realicen durante el tiempo que se prolonga la construcción de las viviendas deberán producirse a través de transferencia bancaria. Para este caso, Don Piso recomienda comprobar que su destino es una cuenta separada e independiente abierta por el promotor a tal efecto. De tal forma que con esas aportaciones que realizan los compradores el promotor solo debe hacer frente a los gastos de edificación y no a los de compra del suelo, ni a la tramitación de los planes parciales o a los gastos de urbanización.
6. Exigir un aval general de toda la promoción. Ello garantiza todas las cantidades entregadas a cuenta por todos los futuros propietarios de las casas de la promoción. Y, por supuesto, reclamar el aval individual, garantizado por un banco o una compañía de seguros que será el que indemnice y permitiría recuperar el dinero pagado en caso de que no se cumplan las condiciones previstas y no se pueda entregar las vivienda. Es la única manera de garantizar una indemnización con la que recuperar el dinero aportado para la vivienda.