Este descenso de la tasa de desempleo demuestra que el mercado laboral en el país está en constante expansión, destacó el director de la agencia estadística, Ning Jizhe, en una rueda de prensa.
De enero a agosto se crearon unos 9,74 millones de empleos en las regiones urbanas de China, lo que significa que el país está muy cerca de alcanzar el objetivo de generar 11 millones de puestos antes de que finalice el año, una de las prioridades del Gobierno.
El responsable del organismo oficial precisó que el número de trabajadores migrantes que han abandonado sus lugares de origen ha ascendido un 2,1 % en el segundo trimestre en comparación con el mismo periodo del año anterior.
De 2013 a 2016, la tasa de desempleo en las 31 grandes ciudades encuestadas se estabilizó en torno al 5 %, añadió.
Uno de los objetivos gubernamentales es mantener la tasa de desempleo urbano -China no publica cifras sobre ocupación en zonas rurales- por debajo del 4,5 % en 2017.