Hasta ahora iba a paso lento, silenciosa y lejos de cumplir sus objetivos en España. Sin embargo, mediado 2016, la automovilística Tesla ha decidido pisar el acelerador y alcanzar casi una treintena de puntos de recarga en este mercado, que hasta ahora tenía casi olvidado. Unos ‘enchufes’ sin los que sus vehículos eléctricos tienen muy difícil su desarrollo en la península Ibérica.
Tesla cuenta actualmente con 29 puntos de recarga en España. La mayoría de ellos, 25, son cargadores al uso, o como Tesla los denomina 'destination charging' y sólo cuatro son ‘supercargadores’. Estos últimos son una de las claves de su negocio para convencer de las ventajas del coche eléctrico porque, permiten recargar la batería del vehículo en menos de media hora. Sin ellos, la recarga completa para un viaje de larga distancia puede durar hasta 30 horas en un enchufe doméstico.
La compañía fundada por Elon Musk prometió hace casi dos años que, para finales de 2015, tendría 15 ‘supercargadores’ repartidos por toda la geografía española en áreas de alta densidad de tráfico, como autovías y autopistas. Iba a partir de los Pirineos para llegar a toda la Península de Este a Oeste y de Norte a Sur. Sin embargo, como suele suceder con las agresivas previsiones de Tesla, ese objetivo ha sido inalcanzable.
Actualmente, Tesla tiene cuatro ‘supercargadores’ en España, dos de ellos instalados en los últimos cinco meses. ¿Dónde están? Los dos primeros, en Gerona y en Tarragona. Los siguientes, también en Tarragona (en la localidad de L’Aldea) y, el cuarto, en la Valencia, en Paterna.
¿Llegará a cubrir España de ‘supercargadores’ este año? Tesla no ha vuelto a hacer previsiones al respecto, aunque Musk ya dejó caer hace meses, a través de la red social Twitter, que iba a acelerar el paso en España y en su web, Tesla asegura que en 2016 cubrirá la península Ibérica. Su objetivo global es ambicioso: quiere alcanzar los 7.000 puntos de recarga rápida en todo el planeta antes de que acabe 2017.
Un paseo por hoteles de lujo
Al margen de esos cuatro ‘megaenchufes’, los otros 25 puntos de recarga que tiene en España son cargadores de pared. Para instalar estos ‘enchufes’ Tesla llega a acuerdos con hoteles, restaurantes o centros comerciales. Y en España ha decidido, sobre todo, ir a por enclaves hoteleros de alta gama, como el Arts de Barcelona, el hotel María Cristina de San Sebastián, el Wellington en Madrid o el Hotel Hospes Maricel en Mallorca.
De esos 25 cargadores, tres están situados en Barcelona y otros dos en Madrid. Y dos de ellos en enclaves vinculados al enoturismo: en el hotel de Abadia Retuerta LeDomaine, en Ribera del Duero (Valladolid) y el Hotel Marques de Riscal en Elciego (Álava). A pesar del avance en puntos de recarga durante el último año, Tesla no adelanta más detalles de sus planes en España, tampoco si tiene pensado abrir un concesionario propio, como ya tiene en Francia, Italia o Alemania, el país europeo donde tiene más desarrollada su infraestructura.
Retrasos y más retrasos
Los retrasos son habituales a la hora de hablar de Tesla. Y su última presentación de resultados fue una muestra más. La compañía tuvo que reconocer que los seis primeros meses del año fueron un “infierno” porque no consiguió cumplir los plazos de entrega. Y volvió a augurar una mejora para los próximos meses. Espera incrementar un 20% su producción antes de que acabe el año, después de lograr la cifra de 2.000 vehículos fabricados a la semana. Entre enero y junio esperaba alcanzar las 17.000 unidades vendidas y se tuvo que conformar con 14.400.
El año clave para ver si Musk logra cumplir sus propósitos es 2018. Entonces ya estarán en la carretera, previsiblemente, los primeros Model 3, el low cost de Tesla con un precio de venta de 35.000 dólares. Hoy, el único modelo que vende, el Tesla S, cuesta 70.000 dólares. En 2018 también tiene que alcanzar la cifra de 500.000 unidades vendidas. El año pasado, por ejemplo, alcanzó las 50.000 entregas.
Más rápido que Ferrari
Donde sí avanza es en la capacidad de sus baterías. Tesla acaba de presentar su modelo más rápido y con más capacidad de recorrido. Se trata de una nueva versión del Model S, P100D, capaz de llegar a 100 kilómetros por hora en 2,5 segundos y con una autonomía de 613 kilómetros. Hasta ahora, sólo Ferrari y Porsche habían fabricado en serie vehículos con esa capacidad de aceleración.
Será rápido, pero no económico. La nueva versión del Model S se comercializará por 134.500 dólares (casi 120.000 euros). “El coche más rápido del mundo es eléctrico. En el futuro, la gente va a mirar los coches de gasolina de la misma forma que nosotros miramos los motores de vapor. Son algo pintoresco”, aseguró Musk durante la presentación del nuevo modelo.
Esta nueva versión también es más rápida y tiene más capacidad que el X, el todoterreno urbano (SUV) de Tesla. Este último es capaz de recorrer hasta 542 kilómetros sin recargar y, como máximo, acelerar de 0 a 100 kilómetros en 2,9 segundos.