Así lo señala Moody's en un comunicado, donde asegura que el resultado electoral no resuelve tampoco las tensiones políticas, por lo que la incertidumbre continuará y dará lugar a un mayor deterioro del entorno empresarial. "La llegada de turistas y la confianza en la inversión ya se había deteriorado en Cataluña tras la inestabilidad derivada por la declaración unilateral de independencia el 27 de octubre", subraya la firma.
En este sentido, indica que alrededor de 3.000 empresas ya han trasladado su sede fuera de la región, de las cuales, en torno a 1.000, han reubicado también su sede fiscal. No obstante, subraya que el turismo será uno de los sectores más afectados. "En octubre, el número de turistas extranjeros que visitaron Cataluña disminuyeron e un 4%, mientras que aumentaron en un 5% los que llegaron a España en su conjunto durante el mismo periodo", explica.
Del mismo modo, la firma estadounidense cree que el enfoque de los procedimientos de independencia "debilitará aún más las ya débiles finanzas de la región", pues los programas electorales de los partidos proindependentistas carecen de medidas de consolidación fiscal y el foco de su agenda política es la hoja de ruta hacia la independencia. Cataluña tiene un alto déficit y es la región con mayor deuda del país, apunta Moody's.
El 21 de diciembre, se celebraron las elecciones anticipadas en la región de Cataluña, donde Junts per Catalunya (JxCat), Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y la Candidatura a la Unidad Popular (CUP) obtuvieron 34, 32 y 4 escaños respectivamente, dando a los separatistas 70 escaños, dos más que los 68 escaños necesarios para una mayoría en el parlamento catalán. Ciudadanos, por su lado, logró el mayor número de votos, con 37 escaños en el parlamento regional.