De esta forma, la riqueza de los hogares se mantiene por encima de los niveles previos a la crisis económica, ya que en el primer semestre de 2007, justo antes del comienzo de la recesión, rozaba el billón de euros. Esto pone de manifiesto que las familias han aprovechado los años de crisis para reducir su deuda y elevar su riqueza.
Al contrario de lo que venía sucediendo en los últimos trimestres, la deuda de los hogares creció un 0,94% en el segundo trimestre del año, hasta situarse en 720.119 millones de euros, aunque es un 1,5% inferior a la registrada un año antes. En términos interanuales, la deuda de los hogares no ha dejado de caer desde el año 2010, coincidiendo con los años más duros de la crisis económica.
Los activos financieros totales de las familias, antes de descontar la deuda que poseen, alcanzaron los 2,14 billones de euros entre abril y junio, un 5,2% más que hace un año y un 0,9% más que en el primer trimestre.
- CINCO AÑOS DE CORRALITO BANCARIO