Así lo señalaron a Europa Press en fuentes del departamento que encabeza Álvaro Nadal, tras conocerse un informe del banco de inversión estadounidense Goldman Sachs advirtiendo de una caída de la rentabilidad del sector eléctrico de hasta el 40%, lo que provocó pérdidas generalizadas del sector en Bolsa en la jornada del jueves.

Desde el Ministerio confirmaron que el secretario de Estado de Energía, Daniel Navia, se reunió recientemente con representantes del banco norteamericano y enmarcaron este encuentro en los contactos que habitualmente mantiene Energía con otros grandes inversores para explicarles la reforma energética.

Las mismas fuentes aseguraron que "no hay nada nuevo" respecto a lo anunciado por Nadal el pasado mes de junio ante la Comisión de Energía, Turismo y Agenda Digital del Congreso de los Diputados, donde se mostró a favor de revisar la rentabilidad razonable de las plantas renovables a partir de 2020, ya que puede rebajar la factura de la luz de los consumidores españoles entre un 5% y un 10%.

Nadal afirmó entonces que el Gobierno está a favor de esta revisión para que suponga "una rebaja sensible al recibo de la luz de todos los españoles".

El titular de Energía defendió ligar la retribución al bono del Estado, tal y como recoge la norma, lo que implicaría una caída de esta rentabilidad a las renovables con respecto al 7,39% fijado para el periodo actual.

En 2013 se fijó este primer periodo regulatorio para las renovables, que termina en diciembre de 2019, con una rentabilidad calculada con el rendimiento del bono del Estado a 10 años más un diferencial de 300 puntos básicos, lo que suponía ese 7,4%.

Sin embargo, el descenso en este tiempo del interés del bono y el no proceder a un cambio normativo para aumentar el actual diferencial llevaría a rebajar esa rentabilidad para las plantas renovables para el periodo 2020-2025.

Por ello, fuentes de Energía indicaron que quedan dos años para revisar la retribución de las renovables, y hay factores de muy distinta índole que pueden afectar al rendimiento del bono del Estado a 10 años, como por ejemplo el 'brexit' o la evolución de la prima de riesgo.

Nadal subrayó en el Congreso que la "prioridad número uno" del Gobierno es que todas las empresas y los consumidores "paguen lo menos posible" en la tarifa de la luz.

INFORME DE GOLDMAN SACHS

En su informe, Goldman Sachs identifica tres factores que podrían impactar "significativamente" en los ingresos del sector y que, según el banco de inversión, no parecen estar descontadas por el mercado: que la rentabilidad de la distribución puede caer un 40% durante el periodo 2020-2025, que la revisión de la retribución de las renovables podría conllevar una reducción de los retornos en una tercera parte en 2020, y que las nuevas subastas de renovables pueden meter presión a los precios entre 2019 y 2020. Por todo ello, Goldman rebaja en un 8% sus estimaciones de beneficio por acción de las eléctricas.

Así, tras sus encuentros con representantes del Gobierno, Goldman Sachs se vuelve más cauteloso sobre las 'utilities' ibéricas y recomienda vender y no comprar ningún valor.

De su lado, la agencia de calificación crediticia Moody's ha alertado de que las dos subastas de renovables que han tenido lugar en España este año bajarán los precios del sistema, pero aumentarán los costes y la exposición al riesgo de las empresas adjudicatarias.

Entre las subastas de mayo y julio han adjudicado un total de 8.037 MW de nueva potencia renovable distribuidos entre 3.910 MW fotovoltaicos, 4.107 MW eólicos y 20 MW correspondientes a otras tecnologías.

EL SECTOR TEME QUE SE DESINCENTIVE LA INVERSIÓN

Moody's estima que estas subastas de renovables han reducido los costes de la electricidad y han transferido el riesgo que soportaban el sistema y los consumidores a las comercializadoras, lo cual es "positivo" para la viabilidad del sistema", pero "negativo" para las empresas adjudicatarias de los proyectos.

Fuentes del sector eléctrico consultadas por Europa Press lamentaron que los mensajes lanzados en encuentros del tipo de Goldman Sachs pueden "desincentivar la inversión" en el sector eléctrico español y llamaron a la responsabilidad del Gobierno para promover la llegada de inversores a un sector estratégico español en lugar de "espantarlos".