Con el retroceso de septiembre, la confianza de los consumidores pone fin a una racha de tres meses de ascensos consecutivos, en los que el indicador llegó a situarse en máximos históricos.
El descenso de la confianza de los ciudadanos en septiembre se debe principalmente al fuerte recorte del indicador de situación actual, que retrocedió 9,6 puntos en relación al mes anterior, hasta los 95,8 puntos, su nivel mínimo desde marzo.
También bajó, aunque menos, el indicador de expectativas, que mostró un descenso de 1,6 puntos en septiembre, hasta los 110,5 puntos.